15 de marzo 2018
La política fiscal es una de las políticas económicas más importantes con las que cuenta un gobierno. Es a través de esta que podemos observar las diferentes obras y servicios que el Gobierno y el sector público nos devuelve por pagar nuestros impuestos de manera directa o indirecta, lo cual funciona para mejorar el desempeño económico del país y el nivel de vida de sus habitantes. En ese sentido, es imperante que la información sobre esta política sea publicada de manera íntegra.
Esta política ha sido objeto de discusión desde los inicios del estudio de la economía, tomando suma importancia en los años posteriores a la gran depresión de los años 30. Sin embargo, siempre ha sido criticada ya que se puede usar como instrumento populista de los gobiernos, que en la búsqueda de atracción de votos terminan desviándose del principal objetivo de la política. Esto es cierto, sobre todo cuando no se hace uso de forma totalmente transparente.
El Estado nicaragüense puede decirse que es joven, si tomamos en cuenta que pasó por un proceso de reestructuración luego del triunfo de la revolución sandinista y la guerra civil de los 80. Por lo tanto, información más o menos completa sobre las finanzas públicas, y que estén disponibles públicamente, se encuentra desde el año 1998; no obstante, es hasta el año 2005 que las finanzas públicas se empiezan a ordenar jurídicamente mediante la aprobación de la Ley 550, “Ley de administración financiera y del régimen presupuestario”.
¿Qué está pasando en Nicaragua actualmente con esta política fiscal?
Existen muchos vacíos respecto a la información que brinda el gobierno sobre este tema. Por ejemplo, el gobierno de Nicaragua es calificado por la Encuesta de Presupuesto Abierto, del International Budget Partnership, como un país que brinda “información limitada” acerca del presupuesto público nacional. Esta encuesta mide cada dos años los niveles de información que brindan los gobiernos centrales al público.
El país ha participado en cada una de estas mediciones y se pudo observar una evolución en sus niveles de información, pasando de brindar “mínima información” en 2006 (21/100 puntaje), a “información limitada” (46/100) en 2015. Sin embargo, en la última medición de 2017, el puntaje cae ligeramente a 43.
Dichos niveles reflejan que el gobierno de Nicaragua aún no hace mayores esfuerzos por publicar suficiente información que permita tener confianza en la política fiscal. Con estos niveles, las personas, en teoría, no están dispuestas a pagar más impuestos y se preguntan, ¡¿qué estará pasando con mi dinero?! Además de estos bajos niveles de rendición de cuentas, se unen los casos de malversación o uso ineficiente de los recursos, como los elevados salarios de los altos mandos de las instituciones públicas y poderes del Estado, así como otros casos de ineficiente planificación en las compras públicas.
Este tipo de información pública es sumamente importante ya que el Presupuesto Nacional es la herramienta más importante de la política fiscal. Es un documento de planificación que debería de estar acorde con el plan nacional de desarrollo, estableciendo los recursos con los cuales contará el gobierno central, durante el año fiscal, para alcanzar los objetivos socioeconómicos establecidos en dicho plan. Las decisiones de la política fiscal, cuánto gastar en base a los ingresos que se puede percibir, depende de tales objetivos (los cuales tienen que ser realistas), y para alcanzarlos es necesario evaluar constantemente las diferentes políticas públicas. Por lo tanto es necesario que se publique toda la información sobre el presupuesto.
Por otra parte tenemos las finanzas municipales, las cuales llaman aún más la atención debido a la poca información que se publica. En esta época, donde las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) juegan un rol sumamente importante en la sociedad, estamos observando que la información sobre las finanzas municipales es mínima. Hay facilidades para publicar la información en la web, de tal manera se ahorran recursos que se utilizarían si se imprimieran ejemplares con la información presupuestaria.
La información de las finanzas públicas municipales la encontramos en el sitio web Transmuni, el cual presenta información básica: ingresos, gastos, programa de inversión anual. Es importante conocer estas generalidades, sin embargo, es necesario conocer otros detalles como por ejemplo: las fuentes de financiamiento de cada uno de los proyectos incluidos en el Plan de Inversión Anual; una descripción sobre lo que se refiere cada proyecto. Esto último es importante sobre todo porque algunos nombres de los proyectos son confusos y no siempre describen a qué se refiere.
Para concluir, en Nicaragua se han hecho esfuerzos por mejorar la transparencia con la cual se maneja la política fiscal, sin embargo, queda mucho camino por recorrer. Es necesario implementar mecanismos para aumentar la información proporcionada, incluir a más sectores de la sociedad en el proceso de implementación de la política fiscal, y mejorar el accionar de las instituciones formales de vigilancia tales como la Contraloría y la Asamblea Nacional.
Siendo que el Estado nicaragüense es pequeño, y cuenta con recursos limitados (mientras no se discuta una reforma tributaria progresiva, el sector público nicaragüense seguirá teniendo pocos recursos), es necesario que se auxilie de centros de pensamiento independientes para que puedan evaluar las políticas públicas. Si esto no fuese posible, se debe de crear una institución pública que se encargue de esta labor. Pero para eso se hace indispensable aumentar los niveles de información de la política fiscal.
(*) Máster en Economía del Sector Público e investigador de Ieepp.