¿Habrá otro Tijerino?

¡Doble Play se muda de frecuencia! Las mismas voces y el agregado de la TV en vivo con dos radios cubriendo simultáneamente cada palmo del país, son los accesorios nuevos que luce un programa que ha construido una sólida marca con sello de perdurabilidad en la radiodifusión nicaragüense.

La aparición del príncipe

En medio de tanta escasez, sin referente nacional alguno emergió bruscamente de la nada Rubén, el primerísimo. Darío nos vistió de boutique con su pluma maravillosa sacándonos de un larguísimo anonimato. El genio resonó por toda la esfera habitada con Prosas Profanas, Azul, Cantos de Vida y Esperanza y un caudaloso océano de poemas. Es con él, que todo ojo humano se entera de nuestra existencia.

¡Gracias flaco!

Hasta la aparición estupenda de Alexis Argüello la nación estuvo aislada sin ningún impacto de notoriedad mundialista. “El Flaco Explosivo” dinamitó esa sequía erupcionando desde la miseria hasta conseguir un primer título mundial de boxeo para Nicaragua frente a Rubén El Púas Olivares.

Mientras Argüello aniquilaba toda oposición en el cuadrilátero de polo a polo, la escritura de Edgar Tijerino se desnudaba al público pinolero exponiendo un estilo que mediante una especie de cocción a través de la mejor literatura de habla hispana ganó adeptos inmediatamente. Con Alexis las crónicas y coberturas de Edgar cimentaron la carrera de uno de los mejores cronistas deportivos de América Latina.

El estallido de otro jerarca del béisbol como lo fue Dennis Martínez también es pieza clave en la consolidación de una mente brillante cultivada con ahínco y persistencia en el hábito. La historia de Argüello y Martínez está mejor contada porque Edgar supo unir verbos en cada columna dejando en el rastro de ambos la sonoridad de quién pone en cada letra un trozo de vida.

Las tres coronas mundiales, las dos peleas contra Pryor, el “matrimonio fatídico” con la política, el alcohol, las drogas, toda una memoria del más grande atleta llamado Alexis Argüello tiene un aliado en el tiempo y ese es Tijerino.

"La radio-grafía"

Doble Play es punto de inflexión para los nicas, un espacio dónde lo social y lo político se funden con el fútbol o la NBA. Es la ventana radial desde la cual el oyente expone sin ambigüedades su punto de vista y polemiza sintiendose parte del mismo.

Aunque nadie, ni siquiera Mozart es 100% original porque siempre hay un punto de partida, las líneas de Tijerino tienen autenticidad, se “casan” con El Gabo y Víctor Hugo por ejemplo. Se le entiende cuando leer es nuestra brújula.

Rodeado de un equipo eficiente el maestro a discipulado a un buen número de voces que con los años se han establecido logrando confeccionar carreras de forma individual, no sin antes pasar por el ojo de un “gran scout” que ha hecho escuela detrás del micrófono y desde el teclado de una laptop.

Los libros

Decía Gabriel García Márquez que “el periodismo es el mejor oficio del mundo”; y Edgar ha transitado su vida ejerciéndolo con una efectividad que sobrepasa las medianías porque como todo exitoso, los límites no existen para él. Con 12 libros en su portafolio y un vastísimo anaquel de clásicos literarios en su biblioteca que alimentan esa curiosidad jamás perdida, Tijerino y Doble Play son la misma cosa, les une una conexión umbilical irrompible.

Lo mejor del deporte nicaragüense con la descripción de un prosista consagrado -que bien pudo atreverse a escribir una novela- cohabita junto a un autor de élite. Doblando la curva de los setenta años Edgar Tijerino es un hito del periodismo en Nicaragua. Difícilmente -creo yo- veremos otro personaje dotado de una memoria prodigiosa que relata sin googlear el recorrido de Babe Ruth, Ted Williams, Alí, Federer, Clemente y Jordan sin pestañear.

"La patria está llorando"

En un mundo donde la evolución electrónica avanza casi al atropello y el leer no es tan apetitoso (excepto si la monografía lo exige) Edgar será una referencia ineludible difícil de emular.

T. S. Eliot, afirmaba que la cultura es “Todo aquello que enriquece la vida.” Edgar parece no pensar en el retiro y menos renunciar a la lectura. Zigzagueando entre los destrozos de una patria fragmentada reiteradamente por sus estadistas, dónde enriquecerse ilícitamente, masacrar estudiantes e imponer voluntades a punta de balas es una pandemia, la voz crítica de Tijerino en sus dos audiciones pica y se extiende.

¡Saludos Edgar!