25 de diciembre 2018
La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo se propone poner en marcha una nueva “política de defensa nacional” para este 2019, que incluye aumentar el reclutamiento de oficiales de la Policía y recortar en 30% la planilla en los diferentes ministerios del Estado y ente autónomos, según un documento de trabajo atribuido a la vicepresidenta Rosario Murillo.
El borrador, que no tiene firma de Murillo aunque aparece en una papelería con los sellos de su caligrafía y consignas oficiales, se denomina “La defensa es primero… por la paz, por el bien común, por la producción”, ha comenzado a circular el fin de semana entre los altos cuadros del partido y del sector público, que lo filtraron a través de las redes sociales.
“En el nuevo contexto de agresión, debemos reforzar nuestra convicción moral y combativa en todos los frentes. La Nica Act, como herramienta imperial, es un solo un reconocimiento más a que nuestro camino de Paz, Unidad y Reconciliación es el indicado. Hoy más que nunca les decimos en voz altiva con la luz del Sol que no declina: ¡No Pudieron, ni Podrán!”, justifica el documento.
La Policía sandinista, una de las principales violadoras de los derechos humanos durante las rebelión cívica, ejercerá uno de los principales roles planteados en la estrategia, que no menciona al Ejército de Nicaragua. El régimen mantiene su insistencia en una política de “reconciliación” debe ser realizada por los agentes.
La estrategia propone un “incremento del 15% al reclutamiento de nuevos agentes para el año 2020, profesionalizando a nuestros actuales cuadros y ampliando su base territorial según el punto anterior”. A la vez, propone aumento salarial del 12% a los policías para el año 2019.
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También establece que a los “Gabinetes de Seguridad Ciudadana” se integrarán retirados del extinto Ministerio del Interior, Servicio Militar Patriótico, y del Ejército Popular Sandinista. A ellos les nombra “líderes comunitarios e instructores de defensa para instituciones, puntos estratégicos y claves para la seguridad de cada comunidad”. Han sido parte de esto retirados que han servido como paramilitares para reprimir a la ciudadanía.
“Se creará un Gabinete Nacional de la Defensa por la Paz y Seguridad, que incluirá: 1 representante de la Unidad de Análisis Financiero, 3 Representantes de la Policía Nacional, los Secretarios Políticos Departamentales, y dos representantes del Ministerio de Gobernación. La tarea del Gabinete será la de Coordinar, Informar y Ejecutar por orden presidencial los planes para la promoción de la Paz y la Seguridad en el país”, sostiene la estrategia para la defensa.
A nivel local estructurarán con las alcaldías y las delegaciones policiales de cada comunidad los “Batallones de Defensa y Producción, organizando la Policia Voluntaria y coordinando los planes de seguridad desde el pueblo y para el pueblo”.
“Austeridad y honestidad”
Previendo el impacto económico que causarían las sanciones de la NicaAct en los fondos para financiar el presupuesto, la “estrategia para la defensa” propone recortara en un 30% del personal de los ministerios y entes autónomos del Gobierno.
A esta propuesta le llaman “austeridad y Honestidad: La Base Moral para la Construcción de un Modelo Cristiano, Socialista y Solidario”. “Este nuevo contexto nos obliga a tomar decisiones que aunque son duras, servirán de base para un Proyecto Revolucionario más Sólido, Fuerte y con una Madurez que será parte legado de Paz y Armonía para las nuevas generaciones”, justifica el documento.
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Para recortar a los empleados públicos crearán un “Gabinete de Compactación Estatal”. Estará presidido por el presidente del Banco Central, Ovidio Reyes, junto a Coordinadores de los Consejos de Liderazgo Sandinista (CLS) de cada institución estatal, miembros del Frente Nacional de los Trabajadores (FNT), representantes del Ministerio del Trabajo y del INSS.
“La Estrategia de compactación tiene como objetivo poder disminuir la masa laboral en los Ministerios y Entes Autónomos en un 30%. Exceptuando los Ministerios del Gabinete Social, donde la disminución será del 10%”, dice el punto “B” de ese acápite de la estrategia.
Una empleada pública dijo a Confidencial que la austeridad ya estaba llegado a los ministerios desde antes de la publicación de esta estrategia. Les han exigido usar los aires acondicionados entre las 9 de la mañana y las 3 de la tarde únicamente. El algunos casos habrá reducción de salarios, y en las áreas de adquisiciones han orientado que no se le podrá comprar a proveedores que no estén al día con el pago de impuestos.
Según la estrategia de defensa, los “Consejos de Compactación” de cada institución tendrán reuniones quincenales a partir de enero 2019, para presentar sus propuestas de disminución de personal "con el objetivo de que en junio 2019 ya se hayan cumplido las cuotas establecidas en la Estrategia”.
La estrategia también propone los lineamientos para despedir a los empleados públicos. O en los eufemismos de la dictadura, una “Guía de Evaluación Integral”. De acuerdo al documento, los principales requisitos son: “Compromiso y Defensa de la Revolución, Aporte Monetario al Partido, Cumplimiento de Objetivos Laborales, y Asistencia a Actividades Partidarias”.
Hay un parámetro adicional denominado "Características de Revisión Especial”, que consistirá "cercanía a la Edad de Jubilación, Puestos Repetidos y Nivel de Especialización Técnica”.
Como remedio para los empleados despedidos pretenden formar “Comités de Reinserción Laboral” para apoyar a los “Compañer@s a poder aplicar a los diferentes Programas que nuestro Buen Gobierno les ofrece y de esa forma tener una oportunidad de seguir construyendo Patria desde el Comercio, la Producción y el Emprendedurismo (Sic)”.