24 de junio 2021
Luego de 35 días de ausencia de eventos públicos, Daniel Ortega reapareció para brindar un discurso de casi una hora en el cual desafió a la comunidad internacional ante las demandas de liberación de presos políticos, calificando de "absurdos" estos pedidos y asegurando que no habrá marcha atrás en lo que denominó procesos judiciales por delitos de "traición a la patria" y "lavado de dinero", en contra de quienes calificó como "conspiradores que preparaban un nuevo golpe de Estado".
Entre el 2 y el 20 de junio, el régimen nicaragüense detuvo e inició procesos penales arbitrarios contra los precandidatos presidenciales: Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro y Miguel Mora. También han sido arrestados dos exvicecancilleres, dos históricos exguerrilleros sandinistas disidentes, un exdirigente empresarial, un banquero, cuatro activistas, dos extrabajadores de una ONG, un cronista deportivo, una exdiputada y un conductor.
Daniel Ortega incluso descalificó que se denominen como precandidatos presidenciales a algunos de los detenidos e insistió en que no habrá eco a los pedidos de liberación de estos ciudadanos hechos por la comunidad internacional, aduciendo que varios países, encabezados por Estados Unidos, eran partícipes de la denominada conspiración en contra del Gobierno.
"Que no vengan con el cuento de que son candidatos, si no hay ningún candidato inscrito. Ni siquiera tenían un solo candidato recordemos bien, aun cuando los reunían en las embajadas para para que se unieran. En la embajada yanqui en primer lugar y otras embajadas que estaban metidas de lleno para que se unieran. A cuenta de que están hablando tranquilamente en los medios de comunicación global de la derecha que están detenidos tantos precandidatos", afirmó.
"No eran ni precandidatos ni de su propio grupo, mucho menos que fueran precandidatos presidenciales. Eso nunca existió. Que quede claro que aquí no estamos juzgando a políticos, ni candidatos, sino que se está juzgando a criminales que atentaron en contra del país, contra la seguridad del país y contra la vida de los ciudadanos, ya que estaban organizando otro 18 de abril, otro golpe de Estado, para lograr lo que ellos llaman el cambio de régimen. Eso es lo que estamos persiguiendo, investigando y en su momento se castigará, tal y como establecen las leyes", advirtió.
Todos los encarcelados-a excepción de Cristiana Chamorro que es investigada por delitos de supuesto lavado de dinero- han sido acusados bajo lo establecido en la Ley 1055, “Ley de Defensa de los derechos del pueblo a la Independencia, a la Soberanía, y autodeterminación para la Paz”, la misma que ha sido aplicada para “criminalización” de los opositores.
"Que dejen de estar con ese absurdo de que nos mandan a decir que los pongamos libres. Le vamos a pedir nosotros a otro país, le vamos a pedir a los Estados Unidos que liberen a los 400 norteamericanos que tienen presos de los que llegaron a asaltar el Congreso de los Estados Unidos. Ahí los tienen presos, los están investigando, los están juzgando. ¡Son más de 400 ahí, y aquí están pegando gritos por 20!" afirmó el dictador.
El 15 de junio una resolución con 26 votos a favor del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) demandó la liberación de los presos políticos capturados en esta ola represiva. Demandas en ese sentido también se han hecho desde el seno de la Unión Europea, Estados Unidos y el mismo sistema de las Naciones Unidas.
Ortega también acusó a países de Europa, como Francia y España, de tener presos políticos por razones migratorias o demandas independentistas, y que ninguna autoridad u organización regional les está exigiendo su liberación. En sentido, también se refirió a que Nicaragua no está exigiendo a gobiernos de Latinoamérica a que liberen a encarcelados por realizar actos delictivos. "Que se olviden estos de que en Nicaragua no hay justicia. Ellos si pueden hacer los que les da la gana", insistió el dictador.
Daniel Ortega compara capturas políticas con las de robos de celulares o bicicletas
Ortega comparó las capturas en esta nueva escalada represiva contra opositores, empresarios y periodistas, como las que realiza la Policía de alguien que roba un celular o una bicicleta, insistiendo en que solamente lo se que está haciendo es cumplir con las leyes vigentes en Nicaragua.
"La Policía captura, lo manda a la Fiscalía y luego va al juez. Ese principio va para todos. Aquí no es cuestión de no los puede tocar la Policía o la Fiscalía, porque son de la alta sociedad y porque además, es un agente del imperio yanqui. Y conspiran contra Nicaragua para derrocar al Gobierno. Eso no es nuevo, los vimos en acción en 2018. Destrozaron un acuerdo de entendimiento que iba caminando bien, solo por hacerle caso al imperio yanqui de se tenía que dar un cambio de Gobierno en Nicaragua”, añadió.
Ortega se mofó de las sanciones en contra de sus funcionarios y familiares, tildándolas de ser mecanismos de presión y ahogo económico contra Nicaragua, pese a que todas las sanciones hasta la fecha se han enfocado en casos particulares. "Piensan que con sanciones van a doblegar a Nicaragua. Nicaragua ha pasado momentos más duros y más difíciles”, refirió, especificando la década de los años 80, durante sus primeros dos mandatos de Gobierno.
El discurso de Daniel Ortega se dio en el marco del 85 aniversario del nacimiento del fundador del Frente Sandinista, Carlos Fonseca Amador. En tono desafiante, al final de su discurso, el dictador insistió que la Policía continuará con las supuestas investigaciones por lavado de dinero y traición a la patria. "Ni un paso atrás, siempre adelante", exclamó al terminar su discurso.