14 de julio 2020
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En los últimos siete días, en Nicaragua hubo 301 nuevos casos de covid-19 y ocho fallecieron a causa de la enfermedad, según el Ministerio de Salud, que continúa asociando los fallecimientos de personas contagiadas a enfermedades crónicas como la diabetes, hipertensión, obesidad, enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares, sin brindar cifras específicas.
Con estas cifras, que corresponden a la semana del 7 al 14 de julio en Nicaragua, el número de muertos según los cuestionados datos oficiales llega a 99 personas desde que se admitió el primer contagio de SARS-CoV-2 en el país.
La ministra de Salud Martha Reyes, en un nuevo informe exprés, dijo que desde el inicio de la pandemia atendieron a 2682 personas por covid-19 y que 2282 se han recuperado de la enfermedad, es decir, que según las mismas cifras del Minsa, hay apenas 300 casos activos de covid-19.
Según Reyes, en estos últimos siete días, 255 personas han cumplido con "el período establecido", de seguimiento, tal como se refiere el Minsa a los casos que los medios oficialistas retoman como "recuperados".
Desde el inicio de la pandemia, de acuerdo con la suma de cada reporte oficial, la cifra de casos de covid-19 confirmados por el Gobierno es de 3147 casos, aunque los medios oficialistas parten del total que desde hace tres semanas el Minsa ha impuesto como el nuevo total, con 2682.
Los datos del Observatorio Ciudadano COVID-19
En contraste con los datos del Minsa, el Observatorio Ciudadano que lleva un conteo independiente de los casos de covid-19 basados en reportes de la población y consultas de médicos independientes, reporta que hasta el pasado ocho de julio se han registrado 7893 casos sospechosos de covid-19 y un total de 2225 fallecidos relacionados a la enfermedad.
Managua sigue siendo el departamento más afectado por los contagios con un total de 3287, según el Observatorio, y le sigue Matagalpa con 849, Masaya con 588 y León con 518 casos.
Y mientras los contagios aumentan considerablemente en el país, en las calles se vive una falsa normalidad en la que muchas personas están saliendo a bares y discotecas, según confirmó CONFIDENCIAL en un recorrido durante el pasado fin de semana. Una actitud que los médicos alertan que podría profundizar la crisis sanitaria en el país.
Además, los templos evangélicos podrían ser reabiertos en agosto próximo, según declaraciones de varios líderes de diferentes denominaciones evangélicas agrupadas en la Alianza Evangélica. Aunque muchos de estos lugares nunca cerraron sus puertas y varios pastores tampoco atienden las recomendaciones de distanciamiento social o desestimen el uso de mascarillas.
