11 de agosto 2020
El Ministerio de Salud (Minsa) continúa reportando menos muertos por covid-19 en Nicaragua. Según el último informe oficial, en la semana del cuatro al once de agosto solamente fallecieron cinco personas por esa causa, dos menos que la semana anterior.
Desde finales de junio, los registros del Minsa han descendido en el número de contagios, pero mantenían las muertes entre ocho y nueve semanales. Sin embargo, en las últimas dos semanas han descendido las cifras a siete y cinco muertes.
La última vez que las autoridades sanitarias reportaron diez muertes fue el pasado 23 de junio. Los reportes más altos de muertes confirmados por el Minsa fueron el 26 de mayo (18 fallecidos) y el dos de junio (11).
Con este reporte oficial, la cifra de fallecidos asciende a 128, contrario al reporte del independiente Observatorio Ciudadano COVID-19, que hasta el pasado cinco de agosto, reportaba 2591 muertes por la covid-19.
Covid-19 Nicaragua: Curva de crecimiento
Infogram
Las cifras a la baja del Minsa
De acuerdo a las cifras oficiales, Nicaragua llegó este martes a los 4115 casos de la covid-19. En el reporte, leído por la ministra de Salud, Martha Reyes, se subrayó que en la última semana se registraron 213 casos nuevos casos del virus. La semana pasada el Minsa reportó 230 infecciones.
Al igual que en el caso de las muertes, las autoridades del Minsa han reportado menos contagios y más recuperaciones, desde junio pasado y en cada informe semanal.
Estas cifras contrastan con el reporte del Observatorio que registra que en Nicaragua hay un acumulado de 9436 contagios.
Muertes no reconocidas
Durante la lectura del informe semanal, Reyes aseguró que durante esa semana también hubo pacientes que fallecieron a causa de otras complicaciones como tromboembolismo pulmonar, diabetes, infarto agudo de miocardio, crisis hipertensivas y neumonías bacterianas. Sin embargo, como es acostumbrado, no precisó cuántos eran.
Estas muertes según explicó el médico, Carlos Hernández, estarían claramente relacionadas a la covid-19 y según las estadísticas que leyó el mandatario, Daniel Ortega, en el acto del 19 de julio, superarían las 4000 defunciones provocadas por la pandemia. De igual forma, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) reconoció en una entrevista con CONFIDENCIAL que esta sobremortalidad “tiene relación directa e indirecta con la pandemia de covid-19”.
“Como hemos mencionado antes, la OPS sigue preocupada por la aplicación de las pruebas y aislamiento de todos los casos sospechosos y confirmados, el rastreo y cuarentena de contactos, y el tratamiento de todos los casos de COVID-19 en Nicaragua. Recibimos un informe semanal muy sucinto de las autoridades nicaragüenses, pero fuentes no oficiales indican cifras mucho más altas y que guardan relación con el incremento de mortalidad, la saturación de servicios de salud y la afectación del personal de Salud”, respondieron.
El Gobierno se ha encargado de presentar datos confusos y poco transparentes en el manejo de la pandemia, pues a casi cinco meses de que se reportó el primer caso, en el país hay tres cifras: una corresponde al conteo que llevan los medios de comunicación basados en la suma de los reportes semanales, otra es del monitoreo que hace el Observatorio Ciudadano y la última que el Gobierno le brinda al Centro de Coordinación para la Prevención de los Desastres en Centroamérica y República Dominicana (CEPREDENAC), de donde ha recibido ayuda para mitigar la pandemia.
Siguen sin admitir contagio comunitario
Según el reporte del Minsa, hasta la fecha 3072 nicaragüenses se han recuperado del coronavirus SARS-CoV-2. Las autoridades sanitarias se niegan a reconocer que en el país existe transmisión comunitaria del virus, a pesar de que la misma OPS sigue insistiendo que Nicaragua ya se encuentra en esta fase de contagio desde finales de mayo.
“Se han presentado brotes de casos a través de contactos claramente establecidos”, insistió Reyes.