21 de julio 2018
El Gran Ducado de Luxemburgo anunció la "congelación" de los desembolsos dirigidos al Gobierno de Daniel Ortega, incluyendo también la suspensión "del proceso de firma del nuevo Programa Indicativo de Cooperación" debido a la "escalada de la violencia, represión y detenciones arbitrarias" desde que iniciaron las protestas el pasado 18 de abril.
Luxemburgo reveló que tomó esa decisión porque su aporte "siempre se ha basado en el respeto de los derechos humanos y los valores democráticos”.
Jean Asselborn, Ministro de Asuntos Exteriores y Europeos, y Romain Schneider, Ministro de Cooperación y Acción Humanitaria, expresaron su "profunda preocupación por el deterioro de la situación en Nicaragua".
"Los ministros expresan sus condolencias a las víctimas y solicitan que los responsables de la violencia sean llevados ante la justicia. Al igual que la Unión Europea, Luxemburgo llamó a las diferentes partes en Nicaragua de detener inmediatamente la violencia y respetar los derechos humanos, y subraya la necesidad de poner en práctica todas las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)", indicaron en un comunicado.
Este es el segundo Gobierno que suspende cooperación, tras la decisión de Holanda de suspender por dos meses, los 18.4 millones de euros (21.6 millones de dólares al cambio en este momento), ofrecidos a Nicaragua en concepto de cooperación para construir un hospital en Bilwi, Región Autónoma del Caribe Norte, “debido a las graves violaciones de derechos humanos cometidos por oficiales del gobierno y grupos parapoliciales”.
Priorizan apoyo para solucionar crisis
El comunicado del Gobierno de Luxemburgo señala que Nicaragua ha sido un país socio de la cooperación desde la década de 1990. "Nuestra cooperación siempre se ha basado en el respeto de los derechos humanos y los valores democráticos. Dada la situación actual, Luxemburgo ha tomado las medidas necesarias, incluyendo la congelación de los desembolsos dirigidos al gobierno y la suspensión del proceso de firma del nuevo Programa Indicativo de Cooperación con el gobierno de Nicaragua", indican.
Además, señalan que Luxemburgo "está fortaleciendo su apoyo a la sociedad civil y las organizaciones de derechos humanos en el terreno, y también se está concentrando en los aspectos regionales de la cooperación en América Central".
"Luxemburgo ha decidido apoyar financieramente los instrumentos de la CIDH teniendo como objetivo de contribuir a una solución pacífica de la crisis en Nicaragua, en particular apoyando al Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI) y al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de Nicaragua (GIEI-NIC)", expresa el comunicado.
Reiteraron que el pasado 17 de julio de 2018, la Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y Vicepresidenta de la Comisión Europea, Federica Mogherini, informó al Gobierno de Nicaragua que, en respuesta a la solicitud de la participantes en el Diálogo Nacional, la Unión Europea está dispuesta a acompañar y apoyar el Diálogo Nacional, en particular la Comisión de Democratización y Cuestiones Electorales, "para iniciar las reformas necesarias y un proceso electoral oportuno que sea plenamente democrático".
Reino Unido condena violencia
El Gobierno de Reino Unido condenó la violencia en Nicaragua desde que iniciaron las protestas y en particular "el uso deliberado y excesivo de la fuerza por parte de la policía y los grupos armados pro-gubernamentales en contra del pueblo de Nicaragua, lo que ha provocado un número creciente de heridos y muertes".
"El Reino Unido sigue profundamente preocupado por las denuncias de violaciones de los derechos humanos, incluidas ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, tortura e intimidación", expresan en un comunicado.
El Gobierno británico indica que el Gobierno de Ortega tiene la "responsabilidad de poner fin a la violencia, proteger a sus ciudadanos y garantizar que los autores de abusos sean llevados ante la justicia".
Asimismo, instan a las autoridades a acatar las recomendaciones formuladas por la CIDH en su último informe, respetar el derecho a la libertad de expresión y reunión y establecer las condiciones adecuadas para reanudar un diálogo inclusivo.
Sobre el papel de mediación desempeñado por la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), el Gobierno de Reino Unido "alienta a todas las partes a comprometerse con una resolución pacífica de la crisis".
"El Reino Unido acoge con beneplácito las invitaciones del Gobierno de Nicaragua a la CIDH y a la ONU para investigar abusos, y a la UE para apoyar el diálogo nacional, e insta a las autoridades a que les permitan llevar a cabo su trabajo sin obstáculos. El Reino Unido se complace que la UE esté lista para acompañar y apoyar el Diálogo y ha reforzado su apoyo a los Defensores de los Derechos Humanos y las organizaciones de derechos humanos", agrega el comunicado.