30 de agosto 2019
El comentarista político Jaime Arellano y el director de Radio Darío en León, Anibal Toruño, regresaron este jueves a Nicaragua después de más de nueve meses de exilio en Estados Unidos. Ambos aseguraron a su llegada que no tienen garantías de seguridad en el país y que este es un riesgo que “tenían que asumir” para romper el cerco del miedo y evaluar la situación en Nicaragua para el retorno de los más de 70 hombres y mujeres de prensa que se encuentran huyendo del régimen Ortega Murillo.
“Nuestra intención desde que nos fuimos nunca fue quedarnos afuera, siempre fue regresar al país. Nos reunimos con los que están afuera, ellos quieren venir a Nicaragua, (por eso) nos designaron a que viniéramos, nos reuniéramos con la Alianza, las autoridades, la UNAB, y después les dijéramos si están dadas las condiciones para regresar”, explicó Arellano a los medios de comunicación.
Toruño agregó que retornar al país tiene un riesgo, pues los periodistas se encuentran en continuo asedio y persecución. Sin embargo, la idea que continúa imperando en sus mentes y en las de más de 70 periodistas exiliados, es regresar y continuar con la lucha por la libertad de expresión para construir una nación en democracia.
“Hay más de 70 periodistas que están en el exilio que quieren regresar y esto que estamos haciendo nosotros es una muestra e iniciativa para que finalmente regresen. Nicaragua es de todos. Vamos a estar desde adentro luchando para construir un país en libertad”, aseguró Toruño.
Un ojo a la realidad
El director de Radio Darío decidió exiliarse en estados Unidos por el constante asedio y las amenazas de simpatizantes de la dictadura de Daniel Ortega. Arellano salió del país debido a problemas de salud causados por la intimidación que él y su familia habían sufrido.
Poco después el juez Sexto de Distrito Penal de Audiencia de Managua, Henry Morales, a petición de la fiscal auxiliar Lillyam Sosa, emitió una orden de captura en contra de él y los periodistas Luis Galeano y Jackson Orozco. Este año los tres fueron “beneficiados” por la polémica Ley de Amnistía, aprobada por los diputados sandinistas.
El comentarista político reiteró que la vida en el exilio es dura y que con su regreso no se están prestando al juego político del Gobierno de Daniel Ortega, que en varios comunicados ha informado que las puertas para los exiliados están abiertas. “Queremos ver la realidad, venir a hacer nuestro trabajo, el que hacíamos antes. Este es el riesgo que hay que tomar, la lucha está en Nicaragua, otros la hacen afuera”, expresó.
A su entrada a Nicaragua Arellano y Toruño afirmaron que el proceso en migración fue rápido. Expresaron que no hubo interrogatorio y que en aduana todo ocurrió sin mayor contratiempo.
“Tomamos esta iniciativa que evidentemente conlleva riesgos. Hemos entrado y queremos seguir aportando. Nos vamos a reunir con los diversos sectores y esperamos que el Gobierno respete la presencia de los periodistas y medios de comunicación independientes y que no seamos objeto de persecución”, finalizó.