7 de febrero 2023
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La jueza orteguista Nadia Camila Tardencilla Rodríguez, responsable del Juzgado Segundo de Distrito Penal de Juicios de Managua, adelantó el juicio contra el obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, monseñor Rolando Álvarez, procesado por la supuesta comisión de los delitos de "conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional" y "propagación de noticias falsas".
El juicio político contra el jerarca católico había sido programado por la juez Décimo Distrito de lo Penal de Audiencia de Managua, Gloria Saavedra, para el 28 de marzo. Sin embargo, la juez Tardencilla adelantó el proceso para el 15 de febrero próximo.
El cambio de fecha todavía no aparece registrado en el sistema electrónico del Poder Judicial pero fue confirmado por familiares del obispo, quienes desconocen las razones que llevaron a la juez a realizar el movimiento.
El adelanto del juicio contra monseñor Álvarez ocurre un día después que Tardencilla sentenció a diez años de cárcel a los seis sacerdotes y un laico, que fueron secuestrados junto con el obispo en la curia de Matagalpa, por los supuestos delitos de conspiración y propagación de noticias falsas.
Los padres condenados por la justicia orteguista son Ramiro Tijerino Chávez, rector general de la universidad Juan Pablo II; José Luis Díaz Cruz, vicario de la Catedral de Matagalpa y su antecesor Sadiel Antonio Eugarrios Cano; el diácono Raúl Antonio Vega; los seminaristas Darvin Leiva Mendoza y Melkin Centeno, así como el reportero gráfico Sergio Cárdenas Flores.
Además de condenar a diez años de cárcel a los religiosos, Tardencilla los "inhabilitó de por vida al ejercicio de cargos públicos y de elección popular". Hecho que el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) calificó este martes como "una pena accesoria" y "una aberración jurídica".
El caso contra monseñor Álvarez
La audiencia inicial contra monseñor Álvarez fue realizada a puertas cerradas el martes 10 de enero de 2023, realizada 144 días después de que el religioso fuera recluido casa por cárcel en Managua por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, donde aún permanece a la espera del juicio.
Álvarez, una de las voces proféticas de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, reconocido por su labor pastoral en el norte de Nicaragua y su defensa de los derechos humanos frente a la opresión estatal, se convirtió en 2022 en el primer obispo de la Iglesia católica enjuiciado políticamente bajo el régimen de Ortega.
El hostigamiento contra monseñor Rolando Álvarez data desde 2018, pero los últimos episodios ocurrieron en 2022, antes de que la Policía lo secuestró. Entre mayo y agosto de ese año, Álvarez fue objeto de seguimientos y finalmente lo sitiaron en la Curia de Matagalpa desde el cuatro de agosto y el 19 de ese mes lo trasladaron a Managua, acusado de fomentar la violencia.
Casi cuatro meses después de esta detención arbitraria, los fiscales del régimen lo acusaron por los delitos de “conspiración para cometer menoscabo contra la integridad nacional” y de “propagación de noticias falsas”. Son los mismos delitos atribuidos a otros presos políticos en procesos carentes de garantías para los acusados.
