12 de octubre 2020
La periodista Verónica Chávez, esposa del expreso político Miguel Mora, salió de cuidados intensivos al mediodía de este lunes, donde permaneció internada luego de recibir una pedrada en el rostro, al salir de una reunión de la Coalición Nacional en la ciudad de Masaya.
Líderes opositores declararon que el fin de semana pasado vieron cómo el asedio y la persecución crecían en intensidad, para convertirse en agresiones físicas y materiales. Junto con Chávez, también se reportó la agresión a pedradas del periodista Josué Garay, portavoz de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB); el robo de un celular al pastor Saturnino Cerrato, presidente del Partido Restauración Democrática (PRD), y daños a los vehículos en que se transportaban varios asistentes a la reunión.
Pese a la intensa presencia policial —hasta 70 efectivos y una docena de vehículos policiales— los asistentes a la cita opositora fueron asediados y agredidos por fuerzas irregulares, sin que la autoridad hiciera nada al respecto. Antes bien, Mora, también propietario del Canal 100% Noticias, dijo que los agentes “se reían y más bien protegían a los asesinos paramilitares”.
“La Policía Sandinista prácticamente dirigía a los paramilitares armados de pistolas, de cuchillos, piedras; se reían cuando tiraban a las mujeres, a los señores de la tercera edad, a los demás jóvenes, y a nosotros que estábamos ahí”, dijo recordando el momento en que la piedra impactó el cráneo de su esposa.
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El político exigió que “este Gobierno se declare ilegítimo. Esto no es Gobierno: es una mafia. Son criminales organizados, que ante una simple reunión privada de ciudadanos que buscan una opción política, de acuerdo con la Constitución usaban su derecho a reunirse pacíficamente, a organizarse, sin ningún tipo de acción violenta, ni armada”.
“Estos criminales atentan contra la vida de las personas. Hubo un intento de asesinato ordenado por Daniel Ortega y Rosario Murillo -jefes de Francisco Díaz- y todos los esbirros que casi le quitan la vida a mi esposa, y atentaron contra la vida de muchos ciudadanos que buscábamos cómo salir de la emboscada criminal que prepararon los paramilitares de Masaya”, declaró.
Otra manifestación de odio
Juan Sebastián Chamorro, director ejecutivo de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, se solidarizó con Chávez, Mora, y “los demás miembros de la Coalición Nacional que fueron agredidos en Masaya”, en un acto al que tildó de “cobarde, violento y bárbaro”.
“La piedra la tiró Daniel Ortega; la tiró el odio que ha inundado en los malos corazones de sus seguidores que cometen este tipo de acto cobarde, este tipo de acto violento. Ese mensaje de odio del dictador, es lo que provoca estas acciones”, añadió, comparando con la agresión sufrida por los obispos el 9 de julio del 2018, en la basílica de Diriamba.
“Agreden porque les molesta que exista una oposición trabajando por un cambio democrático en Nicaragua. Agreden por las sanciones que se les aplica a sus funcionarios corruptos. Agreden, porque no tienen otra posibilidad para seguir en el poder si no es por medio de la violencia, del garrote, del fusil, del acoso, y de la pedrada”, concluyó.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh), condenó “el ataque violento por parte de elementos progubernamentales en contra de un evento político de la Coalición Nacional, ayer en Masaya”, expresando su solidaridad para con las víctimas.
“El Estado de Nicaragua debe garantizar los derechos políticos de la oposición, e investigar, juzgar y sancionar a los responsables del ataque, ocurrido en presencia de patrullas de la Policía, que habría omitido su deber de prevención”, dijo la entidad a través de su cuenta en Twitter.
Precisamente, el cuerpo armado admitió que supo de la agresión a Chávez después que se la reportaran las autoridades del Hospital “Humberto Alvarado Vásquez”; pese a la fuerte presencia de sus agentes en el sitio y momento de la agresión.
La nota de prensa indica que “a las 3:20 de la tarde de ese mismo día, fue dada de alta por personal médico especializado que le atendió, refiriendo no presentar fractura, sin trastornos de signos vitales, consciente y orientada”, haciendo referencia en realidad, al momento en que fue trasladada en ambulancia, al Hospital “Vivian Pellas”.
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