13 de agosto 2016
A casi dos meses de la muerte de Lizandra Jarquín, el doctor David Páramo fue declarado culpable del delito de homicidio imprudente en contra de Lizandra Jarquín, a quien le practicó una cirugía plástica el 17 de junio. Así se cierra un caso que desató la discusión entorno a los procedimientos estéticos en Nicaragua y su regulación.
La juez Iveth Pineda, en base a lo ventilado en el juicio oral y público, determinó que Páramo es responsable del fallecimiento de la joven que lo contrató para que le practicara una liposucción y un aumento de glúteos. Según la titular del Juzgado Sexto Local Penal de Managua el médico no cumplió con los debidos cuidados ni antes, ni durante la cirugía de Lizandra Jarquín, como planteó al inicio del proceso la Fiscalía.
La familia del cirujano consideró que el juicio estuvo parcializado, mientras la madre y viudo de Lizandra celebraron el fallo de la juez. "Totalmente agradecida con Dios que hizo justicia en el caso de mi hija", publicó en su cuenta de Facebook Sandra González, mamá de Lizandra.
En su intervención Páramo pidió que se exhumara el cuerpo de la que fuese su paciente para comprobar, dijo, que él no había cometido una negligencia médica como señaló la auditoría médica.
El lunes 15 de agosto se definirá la pena que el doctor deberá enfrentar por este caso, mientras mantiene pendiente otra causa por supuestas lesiones imprudentes y lesiones psicológicas graves en perjuicio de Allison Molina.