29 de agosto 2017
Nueve personas que estaban a bordo de un autobús de la ruta Boca de Sábalos – La Quezada, en el municipio de El Castillo, Río San Juan, fallecieron ahogados la tarde de este lunes, luego que dos piedras (utilizadas como cuñas) que daban soporte al pesado vehículo se destruyeran y provocaran el hundimiento de este en el río Sábalos, de seis metros de profundidad.
El autobús se encontraba estacionado y encendido en neutro, en una rampa ubicada del otro lado del río. Lugareños aseguraron que este no tenía freno de emergencia, y casi siempre el conductor y su ayudante, ubicaban dos piedras detrás de las llantas traseras para evitar que el bus se fuera de retroceso.
Vecinos de Boca de Sábalos que presenciaron la trágica escena, aseguraron que las dos piedras eran muy pequeñas para soportar el peso de al menos 20 ciudadanos que ya estaban a bordo del autobús. Las “cuñas” se quebraron, la unidad reculó hacia el río y quedó en forma vertical con el agua hasta la mitad.
El comisionado mayor Noel Cruz, jefe de la Policía en Río San Juan, explicó que los cuerpos de los ocho ciudadanos ahogados, que rescataron en la tarde, fueron encontrados en el interior del bus, una vez que lograron sacarlo del río.
A eso de las siete de la noche, los grupos de búsqueda conformados por la Policía Nacional, la Cruz Roja y habitantes de la zona, encontraron el cuerpo de una mujer, de unos veinte años de edad.
Según información policial, entre de los fallecidos se encuentran Julio César Sevilla (64), Benjamín Alemán Blandón (60) y Felipa Blandón Gómez (67). También Ena María Morales (38), Digna Emérita Lanzas (60), Isael Alemán Solano (26), el niño de iniciales K. A. (7), la niña J. B. M. (9) y Yensi Fernández Gatica (25).
Las autoridades policiales aseguraron que buena parte de los ciudadanos que estaban en el autobús lograron sobrevivir, sin embargo, todavía en horas de la noche de este lunes, los cuerpos de búsqueda ubicaron trasmallos para recuperar los cuerpos de al menos cinco personas más que están desaparecidas.
El conductor del autobús (placa RI 80-90 ), era conducido por Jaime Antonio Sánchez, quien fue detenido por la Policía Nacional. Rosario Murillo, vicepresidenta de Nicaragua, informó en una comunicación a mediodía que el chofer será remitido al Ministerio Público y será acusado por el delito de homicidio imprudente.
"Cuántas personas queridas para sus familiares perdieron la vida por negligencia e imprudencia el día de ayer. Insistimos en guardar las medidas y atender las obligaciones y leyes de tránsito. Nosotros de verdad nos sentimos conmovidos", refirió Murillo.