16 de junio 2022
El despotismo de Daniel Ortega y Rosario Murillo está marcando el paso del creciente autoritarismo en Centroamérica. Aparte de extender la represión a todos los espacios de expresión política, social y cultural, con un ánimo auténticamente totalitario, ha renovado la vigencia de la tortura en Centroamérica.
Dora María Téllez, que liberó a 50 miembros del Frente Sandinista en plena lucha contra la dictadura somocista, fue víctima de la tradición: un nuevo régimen que ya no puede calificarse como sandinista la tiene ahora en prisión en condiciones inhumanas. El propio Augusto C. Sandino, inspirador de la revolución nicaragüense, estaría avergonzado de ser asociado con semejante régimen; sus ideas han sido traicionadas por el despotismo de Ortega y Murillo.
Dora María Téllez es una mujer de temple, persistente luchadora, consecuente con sus ideales. Como estudiante de Medicina se integró a la fracción tercerista del Frente Sandinista, de tendencia moderada. Aparte de haber liberado, con el comandante Edén Pastora, a 50 de sus compañeros, dirigió la toma de la ciudad de León por parte del Frente Sandinista, antes de que tomaran Managua y derrotaran a las fuerzas de Anastasio Somoza. Fue ministra de Salud y diputada. Estudió Historia y es miembro de la Academia de Geografía e Historia de Nicaragua. Es también miembro no guatemalteco, llamado correspondiente, de la Academia de Geografía Historia de Guatemala.
Consecuente con sus ideas, se convirtió en crítica de la línea dictatorial que adoptó Daniel Ortega. Para contrarrestarlo, creó con otros ilustres nicaragüenses, como Sergio Ramírez, el Movimiento Renovador Sandinista en 1995. Buscaban recuperar las ideas originales de Sandino e impulsar una línea política basada en la justicia social y la democracia. La respuesta fue la represión. En 2007 Daniel Ortega declaró al MRS ilegal. Pero Dora María Téllez continuó con su lucha, sin doblegarse. Inició una huelga de hambre poco después, junto a la catedral de Managua, y no dejó de expresar su oposición.
La respuesta fue más represión y en junio del 2021 Daniel Ortega ordenó su arresto. Ya lleva casi un año prisión, sin luz durante el día y con reflectores durante la noche. Se ha deteriorado físicamente. Ha perdido más de 40 libras. Está irreconocible. Es otra forma de tortura, que ahora es ejemplo para otros líderes autoritarios.
La Universidad Nueva de la Sorbona en París, con el respaldo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia, y como una forma de rescatarla, le ha concedido un doctorado honoris causa. La ha invitado a ir a Francia, para recibir su doctorado, que la Universidad también le estará entregando a Ángela Merkel, antigua primera ministra de Alemania. En su invitación explica que es por su compromiso por la justicia social y la democracia en América Latina. Dora María Téllez debe ser liberada. Representa la justicia social y la democracia. Nos representa.
*Economista guatemalteco. Artículo publicado originalmente en El Periódico de Guatemala.