18 de septiembre 2023
Nicaragua es el país con las tasas más altas de pérdida de bosques en Centroamérica. Un 22% de la cubierta arbórea, que incluye los bosques primarios y secundarios, fue deforestado en las últimas dos décadas, según información del sistema Global Forest Watch (GFW).
Los datos de deforestación fueron citados en un informe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) sobre Nicaragua, en el que señalan además un incremento de la violencia contra los pueblos indígenas.
“De 2001 a 2022, Nicaragua perdió 1.73 Mha (millones de hectáreas) de cobertura arbórea, lo que equivale a una disminución del 22%”, de acuerdo con GFW. Mientras, “el área total de bosque primario húmedo disminuyó en 29%, en ese mismo periodo de tiempo”.
Los territorios con más pérdida de bosque son la Costa Caribe Norte, donde reposa la mayor cobertura arbórea del país, seguido del Caribe Sur. También, hubo afectaciones en zonas arbóreas de Río San Juan, Jinotega y Matagalpa, en el norte del país.
Pérdidas de bosques en Centroamérica
Datos analizados por CONFIDENCIAL muestran que, entre 2001 y 2022, Guatemala redujo un 22% su cobertura arbórea. El porcentaje es similar al de Nicaragua; sin embargo, la extensión es menor: 1.68 millones de hectáreas.
Honduras tuvo una reducción del 17% de su cobertura forestal, equivalente a 1.32 Mha. Mientras, Belice tuvo una reducción del 16% de cobertura arbórea, equivalente a unas 279 000 hectáreas (Kha, por su siglas en inglés).
En ese mismo período, Panamá perdió el 8.5% de sus bosques, equivalentes a 483 Kha; El Salvador registró un 8.3% de pérdidas, que equivale a 82.2 Kha.
El país que menos pérdida de bosques tuvo fue Costa Rica con un 6.9% que representa 270 Kha.
País con más concesiones mineras
La disminución de estos recursos naturales está relacionada con el aumento de la minería ilegal de oro que provoca “contaminación del agua, del suelo y del aire, deforestación y la degradación de los ecosistemas”, explica la OACNUDH.
Alerta que Nicaragua es el país con más concesiones mineras en territorios indígenas y afrodescendientes de Centroamérica. El Gobierno de Ortega ha otorgado 69 concesiones mineras a empresas nacionales e internacionales. Mientras, otras 72 solicitudes están pendientes.
El organismo destaca que las autoridades las aprueban “sin tener el consentimiento libre, previo e informado de los pueblos indígenas”, como manda la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas.
“Existen supuestas concesiones mineras en 21 territorios indígenas, que afectan a los pueblos Chorotega, Matagalpa, Mayangna y Miskitu”, detalla el informe.
Preocupa violencia contra comunidades indígenas
“La OACNUDH ha observado numerosos ataques que destruyen los medios de vida de las comunidades y afectan a los derechos colectivos y a la identidad cultural de los pueblos indígenas, especialmente a su relación con la tierra y el territorio”, advierte.
Los expertos de la ONU subrayan que las comunidades indígenas son víctimas de “desplazamientos forzados, asesinatos, violencia sexual, incendios provocados e invasiones violentas de sus tierras”.
Afirman que han documentado al menos ocho casos de ataques violentos contra pueblos indígenas, especialmente en Mayangna Sauni, en el núcleo de la Reserva de la Biosfera de Bosawás. Así como secuestros y violaciones sexuales a comunitarias indígenas que quedan en la impunidad.
“Desde agosto de 2022, la OACNUDH ha documentado tres casos de secuestros y violación a niñas de entre siete y trece años. El caso más reciente ocurrió el 3 de junio de 2023, cuando una niña fue secuestrada en el municipio de Waspam”, denuncian.
La impunidad en estos casos de violencia está relacionada a la escasez de instituciones estatales en los territorios indígenas, dice la OACNUDH. También, el desconocimiento de sus lenguas en los funcionarios públicos “pone en peligro” el acceso a la justicia.
El organismo recuerda el caso de una niña indígena que fue secuestrada y violada por un colono de 40 años, en abril de 2022; no obstante, 18 meses después el caso está impune.
Mil miskitos han sido desplazados forzosamente
El organismo de la ONU revela que aproximadamente 21 000 hectáreas pertenecientes a las comunidades miskitas de la Costa Caribe han sido tomadas por colonos. Esta situación ha empujado a unos mil indígenas a desplazarse forzadamente.
La ocupación de tierras indígenas viola los derechos humanos, económicos, sociales y culturales de esta población que deberían estar protegidos por el artículo 27 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
“Se informó a la OACNUDH que las autoridades indígenas se han visto obligadas a exiliarse debido a las amenazas de muerte y el Gobierno ha impedido a algunas de ellas regresar al país denegándoles la entrada en la frontera”, denuncian.
En consecuencia, prosiguen, “estos no han podido reanudar sus funciones como autoridades indígenas”, lo que puede ser contrario al artículo 4 de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas.
Mientras, desde el Estado se excluye a esta población porque, incluso, la educación pública se imparte solo en español. “La OACNUDH recibió información de que la lengua Rama sólo es hablada por 15 personas”, lamenta.