3 de diciembre 2015
La decisión de la Junta Directiva de la Universidad Americana (UAM) de destituir de sus cargos a Alejandro Aguilar, decano de la Facultad de Derecho, Álvaro Porta, decano de la Facultad de Administración y Luis Carrión, Director de Desarrollo Institucional, sin que existan objeciones sobre su desempeño académico, profesional e integridad, está abriendo un debate en el país sobre la vigencia de la libertad de cátedra y la tolerancia en las universidades privadas.
Para Porta, el que una universidad sea universal, significa que usa un pensamiento científico en el que no hay cabida para algo que no busque la pluralidad, el intercambio de ideas y el reconocimiento de lo bueno y lo malo.
“Para mí no hay proyecto universitario que no tenga debate, polémica y si me dicen que en la universidad no hay relación con sociedad y hay una línea, yo diría que no es una universidad”, planteó el ex decano de la facultad de Administración en el programa televisivo Esta Noche.
Aguilar expresó que la piedra angular de una universidad es la libertad, tolerancia y el cultivo de una serie de valores que permitan convertir a un ciudadano que construye una nación.
“Lo que se aprende de esto, es que se deben desarrollar diálogos entre los propietarios de las universidades y los equipos que la gestionan, de manera que encuentren un equilibrio, que los dueños de las universidades no actúen como si tienen una finca y los gestores no olviden que los señores tienen una inversión y esperan obtener rentabilidad”, retomó Aguilar.
Para los ex decanos de la UAM, la nueva junta directiva encabezada por el coronel Felix Palacios Bragg, debe hacerse responsable de la implementación del nuevo modelo que piensan construir, explicarlo para que la comunidad lo conozca y demostrar que es un modelo apropiado.
Tanto Aguilar como Porta instaron a estudiantes y docentes que compartieron con ellos a luchar por la libertad de cátedra y contribuir a un intercambio de ideas.
“Nosotros construimos el modelo de sociedad que queremos construir y uno tiene que luchar por este modelo, la pluralidad, tolerancia y el respeto tienen una función vital y se debe dar la lucha para que espacios sean respetados”, recomendó Porta.
“El mejor homenaje que pueden hacer es trabajar de la manera que yo creo que les he transmitido, no tener miedo, ser responsables, tolerantes, reconocer que las diferencias nos enriquecen como comunidad. Quiero que vayan a clase y defiendan la libertad de cátedra, que continúen por ese camino y defiendan esos espacios”, finalizó Aguilar.
Sin objeción al desempeño académico
Ambos catedráticos dijeron que los despidos no tuvieron nada que ver con alguna objeción en el desempeño académico, administrativo o profesional, sino con el deseo de la junta directiva (dominada por el Ejército Nacional) de sustituirlos con personas “afines” a un nuevo proyecto de la universidad.
Porta y Alguilar explicaron que en ningún momento se puso en la mesa de discusión su profesionalismo y que las autoridades de la junta directiva, no informaron con claridad la decisión que fue consensuada días atrás.
“Me dice (Ernesto Medina, rector de la UAM) que la junta directiva ha decidido cancelar mi nombramiento, que no me puede dar mayor información porque no la tiene, y me pide que entregue la decanatura”, relató Aguilar.
“Se me llamó y se me dijo lo mismo. Cuando hice la pregunta de que si se trataba de algún problema de desempeño, me dijeron que bajo ninguna circunstancia, que sencillamente se quiere trabajar con personas que sean más cercanas a la junta”, declaró Porta.
Palacios Bragg cambió el rumbo de la UAM
La llegada de Porta y Aguilar se dio en condiciones similares. Ambos participaron en convocatorias realizadas por la universidad para aspirar al cargo de decano y entre un cúmulo de hojas de vidas, la junta directiva, presidida en ese tiempo por Adolfo Chamorro, decidió contratarlos y empezar un proyecto con miras a una evolución en la UAM.
“Se plantea hacer un proyecto de educación de calidad, que responda a necesidades del desarrollo del país, donde existiera un vínculo del aula con lo que estaba pasando afuera, tener una relación cercana de la empresa y problemas que hay en el país”, destacó Porta.
En el caso de Aguilar, lo que le pidió la junta directiva fue recuperar la facultad de Derecho, que en ese momento se había fusionado con la de Relaciones Internacionales. “Trabajamos y se creó el plan de estudio más moderno de Nicaragua con una visión centrada en la necesidad de los sectores privados”, manifestó.
Durante siete años ambos decanos trabajaron para fortalecer los proyectos y obtener resultados satisfactorios, sin embargo, en agosto de 2015, el presidente de la junta directiva cambió y en lugar de Chamorro, se nombró al coronel Félix Palacios Bragg, representante del Instituto de Previsión Social Militar del Ejército de Nicaragua, accionista mayoritario de la Universidad.
Para Aguilar, el nombramiento de Palacios significó el primer cambio en el rumbo de la universidad y sus proyectos, pues siendo este cargo tan importante en el alma máter, no se realizó con la participación de la comunidad universitaria.
“No es normal que se cambie un presidente y nadie se entere y ni tengás la oportunidad de agradecer. Luego vino la cancelación de una actividad de celebración del aniversario de Esta Semana. Como último indicio está la renuncia a un programa de líderes juveniles que tenía la universidad con el NDI, la Universidad George Washington, Ipade y URACCAN, que venía desarrollándose desde hace muchos años, se canceló sin mayor explicación. Esto marcó una serie de preocupaciones en toda la comunidad universitaria”, consideró Aguilar.
Porta explicó que en las universidades privadas, como la UAM, deben existir buenas prácticas que indiquen que las entidades universitarias tienen su propio gobierno y que los dueños que representan los intereses económicos pueden estar cercanos, pero que deben apartarse para que los órganos y las autoridades académicas puedan dirigir la institución.
“Incluso, si este no fuera el caso y la empresa se dedicara a la producción, se debe dar ejemplo de cómo tomás tus decisiones, de eso hablamos en las aulas, del respeto y de encontrar en consenso una armonía, si decimos esto pues se supone que los practicamos”, recordó Porta.
“La clave está en que las instituciones pueden ser lo que quieran ser y eso lo tienen que declarar, pero si vos trabajas en una declaración de valores que te guían, tenés que ser congruente y si no, cambialos”, reafirmó Aguilar, quien agregó que esta nueva junta directiva, debe decir a la comunidad universitaria, cuál es el nuevo rumbo de la institución y que tanto padres como alumnos deben preguntar lo mismo a las autoridades.
[destacado titulo="UAM justifica despidos"]
*Alega que se está "arrastrando a la universidad a la polarización y el conflicto político"
La Junta de Directores de la UAM emitió ayer un comunicado justificando los despidos de los decanos de Derecho y Administración y respondió a las críticas alegando que ¨se está arrastrando a la universidad a la polarización y el conflicto político¨.
El comunicado señala que en septiembre pasado se eligió una nueva Junta Directiva que empezó a poner en práctica ¨un nuevo plan de trabajo orientado a fortalecer las líneas estratégicas de la UAM: internacionalización, incorporación de las TIC a la docencia, ampliación de la oferta de estudios de Pre y Posgrado, estrechar la alianza con el sector privado, desarrollo de la investigación y mayor eficiencia en el uso de los recursos¨.
Agrega que la Junta realizó ¨un estudio de las estructuras de la universidad y del personal en posiciones clave para la implementación de las nuevas líneas estratégicas, tomando la decisión de realizar cambios de autoridades en dos facultades¨.
¨Lamentablemente, a esta situación se la ha dado un trasfondo político, arrastrando a nuestra universidad hacia la polarización y el conflicto político que tanto daño le hace a nuestro país¨, dice el comunicado.
La directiva asegura que las decisiones que se han tomado ¨responden ùnicamente al interés de continuar profundizando el proceso de cambios y transformaciones que se han emprendido con el objetivo de ofrecer una educación de calidad a los estudiantes¨.
Las autoridades de la UAM reiteran su compromiso de ¨seguir siendo un espacio de diálogo y de libre debate de las ideas en aras a contribuir a la búsqueda de soluciones a los graves problemas que todavía enfrenta nuestro país¨.
El comunicado concluye agradeciendo a los ex decanos Alejandro Aguilar, Alvaro Porta y María de Jesús Fuentes, y al ex director Luis Carrión por los servicios brindados a esa universidad, y saluda a los nuevos decanos, Sonia Somarriba en Administración y Economía, y Jesús Herrera en la facultad de Derecho.[/destacado]