1 de junio 2021
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Con mucha frecuencia se dice que la dictadura de Daniel Ortega es peor que las dictaduras de los tres Somoza. En verdad, no existen paralelismos mecánicamente exactos entre las cuatro dictaduras ni se puede asegurar que una es peor o “mejor” que las otras, porque han existido en épocas diferentes, se enfrentaron a enemigos distintos, aunque todas han tratado como enemigo al mismo pueblo y lo han reprimido con todas las armas.
Los dictadores, además de represivos, han actuado en épocas distintas y, en otros casos, de modos muy particulares. Y, sin intentos de teorizar sobre las diferencias ideológicas –porque las ideologías solo les han servido para disfrazar su delincuencia—, repasaremos algunos hechos, no detalladamente, sino como ejemplos comparativos.
II
El fundador de la dictadura dinástica, Anastasio Somoza García, inició su camino político hacia el poder asesinando al general Augusto Calderón Sandino.
Daniel Ortega, inició su actividad política participando en el asesinato del sargento Gonzalo Lacayo, de la seguridad del Estado somocista.
Las víctimas el origen y la naturaleza fueron radicalmente diferente, pero los objetivos de sus verdugos no pueden dejar de relacionarse con la búsqueda del poder político, cada quien a su modo.
Somoza recibió su castigo después de 20 años de tropelías como dictador. Ortega Saavedra fue castigado con siete años de cárcel (hasta 1974), y comenzó sus tropelías dictatoriales personales hace 14 años...
III
Somoza García, siguió el camino hacia el poder político dándole golpe de Estado al presidente Juan Bautista Sacasa, pero antes utilizó como títere a Carlos Brenes Jarquín (1937-1939).
Daniel Ortega, utilizó su membresía en la Dirección Nacional Conjunta del FSLN al unificarse las tres tendencias, y el voto de su hermano Humberto hizo mayoría entre Los Nueve para ser nombrado Coordinador de la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional (1979).
Somoza García llegó a ser general de la Guardia, como Ortega Saavedra llegó a comandante de la revolución: sin idoneidad.
IV
Somoza García, recibió la presidencia después de ser “elegido” en 1939; el pueblo y la generación estudiantil del 44 le impidieron reelegirse en 1946; impuso otro títere (Leonardo Argüello), al que derrocó 27 días después; impuso un títere más (Víctor Román y Reyes) y, al morir este, se reeligió en 1951; quiso reelegirse en 1956, pero se lo impidió Rigoberto López Pérez. Total: se hizo del poder durante 20 años.
Daniel Ortega, fungió cinco años como virtual gobernante en la Junta de Gobierno (1979-1984); cinco años como presidente (1985-1990); se reeligió en el 2006; se reeligió con fraudes continuos en 2011 y 2016, y amenaza con una cuarta reelección. Total: además de su gobierno virtual “desde abajo” (1990-2006), se ha hecho del poder durante 44 años… ¡24 años más que el fundador y dos años más que las tres dictaduras Somoza!
V
Durante la dictadura de los tres Somoza hubo encarcelamientos, torturas, exilios, asesinatos selectivos de opositores y en campañas electorales; de opositores armados y masacre contra el pueblo desarmado.
Sin meter los cruentos años de la guerra de los años ochenta a tres bandas (más bien a tres: el FSLN, la resistencia y los Estados Unidos), y sin medir de las responsabilidades de cada quien, lo que ocurrió bajo las dictaduras somocistas, la dictadura orteguista lo copia fielmente:
“Encarcelamientos, torturas, exilios, asesinatos selectivos de opositores y en campañas electorales; de opositores armados y masacre contra el pueblo desarmado”.
VI
Entre esos tétricos rubros de muerte, hubo un hecho particular que hace una diferencia: los Somoza Debayle, desataron una cacería por venganza y con saña contra opositores inocentes después de la muerte de su fundador.
VII
La masacre del 22 de enero de 1967, cuya cantidad de víctimas nunca se pudo precisar, fue la mayor del somocismo. Tampoco se conoce la cantidad exacta de las muertes durante el proceso de la lucha armada del FSLN ni en las dos insurrecciones (1978 y 1979).
La masacre del 67, se inició al producirse la muerte de un teniente de apellido Pineda, quien comandaba un pelotón de guardias que impedía el avance de los manifestantes, de cuyas filas –según se ha comentado—, el disparo salió del arma de un provocador, de quien nunca se supo si fue un somocista infiltrado, o un manifestante que formaba para de una provocación urdida entre líderes conservadores, oficiales de la Guardia Nacional y personeros de la embajada estadounidense, con el fin de crear una situación caótica que facilitara un golpe contra el gobierno títere de Lorenzo Guerrero, e impedir que el general Somoza Debayle se eligiera presidente.
La masacre de Daniel Ortega contra la manifestación pacífica del 30 de mayo del 2018, en apoyo a las madres con hijos asesinados desde abril, no causó tantas muertes como la de enero-67, pero hubo 19 jóvenes asesinados e incontables heridos por francotiradores orteguistas.
Una masacre grande o pequeña no hace una diferencia esencial, desde el sentido humano, porque igual se quitó la vida sin ningún derecho, aunque sí, hubo una diferencia formal, e igual de injustificable:
El 22 de enero-67, la Guardia descargó sus armas contra todos, sin saber a quién, de qué edad eran ni a cuántos iba a matar.
El 30 de mayo-2018, los orteguistas seleccionaron a sus víctimas, pudieron calcularles la edad, y dispararon al corazón, al cuello y la cabeza. A los francotiradores, la mira de un fusil les proporcionó la imagen de sus víctimas con claridad y les dispararon con precisión.
VIII
El Somoza fundador, asesinó mujeres y niños en Las Segovias con la intención de erradicar al sandinismo; el último Somoza, asesinó mujeres y niños durante las “operaciones limpieza” del 78 y del 79, bombardeando las ciudades insurreccionadas para matar a los sandinistas armados y al pueblo insurreccionado.
El Ortega fundador con pretensiones dinásticas, asesinó mujeres y niños en abril-18, y en las “operaciones limpieza” de los tranques de las ciudades insurreccionadas contra jóvenes “armados” con piedras y morteros artesanales.
El hecho de que a los dictadores Somoza los animara matar y robar con el pretexto de “combatir al comunismo internacional”, sus crímenes no fueron menos condenables que los crímenes de Ortega que los comete para combatir “a los golpistas y terroristas a sueldo del imperialismo norteamericano”.
IX
Ninguno de los dictadores Somoza estuvo en la cárcel, pero hicieron que las cárceles y las torturas fueran lo más inhumanas posibles para sus adversarios políticos, como castigo por intentar quitarles el poder político con el que se habían enriquecido y el que suponían les daba derecho de propiedad sobre el país y la vida de los nicaragüenses.
El dictador Daniel Ortega, estuvo en la cárcel por un motivo ligado a la lucha del pueblo por derrocar la dictadura dinástica somocista. Lo insólito, es que el orteguismo copia del somocismo sus “razones” para castigar al pueblo: por intentar quitarle el poder político con el que se ha enriquecido y el que supone le da el derecho de propiedad sobre el país y la vida de los nicaragüenses.
Como hemos visto grosso modo, las diferencias entre las dictaduras, están en los pretextos.
Falta ver otras diferencias…
Al margen de estas cuartillas
*La dictadura de los Somoza practicó la censura de prensa, encarceló y mató periodistas, clausuró periódicos y se robó una pobre imprenta de la socialista Editorial Morazán (1948), y terminó aplicando al periodismo la ley del bozal…
*La dictadura Ortega Murillo practica la censura de prensa, mata y encarcela periodistas, confisca medios de comunicación (100% Noticias y dobleteó a Confidencial) junto con los edificios en donde operan; tiene leyes del bozal y ejecuta razzias contra los periodistas…
*Las dictaduras somocistas perseguían, congelaban cotizaciones, quitaban personalidades jurídicas a los sindicatos y encarcelaban dirigentes obreros…
*Los dictadores Ortega Murillo desclasan e instrumentalizan sindicatos con líderes comprados, ilegaliza ONG y se les roba sus edificios…
*Cuando las dictaduras somocistas, no hubo organismos internacionales ni gobiernos estadounidenses interesados por las víctimas de sus ahijados Somoza; fue hasta el final que la OEA y USA les dieron las espaldas al último…
*Hoy, organismos internacionales y gobiernos USA y UE se interesan por la libertad y la democracia de Nicaragua, pero lo condicionan a sus intereses geopolíticos para, supuestamente, evitar el desvío “hacia la izquierda” del país, a la caída de la dictadura. A esos intereses, parecen responder algunos opositores derechosos opuestos a la unidad en la acción con quienes consideran de izquierda...
*Cuando la Guardia de Luis Somoza echó preso al sindicalista Domingo Vargas, la CGT-I solicitó audiencia al dictador para una comisión que gestionaría su libertad. La concedió en una oficina en las bodegas del azúcar Montelimar, Calle 15 de Septiembre, y un solitario guardia en la puerta hizo pasar a la comisión, sin más requisito que presentar el telegrama presidencial…
*En el 2011, una delegación de ex Cachorros del FSLN quiso llegar adonde los Ortega y Murillo, buscando soluciones a sus problemas; no pudieron acercarse ni a cuatro cuadras de su casa protegida por decenas de guardias armados: los detuvieron por la estatua de Montoya, y Marvin Vargas, quien los encabezaba… ¡ya lleva diez años en la cárcel!
Quienes pongan en duda ese hecho, que traten de marchar con alguna petición… ¡por las cercanías de El Carmen!
