25 de febrero 2022
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El exdiplomático Mauricio Díaz Dávila, de 71 años de edad, fue sentenciado a nueve años de cárcel e inhabilitado a ejercer cargos públicos, supuestamente por “conspirar para cometer menoscabo contra la integridad nacional”, señaló la justicia orteguista, en una audiencia realizada este jueves 24 de febrero en las instalaciones carcelarias de El Chipote.
El también directivo nacional del partido Ciudadanos por la Libertad (CxL) fue declarado culpable el pasado 16 de febrero en un juicio hermético, a cargo del judicial Luden Quiroz García, del Juzgado Noveno Distrito Penal de Juicio. Según la defensa, la Fiscalía no logró probar el presunto delito.
Díaz se convierte en el decimonoveno reo de conciencia condenado por el régimen desde que iniciaron los juicios políticos, el 1 de febrero. En cuatro semanas, la justicia orteguista ha declarado culpable, principalmente, por los supuestos delitos de “conspiración” y “propagación de noticias falsas” a 27 reos de conciencia.
En los pocos minutos que la justicia orteguista concedió a Díaz para expresarse durante el juicio, el exdiplomático se declaró “inocente” y resaltó que siempre ha sido “una persona honesta, transparente y que nunca ha pedido financiamiento externo o conspirado contra su país”. Además, resaltó: “Mientras no me condene Dios, que me condene el hombre”.
Mauricio Díaz: “Vender mi patria me daría vergüenza”
El reconocido abogado recordó que él participó “en la creación de la Constitución Política del país, todas esas leyes ya me las sé y no las estoy infringiendo”.
“Nosotros luchamos por las libertades de este pueblo. Vender mi patria me daría vergüenza”, destacó.
Entre las pruebas presentadas por la Fiscalía orteguista se incluyeron testimonios de oficiales de la Policía Nacional; detectives y peritos informáticos, y videos de entrevistas que el reo de conciencia concedió a los medios de comunicación Canal 10 y 100% Noticias, donde daba “criterios políticos” sobre la coyuntura del país.
Mauricio Díaz Dávila fue detenido el 9 de agosto de 2021, luego de ser capturado con violencia por un grupo de oficiales de la Policía Nacional que lo interceptaron, golpearon a su hijo y al abogado que lo acompañaba, después de declarar ante la Fiscalía orteguista.
El encierro de más de 190 días al que ha sido sometido ha deteriorado la salud física y psicológica. Sus parientes han denunciado que dentro de las celdas de El Chipote ha sufrido desmayos, tiene lagunas mentales y manchas en su piel como consecuencia de las pocas horas de sol que tiene autorizadas.
