Logo de Confidencial Digital

PUBLICIDAD 1M

PUBLICIDAD 4D

PUBLICIDAD 5D

El periodismo en la historia

El pretexto para encarcelar y condenar a Víctor Ticay es haber transmitido “La reseña”, una festividad popular no religiosa, sino costumbrista

caricatura Víctor Ticay

Onofre Guevara López

13 de febrero 2024

AA
Share

A Víctor Ticay, hasta la cárcel,
en donde no merece estar

La libertad de prensa y de opinión son unos de los derechos más pisoteados en el mundo con la censura, las demandas judiciales, la persecución, la cárcel, el chantaje económico, la supresión del medio de comunicación y la supresión de la vida de los periodistas, que es la máxima violación de todos los derechos humanos. En la aplicación de estos métodos de agresión en todos los países del mundo –en unos más que en otros—, no hay Gobierno que pueda reclamar originalidad, porque todos los han practicado y los practican.

La dictadura Ortega-Murillo ha escrito su propio catálogo de agresiones al periodismo independiente, y practica los estilos represivos más allá de la censura, como las presiones y la persecución; el encarcelamiento y el exilio; la expatriación y la confiscación de sus medios; más la confiscación de propiedades propias y de sus familiares.

Y, un castigo político único en el mundo, es borrar a periodistas (igual que a centenares de personas críticas y opositoras) de los registros públicos, lo cual equivale a quitarles la nacionalidad nicaragüense. También han tenido la pretensión de justificar estos abusos absurdos con leyes inconstitucionales aprobadas por sus diputados en su Asamblea Nacional.


II

El pretexto para el encarcelamiento y condena contra Víctor Ticay –único periodista entre más de un centenar de presos políticos actualmente— es haber transmitido la actividad de “La reseña”, en la ciudad de Nandaime. Esta es una festividad popular no religiosa, sino costumbrista, realizada por personas sencillas de la población, el Miércoles Santo de cada año. No tiene un vínculo oficial con la Iglesia católica de Nandaime, pues los actores de “La reseña” solo ocupan el atrio del templo para reunirse, de allí salir en un peculiar maratón por algunas calles de la ciudad y luego vuelven al mismo lugar.

En este festivo evento popular –que más parece deportivo—, sus participantes hacen todo el recorrido en carreras, encapuchados, con largas cotonas parecidas a las antiguas túnicas. Detrás de ellos –que son unos cuatro o cinco— siguen decenas de chavalos, mientras adultos, desde las aceras o puertas de sus casas, les tiran de todo, hasta pequeñas piedras, pero sin ánimo de lastimarlos.

A estos actores-maratonistas el pueblo les llama “Los judíos”, algo contradictorio, porque cargan en su recorrido una cruz de material liviano... al estilo de Jesús. Este evento tampoco es manifestación política, solo es una actividad festiva genuinamente popular y hasta podría verse como un acto ingenuo. 

Pese a esa alegría ingenua, su transmisión televisada por Ticay ha sido vista por la dictadura como una actividad peligrosa y ha castigado al joven periodista por “traición a la patria”. Esta condena de ocho años prisión a un joven y honesto periodista por solo informar, como si hubiera cometido un acto criminal, no sabemos que haya ocurrido en la historia del periodismo mundial. Lo vamos a ver en la siguiente versión histórica del periodismo.

III

Las prácticas del periodismo son antiguas, y pareciera que junto a la opinión política nacieron libres, y que fue hasta después que surgieron los métodos de represión en su contra. Pero no fue así. El periodismo nació ligado a la esclavitud en la Roma imperial, y después de varios siglos el periodismo ha crecido en la técnica de informar y en la lucha por hacerlo con y en libertad, y ha logrado que se reconozca el derecho de informar y estar informado como un derecho humano.

El periodista estadounidense J. Herbert Altschull, historiador del periodismo, en su libro Agentes de poder, describe su origen, la aparición de los primeros periódicos, su desarrollo técnico, sus problemas, los periodistas más destacados, las diferencias entre los conceptos y la práctica del periodismo en el capitalismo y en el socialismo europeo, hasta la fecha que salió su libro, 1984.

También dedica un amplio estudio sobre la prensa ideológica en todos los sistemas sociales, las experimentaciones del periodismo, su práctica en el tercer mundo, los límites de la autonomía del periodismo, los esfuerzos de la UNESCO por lograr un nuevo orden internacional de la información y sobre otros temas vitales en la vida del periodismo y de los periodistas. Como ya vimos atrás, sobre el origen del periodismo en la Roma imperial, la versión de Altschull es poco conocida, o más bien, bastante desconocida, vamos a copiar:

“Los romanos que vivían en la provincia necesitaban información para llevar a cabo sus transacciones comerciales y políticas. Los periodistas que les   brindaban esa información, a menudo entresacándola de las diurnas –u hojas de información— colocadas en las paredes del Foro, eran esclavos personales; más adelante, muchos de ellos llegaron a considerarse esclavos asalariados” [como periodistas] (Página 5. 1988)

En la página 10 de su libro, Altschull escribe: “Los historiadores han establecido con frecuencia la fecha de aparición del primer periódico en todo el mundo en 1605, en Amberes.” Luego agrega: “The Weekly News se llamó el primer periódico que apareció en Inglaterra en 1622”.

Altschull recuerda que después de inventada la imprenta (1440), pasaron varios siglos para que la palabra latina diurna se transformara en “diario” (…) y la palabra periodista parece haber hecho su aparición en la Inglaterra del siglo XVII, como un sinónimo de escritor o de mercurista”, en referencia a Mercurio, el mensajero de los dioses.

IV

Hemos reproducido del libro de Altschull la interesante información acerca del origen del periodismo, y en su libro (359 páginas) ofrece muchos datos y detalles de los hechos ocurridos en el proceso de desarrollo del periodismo en el mundo; de sus problemas (el menor, la censura); sus valores (la información veraz y la opinión libre); sus defectos (el amarillismo, la venalidad y las falsas noticias); aventuras políticas (propaganda en favor de las guerras y las malas causas de los poderosos) en todos los sistemas sociales y formas de gobierno.

De la lectura de los datos que ofrece Altschull en su libro sobre la historia de los más destacados periódicos y periodistas del mundo, se hace visible un hecho muy importante, que nuestros lectores y la población nicaragüense conocen y puede comprobarse en nuestra realidad, tal como ya quedó referido en párrafos anteriores:

¡Que en la historia del periodismo mundial solo los medios de comunicación y los periodistas independientes de Nicaragua enfrentan desde hace cinco años acosos y castigos inconstitucionales, solo por ofrecer a la ciudadanía una información cierta y de forma veraz!

Al margen de estas cuartillas

*Hace un año, más de trecientos nicaragüenses, entre periodistas –todos limpios de cualquier delito político o común— fueron expatriados y confiscados…

*Hace pocos días, otro expresidente acusado en su país de haberse chineado centenares de millones de dólares aprovechando su alto cargo, se asiló en la embajada de la dictadura en Panamá…

*El contraste está a la vista, y también la coincidencia de afinidades entre el político panameño y los dueños de la embajada en su exquisito gusto por la riqueza…

*Los acogedores de su excolega, ya han salvado a dos exsalvadoreños y ahora al expanameño, que gustaba jugar a la taba con el erario de su país… ¡y siempre ganaba con la “panameña”!

*¿Quién no recuerda aquella frase… “Ahora por ti, mañana por mí”?

PUBLICIDAD 3M


Tu aporte es anónimo y seguro.

Apóyanos para que podamos seguir haciendo periodismo independiente en el exilio. Tu contribución económica garantiza que todas las personas tengan acceso gratuito a nuestras publicaciones.



Onofre Guevara López

Onofre Guevara López

Fue líder sindical y periodista de oficio. Exmiembro del Partido Socialista Nicaragüense, y exdiputado ante la Asamblea Nacional. Escribió en los diarios Barricada y El Nuevo Diario. Autor de la columna de crítica satírica “Don Procopio y Doña Procopia”.

PUBLICIDAD 3D