24 de junio 2021
La ministra de Relaciones Exteriores de Panamá, Erika Mouynes, requirió este jueves a la comunidad internacional a actuar en conjunto para tratar de resolver la situación que vive Nicaragua, con la detención de cinco líderes opositores al Gobierno de Daniel Ortega en las últimas semanas a menos de cinco meses de las elecciones en las que el presidente nicaragüense busca ser reelegido por cinco años más.
"Desde Panamá seguimos este tema con muchísima preocupación, pero esto ha pasado en pocos días, y para nosotros es una prueba para la comunidad internacional", dijo Mouynes en una entrevista con EFE en Madrid, primera parada de su viaje europeo que le llevará también a Bruselas.
La canciller panameña advirtió de que la situación actual de Nicaragua hace pensar en "la que vivió el mundo cuando comenzó lo de Venezuela" y subrayó que "esto es una nueva prueba" para la comunidad internacional.
"¿Qué vamos a hacer al respecto? ¿Hay que tratar de dialogar y manejarlo de una manera colegiada, al unísono, o vamos cada uno por su cuenta? ¿Tratamos de tener acciones que den resultado o simplemente miramos al otro lado y no hacemos nada al respecto?", planteó Mouynes.
Cancilleres de la región preocupados
La ministra destacó el papel que está teniendo Panamá en buscar soluciones a la situación política nicaragüense, "como puente entre muchos países que mantienen la misma preocupación".
"En los últimos días he mantenido conversaciones permanentes con muchísimos cancilleres de la región sobre qué hacer al respecto, cómo nos podemos articular, y ese mismo análisis es lo que traemos acá y lo que queremos articular con España y con Europa. Queremos visibilizar lo que está ocurriendo", dijo.
Remarcó además la trayectoria de Panamá de ser "un país de consenso, de sosiego, conciliador" y "esa misma articulación política es la que traemos a España.
"Pensamos que España puede ser el líder dentro de Europa para recuperar el diálogo político y tratar de articular espacios dentro de la región latinoamericana", señaló.
Congreso de México expresa preocupación por Nicaragua
El Congreso mexicano expresó su "preocupación" por las agresiones en Nicaragua, que suma 20 encarcelados políticos conocidos por el Gobierno de Daniel Ortega en las últimas semanas, aunque evitó una condena directa.
"La Comisión Permanente del Congreso de la Unión manifiesta su profunda preocupación por los hechos recientes en los que las libertades políticas, civiles y de libre expresión están siendo agredidas en Nicaragua", declaró el presidente de la comisión, el senador Eduardo Ramírez, al leer el pronunciamiento.
La Comisión Permanente del Congreso de México, que incluye al Senado y a la Cámara de Diputados por ser periodo extraordinario, "valoró" la decisión del Ejecutivo de llamar a consultas al embajador del país en Nicaragua, Gustavo Alonso Cabrera.
"(Esto) para conocer el estado de las acciones políticas-legales realizadas por el Gobierno de ese país que han puesto en riesgo la integridad y libertad de representantes de la oposición, activistas y personalidades de la sociedad civil nicaragüense", expuso el pronunciamiento.
La Comisión Permanente hace votos para que el pueblo de Nicaragua recupere los espacios políticos para la reconciliación, la paz interna y el respecto irrestricto a los #DDHH y que el proceso electoral del 7 de nov se celebre de manera libre y transparente.#Pronunciamiento pic.twitter.com/0j32NWvB5B
— Eduardo Ramírez (@ramirezlalo_) June 23, 2021
Pese a las declaraciones, México se negó, junto a Argentina, a acompañar una resolución aprobada el 15 de junio por 26 países de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para condenar la persecución de los opositores, con el argumento de la "no intervención en asuntos internos".
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha profesado su política de "no intervención" y "libre determinación de los pueblos" en otros asuntos internacionales.
En esa sintonía, "la Comisión Permanente hace votos para que el pueblo nicaragüense recupere los espacios políticos para la reconciliación, la paz interna y el respeto a los derechos humanos", según el senador Ramírez.
El Congreso también hizo votos para "que se generen las condiciones para que la elección general del 7 de noviembre, se celebre de forma libre, legal, incluyente, transparente y pacífica".