28 de julio 2021
La situación de tensión informativa que vive Nicaragua ha llevado a algunos usuarios de las redes sociales a vivir en una burbuja informativa y a otros, a crearla. Los usuarios están haciendo malabares digitales para protegerse de las amenazas del régimen y defenderse –con sus redes sociales– de las restricciones que impone a las libertades de expresión y de pensamiento.
Estar dentro de una burbuja informativa no es malo, como tampoco lo es crearla. Todo depende de la calidad y el tamaño de la burbuja y del uso más inteligente y empoderado que se haga con las redes sociales.
Una cosa es la “burbuja informativa” en redes sociales que se refiere al mundo informativo en el que vive el usuario por decisión propia y otra es el “filtro burbuja” que junto con “dietas informativas” y “cámaras de eco” son términos muy conocidos en la jerga del internet. Y a veces muy temidos. Tienen que ver con la experiencia misma del uso de internet y de los algoritmos diseñados por los motores de búsqueda y de algunas plataformas de redes sociales, como Facebook. Pero los ciudadanos pueden ejercer su poder ante estos fenómenos.
El término “filtro burbuja” fue acuñado por el ciberactivista Eli Pariser y se refiere a “el estado de aislamiento intelectual que puede resultar de búsquedas personalizadas cuando el algoritmo de un sitio web adivina de forma selectiva qué información le gustaría ver a un usuario en función de la información que posee sobre él, como la ubicación, el comportamiento de clics anteriores y el historial de búsquedas”. Esto es, cuando el usuario solo consume lo que el algoritmo del motor de búsqueda le propone.
Las “cámaras de eco” se refieren a aquellas experiencias en las que la gente solo lee, mira, escucha, sigue y convive online con gente con pensamiento parecido al suyo y no investiga en otras fuentes para crearse su propio criterio, por lo que cree lo que le dicen y hacen eco con lo que les dicen. Las “dietas informativas” se refieren al acceso solo de las fuentes informativas que les propone el motor de búsqueda.
Todos estos fenómenos afectan al pensamiento del ciudadano que le llevará a creer que la realidad social y política de Nicaragua es tal y como solo él o ella lo ve sin tomar en cuenta cómo la ven “los otros”. Por eso es tan importante que los periodistas del país incluyan variedad de voces como fuentes informativas para que los ciudadanos –cuando acudan a los medios de comunicación– tengan oportunidad de discernir y aportar con mejor criterio al debate cívico y público.
Y aquí es donde entran las redes sociales para ayudar a salir del filtro burbuja, las dietas informativas y cámaras de eco pues las redes sociales dan mayor oportunidad a los usuarios para crear su propia burbuja, su propia dieta informativa y su propia cámara de eco, y no la impuesta por los algoritmos. Porque con las redes sociales se puede “elegir” a quién seguir y a quién no seguir.
Tipos de burbujas
Para no vivir en una burbuja creada por otros hay que crear tu propia burbuja tomando decisiones editoriales que consisten en manipular los algoritmos, pero sobre todo usar tus redes sociales para ampliar el espectro de fuentes informativas.
Una burbuja nociva para el debate cívico y ciudadano sería aquella en la que solo se sigue a gente que piensa de acuerdo a tu pensamiento y llevará a participar más en las cámaras de eco, esto es exagerando las ideas del propio grupo ideológico, e incluso adoptando su vocabulario.
En cambio, una burbuja inteligente sería aquella integrada por gente que coincide con tus pensamientos, pero que integra a otras cuentas y perfiles con pensamiento distinto lo que permite conocer más la complejidad del entorno nicaragüense donde realmente cada “cabeza es un mundo de intereses y necesidades”. Y permite, además, ejercitar el músculo del discernimiento, esto es: reflexionar y llegar a pensamientos y conclusiones propias.
Hay mucho por hacer en el universo de internet y aquí solo expondremos lo que se puede hacer con las redes sociales.
Qué hacer para pinchar o crear tu burbuja:
- Cambiar el motor de búsqueda de vez en cuando: saber que no solo existe Google y Bing, también están Ecosia y DuckDuckGo, que dicen no registran la información del usuario para venderla a anunciantes, por lo que el algoritmo no te lleva solo a la publicidad que a ellos les interesa mostrar. Usar otros buscadores exige dedicar más tiempo para buscar, pero la recompensa es encontrar lo que realmente te interesa y no solo lo que les interesa a otros.
- Usar una red social para cada necesidad: tomar la decisión de usar las redes sociales según tus grupos de interés. Aquí van ejemplos: Si en Facebook hay más familia, usá esa red solo para relacionarte con ellos y participar de las actividades familiares, que enriquecen mucho al ser humano. Usar Twitter para la conversación más política y social, y para ello seguir a los periodistas y medios de comunicación, así como a usuarios que se han convertido en líderes de opinión por el ingenio que ponen en sus análisis –un fenómeno que ha crecido en Nicaragua desde 2018–.Usar Instagram para seguir a los creadores: artistas de la música, las letras, etc.
- Analizá dónde tenés más acceso: hay gente que tiene más acceso digital en casa por el uso del wifi y por lo tanto puede mirar con detenimiento los programas y videos informativos que si lo hace en su celular se le consume la recarga. Así, se puede usar más Facebook y YouTube para ver y escuchar los programas de los medios de comunicación y comentar con tranquilidad en el teclado. Y dejar las otras redes para una interacción más breve como “Me Gusta” en Twitter e Instagram. Escuchá los programas de radio en formato podcast –no consumen tanto–, porque existe la posibilidad de descargarlos para escuchar sin necesidad de conexión.
- Hacer combinación de redes sociales: con la crisis sociopolítica que vive Nicaragua hay más periodistas en las redes sociales y los hay con distintos enfoques. Siempre es mejor acudir a los y las periodistas porque son los profesionales que investigan la realidad social y política y ofrecen contexto. Y algunos de ellos además de ofrecer las noticias de sus medios, ofrecen primicias y análisis, por lo que te ayuda a “estar al tanto” de manera inmediata. Unos lo hacen por Facebook, otros por Twitter.
- Los líderes de opinión: seguir a las nuevas cuentas de usuarios en todas las redes sociales que son nuevos opinadores y que lo están clavando en los análisis. Desde el fenómeno de abril de 2018 surgieron nuevas voces que han conseguido expresarse en las redes sociales demostrando un pensamiento muy elocuente. Quizá no están en tu misma esfera ideológica, pero responden a un tipo de pensamiento –no propagandístico– que ofrece un diferente punto de vista y que te permite observar “el otro lado de las cosas”.
- Un truco en Twitter: silenciar no vale porque el algoritmo sigue relacionándote con la cuenta que silenciaste. Para “engañar” al algoritmo mejor dejá de seguir. Y hace otra cosa: no des 4 veces me gusta a tu gente más cercana, pues resulta que el algoritmo “entiende” y te abre a nuevas realidades presentándote a cuentas que seguís y que habías perdido de vista. Por el contrario, si has perdido de vista alguna cuenta andá a su perfil y dale “Me Gusta” 4 veces, para revivir esa fuente de información. Esto también vale para Facebook.
- Truco para Facebook: si alguien te deja de seguir en Facebook, qué triste… o qué alegre, porque el algoritmo te lo quita de encima y te abre a nuevos perfiles. Si es un grupo organizado el que te deja de seguir, pues qué triste y… qué alegre, porque el algoritmo lo lee y te abre a todas esos perfiles que habías perdido de vista. A veces, la gente que te deja de seguir te ayuda para salir de su burbuja y crear la tuya nuevamente.
Es cierto que las empresas de las redes sociales son privadas y tienen sus reglas y algoritmos. Pero también es cierto que, debido a las exigencias de los propios ciudadanos, dejan un gran margen para que podamos ejercer el poder sobre nuestras propias cuentas de usuario. No podemos modificar su algoritmo, pero podemos –a mano– incidir sobre lo que creen que nos gusta, preferimos, vemos y somos en nuestra identidad digital.
Está allí la oportunidad de salir de los efectos del filtro burbuja y las cámaras de eco, en las redes sociales y está en lo que seas capaz de hacer con ellas. Para resistir a los embates del régimen en Nicaragua que quiere que solo pensés como ellos quieren hay que salir de tu burbuja y crear nuevas, o enriquecer tu bella burbuja.