27 de febrero 2019
La Asociación ‘Madres de Abril’ no descarta recurrir ante los tribunales internacionales para lograr justicia. Pero antes de eso, confían en que el Estado nicaragüense pueda satisfacer su reclamo… aunque nadie las haya invitado a participar del diálogo nacional previsto para reiniciar el miércoles 27 de febrero.
“Estamos a la espera de una posición contundente de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia. Que no crea la Alianza que tiene carta blanca para negociar los temas específicos del pueblo”, dijo Francys Valdivia, presidenta de esa Asociación, en referencia a su reclamo principal de lograr justicia.
“Esperamos que la Alianza Cívica nos dé una respuesta, y esperamos la contundencia en su posición cuando se conozcan los temas a negociar. Esperamos que no le den la espalda al pueblo, que tiene una necesidad absoluta de verdad y justicia”, añadió.
La entrevistada lamentó que, “como Asociación, no hemos sido invitadas a ninguna reunión previa, pero nosotras hemos sentado nuestra posición ante un posible reinicio del diálogo. No concebimos que se instale ese diálogo sin la participación directa de nosotros, familiares de personas asesinadas”, reiteró.
Valdivia reporta que no saben cuáles son los temas a abordar, ni el mecanismo a seguir, ni el proceso que se usó para seleccionar a quienes se sentarán a negociar con el Gobierno de Daniel Ortega, pero insisten en que ellas deben ser “interlocutoras directas”, y que se debe establecer cuáles serán los mecanismos para impartir justicia, y que sea una justicia real y objetiva.
Al respecto dijo que aceptan las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y las del Grupo Internacional de Expertos Independientes (GIEI), en el sentido de “crear una fiscalía especial, a través de una comisión de la verdad que sea real, en la que tengan participación los familiares de personas asesinadas”.
Justicia real
La Asociación entiende que, para ello, hay que “definir los mecanismos en la vía nacional y en la internacional, aplicando la justicia universal.... vamos a agotar todas y cada una de las instancias nacionales e internacionales. Aspiramos a no tener que presentarnos ante una corte internacional, si se realizan las investigaciones y se lleva a cabo un proceso dentro de Nicaragua”, aseveró.
Pero no se trata de cualquier proceso. Las madres “queremos verdad, justicia, y una reparación integral: una justicia real, no maquillada. Que se cumpla lo que la Ley define como justicia”, exigió Valdivia.
“Los asesinatos de nuestros hijos, hermanos y esposos siguen en la impunidad. Los casos están archivados, sin absolutamente ninguna voluntad de esclarecer los hechos, o de impartir justicia”, reiteró.
Por ello, demandan del Estado “rescatar y dignificar la memoria de nuestros familiares, porque ninguno de ellos era delincuente: eran jóvenes, estudiantes, con un futuro por delante. Eran personas trabajadoras, que salieron a ejercer su derecho de protesta, de manifestación, y fueron reprimidos letalmente, asesinados. La única justicia que entendemos, es la que se va a definir desde la participación de las personas asesinadas”.
Las madres y familiares de las víctimas sienten que el proceso comienza por el reconocimiento de sus parientes asesinados, porque el Gobierno las ha excluido, “y ni siquiera reconocen el asesinato de nuestros familiares”, señaló.
Ante esa actitud insensible, la reacción de las madres es que “no olvidamos. No nos reconciliamos y no perdonamos. Para que exista un proceso de reconciliación, primero debe haber un reconocimiento de los hechos cometidos. No puede haber borrón y cuenta nueva sin haber asumido las responsabilidades pertinentes”, sentenció.
“Haremos todo lo que legal y humanamente nos sea posible para luchar y encontrar esa verdad y justicia. No aceptaremos maquillaje, ni borrón y cuenta nueva. Primero debe haber un reconocimiento de los crímenes cometidos, acompañado después de verdad y justicia. Es la única manera”, resumió.