13 de noviembre 2019
La presidenta del partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), Kitty Monterrey, afirma que es muy prematuro hablar de alianzas electorales en Nicaragua, pero sostiene que la oposición debe avanzar en todos los “puntos estratégicos que necesita el país, como es la liberación de los presos políticos, el cese de la represión, el regreso de los exiliados en condiciones seguras y por supuesto las reformas electorales”.
“Creo que los bloques opositores coincidimos en esos grandes temas, porque realmente esas son las condiciones del país”, aseguró Monterrey en una entrevista con la periodista Cindy Regidor, en el programa Esta Semana.
“Esos son los temas indispensables hoy, para después migrar a lo que deberá ser esa gran alianza electoral”, enfatizó Monterrey.
La trayectoria y las condiciones
CxL es el último partido al que el Consejo Supremo Electoral (CSE), controlado por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, le otorgó personería jurídica. El partido se formó con las viejas estructuras del Partido Liberal Independiente (PLI), después que el régimen arrebató, en 2016, el partido al excandidato presidencial Eduardo Montealegre, ahora retirado de la vida política.
El partido no ha estado exento de críticas. En 2017 participó en las elecciones municipales y muchos sectores han expresado que participar en esos comicios fue “hacerle el juego al régimen”.
Monterrey argumentó que ese fue el precio que tuvieron que pagar para hoy tener una casilla que han puesto a disposición de la oposición que se ha organizado para articular las demandas ciudadanas tras la presión orteguista contra la Rebelión de Abril.
La presidenta de CxL sostiene que en su partido están dispuestos a ceder la candidatura presidencial a un candidato de consenso dentro de la oposición y que las candidaturas a diputados son un tema que se tendrá que negociar.
“Nosotros no estamos aquí para dividir, estamos aquí para sumar”, enfatizó. “Lo que pasa —agregó— es que tenemos que asegurarnos que toda la oposición unida en una misma casilla, sea la nuestra u otra, sea para derrotar a Daniel Ortega”.
El encuentro con la Alianza Cívica
La dirigencia de CxL se reunió esta semana con los miembros de la Alianza Cívica para platicar sobre una gran alianza nacional. Monterrey aprovechó para preguntar sobre la Unidad Nacional Azul y Blanco, que reúne a organizaciones y partidos políticos a quienes la presidenta de CxL señala de estar controladas por el Movimiento Renovador Sandinista (MRS).
“Nosotros con quien nos hemos reunidos es con la Alianza Cívica, nosotros preguntamos cuál era la relación con la UNAB y aparentemente ellos se manejan como dos grupos independientes. Nosotros somos aliados de la Alianza Cívica, los reconocemos como interlocutores de la oposición y vamos a seguir siendo sus aliados con la esperanza que a través de esa alianza podamos ir formando esa gran unidad”, dijo Monterrey.
Las diferencias con la Unidad Nacional
Monterrey sostiene que la Unidad Nacional no los representa. “Ellos hablan de 90 organizaciones, pero nosotros no sabemos cuáles son, ni a cuánta gente aglutinan esas organizaciones, y vemos que la mayoría están controladas por el MRS”, se quejó.
La dirigente de CxL reconoció, sin embargo, que dentro de la Unidad Nacional hay organizaciones válidas de algunos autoconvocados. “Esas organizaciones a donde deberían ir es a la Alianza Cívica, para que sea en torno a la Alianza Cívica que se vaya formando esa gran coalición”, recalcó.
Monterrey indicó que ella no estaba proponiendo excluir a opositores dentro de una gran coalición, sino darle a cada uno de los sectores el peso que tienen.
“Todo aquél que ya no desee ser sandinista a pesar de haberlo sido, tiene que ser parte de la gran coalición, nosotros no estamos excluyendo absolutamente a nadie, pero… tenemos que hablarle con sinceridad al pueblo de Nicaragua, identificarnos qué somos, a quiénes representamos y dependiendo del peso que tenga cada quien es que se van a determinar los pesos en esa gran coalición y eso es lo que nosotros esperamos que se haga”, dijo Monterrey.
Con la Unidad Nacional, continuó, “nadie está claro qué representa eso, no significa que ellos deban quedar excluidos, pero la gran coalición tiene que hacerse en torno a la Alianza”.
Monterrey se ha mostrado reacia hacia muchos miembros de la Unidad Nacional por asuntos ideológicos. “Yo creo que el día de mañana, cuando lleguemos a ser Gobierno, hay que hablar bien claro qué es lo que se le va a proponer a la población ¿y si no se le habla de ideología de qué se va hablar? porque no es lo mismo un gobierno socialista que un gobierno liberal, tal vez no es el momento de empezar un debate ideológico, lo que sí es el momento es que cada uno diga con sinceridad qué es, para cuando tengamos que presentar nuestro programa a la nación , sea la nación la que diga: ‘Este es el tipo de gobierno que quiero’, y en ese sentido la ideología es básica”, subrayó.
La dirigente de CxL añadió que ellos se han reunido como partidos con los campesinos y estudiantes, para conocer cuáles son las posiciones de esos dos sectores en torno a una gran alianza.