21 de junio 2021
Los Gobiernos de México y Argentina llamaron a sus embajadores en Nicaragua, Gustavo Cabrera Rodríguez y Mateo Daniel Capitanich, respectivamente, para consultarles sobre “las preocupantes acciones políticas-legales realizadas por el Gobierno nicaragüense”, según un comunicado oficial conjunto.
Según la comunicación, estas acciones “han puesto en riesgo la integridad y libertad de diversas figuras de la oposición (incluidos precandidatos presidenciales), activistas y empresarios nicaragüenses”.
En las últimas semanas, el régimen orteguista ha encarcelado a cinco precandidatos presidenciales —Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Juan Sebastián Chamorro, Miguel Mora y Félix Maradiaga— y a nueve dirigentes de la oposición: José Adán Aguerri, Violeta Granera, José Pallais, Támara Dávila, Ana Margarita Vijil, Dora María Téllez, Suyén Barahona, Hugo Torres, Víctor Hugo Tinoco y Luis Rivas Anduray. A ellos se suman Marco Fletes y Walter Gómez, extrabajadores de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCh), investigada por la Fiscalía por el supuesto delito de lavado de dinero, y Pedro Vásquez, conductor de Cristiana Chamorro.
Harold Rocha, experto en Derecho Internacional, señaló que, en 2018, Argentina ya había llamado a consultas a su embajador en Nicaragua, tras la presentación del informe final del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que señaló de cometer crímenes de lesa humanidad al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
“Que lo haga ahora, acompañado de México, que son los dos países que hace pocos días se ofrecían para mediar en la liberación de presos políticos, sugiere que ya no ven que eso sea viable. La lectura es de mayor gravedad”, comentó el académico.
Votación en la OEA
La semana pasada ambos países se abstuvieron durante una votación del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americano (OEA), que condenó el arresto de opositores y exigió su liberación “inmediata”.
En el comunicado conjunto afirman que “Argentina y México se mantendrán atentos a la evolución de los acontecimientos relacionados con la hermana República de Nicaragua, y seguirán promoviendo inequívocamente el pleno respeto y promoción de los derechos humanos, las libertades civiles, políticas y de expresión de toda persona, con independencia de su nacionalidad y/o profesión”, prosigue la nota.
“Reiteran asimismo, su disposición plena para colaborar constructivamente en la promoción del diálogo para que sean las y los propios nicaragüenses, quienes superen esta situación por la vía pacífica, respetando la división de poderes, el respeto a las minorías, las garantías constitucionales y, en general, el pleno respeto al estado de Derecho y todos los derechos humanos”.
Después de la votación del Consejo Permanente, el embajador argentino en la OEA, Carlos Raimundi, leyó un comunicado conjunto entre Argentina y México en el que señaló la “preocupación por los acontecimientos ocurridos recientemente en Nicaragua, especialmente por la detención de figuras de la oposición, cuya revisión contribuiría a que el proceso electoral nicaragüense reciba el reconocimiento y el acompañamiento internacional apropiados”.
“No estamos de acuerdo con los países que, lejos de apoyar el normal desarrollo de las instituciones democráticas, dejan de lado el principio de no intervención en asuntos internos, tan caro a nuestra historia”, continuó Raimundi.