4 de enero 2023
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Los familiares de los presos políticos en El Chipote reiteraron la exigencia de libertad para todos los reos de conciencia del régimen en Nicaragua. A la par, demandaron que las visitas familiares —con menores de edad incluidos— sea una “práctica general” en lo sucesivo.
En un comunicado, los familiares relataron el ambiente en que se efectuaron unas tres visitas especiales a los presos políticos en El Chipote, que el régimen autorizó en ocasión de las festividades de La Purísima, Navidad y Año Nuevo.
En las tres visitas, por primera vez, la dictadura permitió que los presos políticos vieran a sus hijos menores de edad. En el caso de los reos de conciencia que tienen a sus hijos fuera del país pudieron hablar por teléfono, realizar videollamadas, leer cartas o ver fotografías de ellos aunque, una vez finalizado el encuentro, no pudieron conservarlas.
“Después de un año y medio, se les permitió a nuestros familiares ver y abrazar a sus hijos e hijas menores de edad que residen en Nicaragua, así como videollamadas con familiares que están fuera del país. También se permitió el ingreso de cartas y fotografías”, detallaron en el comunicado.
“Confiamos que las visitas familiares regulares incluyendo a menores de edad continuarán siendo la práctica general, pues constatamos la
relevancia de que los niños y niñas mantengan contacto con sus papás y mamás. Esperamos que su bienestar sea una prioridad”, señalaron los familiares.
Añadieron que, “en ese sentido, lamentamos lo sucedido con la familia Mendoza, y deseamos puedan reunirse nuevamente durante el mes de enero 2023”.
La dictadura prohibió al preso político Miguel Mendoza recibir la visita de sus familiares, en ocasión de las festividades de fin de año y Año Nuevo. En un comunicado, la familia del cronista deportivo denunció que “una funcionaria (de la Policía) notificó vía telefónica que la visita programada para Miguel, había sido cancelada siguiendo una orden, debido a las publicaciones en redes sociales”.
Mejores condiciones para los familiares y presos políticos
“Las tres visitas se llevaron a cabo en un ambiente de cordialidad y respeto, según derecho. Durante estas visitas no hubo requisas agresivas y se utilizaron los medios tecnólogicos apropiados para llevar a cabo las revisiones pertinentes”, destacaron los familiares.
En noviembre pasado, durante una visita en El Chipote —tras casi tres meses de no permitir los encuentros—, los familiares de los reos de conciencia sufrieron humillaciones y tratos degradantes antes de ver a sus seres queridos. Dos testimonios, recabados por el programa Esta Semana, confirmaron que las mujeres fueron desnudadas y obligadas a hacer sentadillas por las autoridades para verificar supuestamente si no “llevaban nada de afuera”.
“Durante las visitas se nos informó que en este periodo se ha garantizado debidamente el derecho a patio sol y las raciones de comida han aumentado”, señalaron.
“Asimismo —prosiguieron—, en varios casos se ha permitido el ingreso de mejores colchonetas, frazadas y almohadas, lo cual esperamos se extienda a todas las personas presas políticas.
“Confiamos en que estos derechos serán garantizados o mantenidos para todos y todas”, subrayaron.
“Nuestras oraciones, fuerzas y energías continúan puestas en que cada una de las más de 236 personas presas políticas pueda abrazar a sus familias en su hogar. Nuestra convicción sigue siendo la libertad inmediata, con todas las garantías y derechos”.
