3 de diciembre 2024
En tiempo récord, la dictadura orteguista ordenó pintar las descascaradas paredes del edificio robado a CONFIDENCIAL, donde supuestamente funcionaba una "casa materna", que abandonaron en menos de dos años de apertura. Y, para continuar la "mentira" de la supuesta utilidad de la confiscación ilegal, ordenaron también colocar un nuevo rótulo en el cual aseguran que ahora funciona ahí una "clínica materno infantil".
El sábado 30 de noviembre de 2024, CONFIDENCIAL publicó una fotografía de cómo lucía abandonada la supuesta "casa materna. Fuentes vinculadas al Ministerio de Salud, revelaron que veinticuatro horas después de la publicación, el domingo 1 de diciembre, una brigada de trabajadores llegó a cortar la maleza que cubría el parqueo, limpiar y volver a pintar las paredes por dentro y por fuera.
Al día siguiente, por la mañana, enviaron personal del Ministerio de Salud, vestido con gabachas blancas, entre ellos una doctora con sus auxiliares y enfermeras, que sirvieron para las nuevas fotos con las cuales la dictadura ahora dice que "la Casa Materna Camila López, ubicada en el Distrito I de Managua, evolucionó a Clínica Materno Infantil".
La orden oficial fue resucitar la casa materna abandonada, que nunca habría prestado servicios como tal y fue abandonada después de la parafernalia orteguista de febrero de 2021.
Según la dictadura, el lugar ahora ofrecerá "atención más integral a las familias nicaragüenses a través de un equipo especializado de médicos pediatras y ginecoobstetras que brindarán servicios de manera gratuita", aunque en las fotos publicadas solamente se ven a personas sentadas en las sillas de un comedor que estaba en el edificio robado a CONFIDENCIAL, y que es parte del mobiliario y otras propiedades también robadas.
Otras imágenes muestran las demás salas del edificio también recién pintadas y decoradas, aunque vacías. Solamente en una foto, que es un plano cerrado, se observa a una mujer embarazada en una consulta, con una supuesta doctora que utiliza un equipo portátil de ultrasonido.
Tras la evidencia publicada por CONFIDENCIAL, la dictadura monta nuevamente una parafernalia, con una actividad frenética fotografiada ampliamente, para otra vez intentar "lavar la cara" de la confiscación ilegal.
Invento de “casa materna” en edificio robado
Cerrada, con la pintura rosado fucsia de las paredes y la impresión de la imagen gigante de Daniel Ortega y Rosario Murillo descascarándose, los portones oxidados y los árboles y maleza sin podar, lucía en abando la casa materna “Camila López”, instalada por la dictadura para justificar la confiscación ilegal de las instalaciones de CONFIDENCIAL, ejecutada en diciembre de 2018.
El abandono de la clínica desmintió la supuesta utilidad que tendría el local del Ministerio de Salud (Minsa). “En esta casa materna, que hoy estamos inaugurando por la bendición de Dios y por la voluntad política del comandante Daniel (Ortega) y la compañera Rosario (Murillo), vamos a atender a más de cinco mil mujeres”, aseguró la exministra Carolina Dávila Murillo, asesora presidencial para temas de salud, el 23 de febrero de 2021, cuando se abrió la clínica.
La última vez que los medios de la propaganda orteguista publicaron fotos sobre la casa materna fue el 23 de febrero de 2022. Ese día, la doctora Dilvia Flores, directora del centro de salud “Roberto Herrera”, afirmó que diariamente atendían “un promedio” de 25 embarazadas. Además, que en la clínica desarrollaban actividades como “talleres de manualidades, charlas de nutrición y acompañamiento emocional”.
“Para intentar lavar el crimen de robarse y cerrar un medio de comunicación independiente, fundado en 1996, le entregaron nuestras oficinas al Ministerio de Salud, el 23 de febrero de 2021. Inauguraron con bombo y platillo una clínica materna en el Distrito I, que en realidad nunca le brindó servicios a las mujeres embarazadas”, señaló Carlos Fernando Chamorro, director de CONFIDENCIAL, en un comentario publicado en el canal de CONFIDENCIAL en YouTube.
“Casi cuatro años después, la supuesta clínica del Minsa está cerrada y abandonada, evidenciando la mentira y el fracaso de la dictadura. Mientras que CONFIDENCIAL sigue haciendo periodismo desde el exilio, investigando la corrupción y denunciando las graves violaciones a los derechos humanos”, subrayó Chamorro.
En febrero de 2021, Ortega entregó al Minsa la propiedad de CONFIDENCIAL y las sedes de otras oenegés y medios de comunicación confiscados, como 100% Noticias, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), la Fundación Popol Na, el Instituto para la Democracia y el Desarrollo (Ipade) y el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp).
El asalto policial de CONFIDENCIAL en 2018
El 14 de diciembre de 2018, la Policía asaltó las oficinas de CONFIDENCIAL, incluyendo del estudio de televisión donde se grababan los programas Esta Noche y Esta Semana, y las oficinas de la empresa consultora Cabal. Sin embargo, el robo a los equipos comenzó desde la medianoche del 13 de diciembre cuando un despliegue policial irrumpió el edificio y sustrajo computadoras y otros equipos.
Por la noche del viernes, 14 de diciembre, la Policía volvió al inmueble, pero esta vez para confiscar junto a los equipos que no se habían llegado la noche anterior.
En el inventario provisional de los bienes incautados a CONFIDENCIAL, Esta Semana y Cabal, presentado ante la Fiscalía en diciembre de 2018 se incluyen 35 computadoras, un estudio de televisión recién estrenado, siete cámaras de televisión, dos editoras de televisión, dos cámaras de fotografía, decenas de discos duros, teléfonos celulares y accesorios de producción audiovisual, así como la documentación contable e institucional de las empresas y de carácter personal, e información privada, en físico y en formato digital.
En el artículo 44 de la vigente Constitución Política de Nicaragua “se garantiza el derecho de propiedad privada de los bienes muebles e inmuebles y de los instrumentos y medios de producción”. Además, prohíbe “la confiscación de bienes” y ordena que “los funcionarios que infrinjan esta disposición responderán con sus bienes en todo tiempo por los daños inferidos”.
Desde 2018 hasta la fecha, la Administración del FSLN ha confiscado de forma ilegal centenares de bienes propiedad de ciudadanos, empresas, medios de comunicación, oenegés, universidades, cámaras empresariales e iglesias.
Más de 250 millones de dólares es el costo preliminar de cientos de confiscaciones de propiedad privada ordenadas por la Administración del FSLN desde 2018, según cálculos publicados en una investigación del Observatorio Pro Transparencia y Anticorrupción (OPTA).
Murillo intentó apoyo de Taiwán para confiscación
La dictadura anunció con “bombos y platillos”, la inauguración de la “Casa Materna”. Mandó a pintar de rosado el edificio, e imprimió en sus paredes una fotografía gigante de Ortega y Murillo, y usó los muebles que pertenecen a este medio de comunicación, para acondicionar la supuesta clínica. Entre ellos, los escritorios y sillas que eran usadas por el equipo de CONFIDENCIAL. Se desconoce el monto invertido por el Minsa para este centro.
La distribución de los espacios para embarazadas fue tan absurda que situó en el segundo piso, con al menos 15 escalones, los dormitorios que usarían las mujeres recién paridas.
Dos meses después de la inauguración de la casa materna, un equipo de CONFIDENCIAL constató que ninguna embarazada llega a solicitar servicios de salud y que nadie puede ingresar sin antes ser anunciado por dos oficiales de las fuerzas especiales de la Policía Nacional, que fusil al hombro custodiaban la entrada del edificio asaltado.
La vicepresidenta Rosario Murillo aseguró que la inauguración de la casa materna en CONFIDENCIAL se financió con la cooperación del Gobierno de Taiwán; sin embargo, no hubo presencia diplomática de parte de la embajada, como se acostumbra en la inauguraciones de las casas maternas. Días después, Taiwán se desligó completamente.
“Las casas maternas que apoyamos se encuentran en lugares alejados de los departamentos, en Managua no hay”, respondió escuetamente a CONFIDENCIAL, el embajador de Taiwán, Jaime Chin-Mu Wu, a través de su oficina de prensa.
En 2019, los Gobiernos de Nicaragua y Taiwán aprobaron el proyecto “Mantenimiento y Reparación de Casas Maternas y Puestos de Salud” con el que se han reparado y equipado más de 50 casas maternas en el país. Sin embargo, los proyectos se realizaban en zonas rurales donde las mujeres llegaban semanas antes del parto para tener asistencia médica al momento del parto. Por lo cual, su instalación en la capital no se justificaba.
Cuatro años después, la supuesta clínica instalada en la redacción de CONFIDENCIAL, lucía totalmente abandonada. Hasta su "resurrección", para volver a intentar "lavar la cara".
*Nota del editor: Esta nota se publicó originalmente el 30 de noviembre de 2024, y volvió a actualizarse días después, el 3 de diciembre.