9 de noviembre 2022
El dictador nicaragüense, Daniel Ortega, defendió los resultados de las votaciones del domingo 6 de noviembre, argumentando que demostraron que la mayoría de nicaragüenses “votaron por la paz y no por partidos políticos”, y por eso, según el dictador, es que su partido, el Frente Sandinista, se adjudicó el 100% de las alcaldías de Nicaragua.
“Podemos decir que es un hecho histórico que en estas elecciones del domingo pasado, porque por primera vez en la historia de nuestro país, el pueblo depositó su voto pensando en el bienestar de la familia, y no pensando en partidos políticos, en tanto están convencidos de que el partido político al que ellos pertenecían no había hecho nada y no quedaba más camino que seguir votando por el Frente Sandinista”, aseguró Ortega.
“La gente está cobrando conciencia, incluso aquellas que tienen otra bandera política. En los 17 años (en alusión a los Gobiernos democráticos de 1990 a 2007) tuvieron alcaldes por todos lados, ¿y que hicieron?, nada. En cambios, estos alcaldes sandinistas, desde el 2007, han continuado haciendo más obras”, añadió.
La dictadura de Ortega y Rosario Murillo se adjudicó todas las alcaldías de los 153 municipios de Nicaragua, según los reportes del Consejo Supremo Electoral (CSE), controlado por operadores orteguistas. Estas votaciones no contaron con la participación de verdaderos políticos opositores, ni ningún tipo de observación electoral.
Esto derivó en que se diera una escasa participación ciudadana. El observatorio ciudadano Urnas Abiertas indicó que durante estas votaciones #Municipales2022 se registró un abstencionismo del 82.7%. Ese nivel de abstención supera al observado en la “farsa electoral” de 2021, que fue del 81.5%.
Analistas consultados por CONFIDENCIAL explicaron que el régimen demostró que “avanza” hacia la imposición de un sistema de partido único en Nicaragua, aunque este no es un tema que se produzca “de hecho”, ya que habría que reformar la Constitución y las leyes. En la práctica los nicaragüenses han quedado “sin opciones” políticas.
Ortega obvia represión durante jornada de votaciones
“Por primera vez en la historia en que en un día de elecciones, no hay agresiones, no hay pedradas, ni garrotazos, ni balazos, ni heridos. No corrió ninguna gota de sangre”, se vanaglorió el dictador.
“Estas elecciones municipales nos indican con toda claridad que es posible ganar la paz, asegurar la paz. No se bañó de sangre, como los terroristas financiados por el imperio yanqui bañaron de sangre a Nicaragua”, agregó Ortega en alusión a las protestas ciudadanas de abril de 2018, reprimidas a sangre y fuego por los paramilitares del régimen y la Policía, violencia que dejó más de 350 muertos.
Urnas Abiertas monitoreó 31 capturas de opositores el fin de semana de las votaciones en operativos de la Policía del régimen en Carazo, Managua, Masaya, Río San Juan, Rivas y en el Caribe Sur. En Bilwi se dieron conatos de protesta por la imposición del alcalde sandinista, los cuales fueron reprimidos por la Policía.
#AlertaUA 🔴 #Urgente Denunciamos el incremento de violencia política en el contexto electoral.
Del 1 al 7 de noviembre verificamos 31 detenciones arbitrarias en 7 departamentos y 19 municipios, en colaboración con el @AzulyMonitoreo pic.twitter.com/NxZOJlkIpQ
— Urnas Abiertas (@UrnasAbiertas) November 9, 2022
La directora de Urnas Abiertas, Olga Valle, dijo que algunas personas que, no son reconocidas como militantes del Frente Sandinista, fueron hostigadas por policías electorales que les tomaban fotos al llegar a su centro de votación, o les impidieron ingresar. “Hay casos de personas que estando dentro de la JRV son señaladas de “tranqueras” y luego expulsadas”, aseguró.
En algunos municipios del norte del país, donde simpatizantes e integrantes de otros partidos políticos se preparaban para defender el voto, hubo hostigamiento por parte de afiliados al FSLN, que amenazaban a la población para que no saliera a votar, pues podrían ser detenidos o sus vehículos quemados.
Ortega alude que Costa Rica es una “base de terroristas”
“Y eso que hicieron planes, auspiciados por los yanquis, por los Gobiernos europeos, cuyos embajadores conspiran aquí con los terroristas, para darles financiamiento para que promuevan la violencia. A pesar de eso, de los millones que les dieron en Costa Rica, que es una base que tienen ahí, no lograron provocar hechos de violencia”, insistió Ortega.
Urnas Abiertas dijo que su presencia en al menos 148 de los 153 municipios del país, les permitió constatar que fue constante la “presión absoluta” de todas las instituciones del Estado, en contra de los empleados públicos para forzarlos para acudir a los centros de votación, incluyendo a sus familiares en edad de votar.
El organismo de monitoreo ciudadanos destacó que fue un sistema de “vigilancia absoluta”, en el que hubo puestos de control en las afueras de los centros de votación o en las casas vecinas. A veces, efectuado desde un toldo con sillas para vigilar quién llegaba a votar, como continuación del esquema de amenazas que se implementó en los días previos al 6 de noviembre.
Ortega participó este martes en un acto en el que depositó una ofrenda floral en el mausoleo del fundador del Frente Sandinista, Carlos Fonseca Amador, por el 46 aniversario de su muerte, y luego se trasladó al polideportivo Alexis Argüello, donde dio el discurso de clausura del Congreso de la Juventud Sandinista.
Sus primeros 40 minutos de discurso fue su habitual recorrido histórico en el que abordó la colonización española, la batalla del general Benjamín Zeledón, la rebelión de Augusto C. Sandino y la dictadura somocista.
Daniel Ortega: Estados Unidos es un Gobierno de “perras que paren perros”
Fue en este intervalo, en que calificó al Gobierno de Estados Unidos como “perras que paren perros para desangrar al mundo y la humanidad, y andar destruyendo a los pueblos”. Cuando se refirió a la crisis de 2018, señaló que los obispos de la Iglesia católica bendijeron el “terrorismo que se vivió ese año” y que algunos incluso se sentían los “dueños de Nicaragua”.
Hizo una velada amenaza a las empresas de telecomunicaciones del país, señalando que estas fueron privatizadas porque era un negocio que registraba buenas ganancias y que los pagos de impuestos que hacen no eran justos en comparación con los beneficios económicos que obtenían. “Habrá que revisar eso”, mencionó el dictador.
Al final de su discurso, Ortega cuestionó el rol de las Naciones Unidas y precisamente, su secretario general, Antonio Guterres (al que llamó Gutiérrez en diversas ocasiones), porque según él, no son firmes en exigir a las grandes potencias a que asuman su responsabilidad para detener el cambio climático, y particularmente, en no presionar a Estados Unidos a levante el embargo contra Cuba.
“No hay democracia en las Naciones Unidas, solo está la democracia que imponen las grandes potencias”, expresó Ortega, en alusión al amplio respaldo que tuvo la votación a favor de poner fin al embargo a Cuba, obviando el hecho que en esa misma organización, una gran mayoría de países condenó la invasión de Rusia a Ucrania, y Nicaragua, en un gran de acto de servilismo político, votó a en contra de esta resolución.