14 de septiembre 2016
El asesor presidencial en temas ambientales, el científico Jaime Incer Barquero, criticó con severidad la inacción del Ministerio del Ambiente y Recursos Naturales (MARENA) ante la destrucción de la Reserva Biológica Indio Maíz por parte de los llamados colonos. “Es inexplicable”, reaccionó el exministro de esa institución.
El Reglamento De Áreas Protegidas De Nicaragua, establecido vía decreto número 01-2007 y aprobado el 08 de Enero del 2007, obliga al MARENA a velar por Indio Maíz. Sin embargo, Incer Barquero describió una actitud de indiferencia: “Están ciegos, sordos y mudos”, recalca este reputado científico, uno de los mayores conocedores del medioambiente nicaragüense.
“Cuando asisto a foros internacionales y digo que la institución gubernamental encargada de proteger el ambiente no hace nada, todo el mundo queda sorprendido”, aseguró el científico. “Eso es un descrédito para el gobierno, para el país, destruir la naturaleza sin la que no es posible la sobrevivencia”, afirmó.
Incer Barquero sostuvo que el discurso del gobierno del comandante Daniel Ortega pro ambiente y de reforestación no se corresponde a la realidad.
“No ha habido previsión ecológico, e incluso las leyes consideran delito la falta de previsión”, aseguró Incer Barquero, en referencia al proyecto del Canal Interoceánico, cuyos promotores aseguran que reforestaran el área circundante al Río Punta Gorda, donde piensan construir un embalse artificial.
“Sembrar veinte mil palitos no es reforestar. Es cero en relación a las miles de hectáreas pérdidas en Nicaragua”, agregó el científico, refiriéndose también a la campaña “Yo Adopto un Árbol por Amor a Nicaragua”, lanzada por la primera dama Rosario Murillo para contrarrestar las críticas provocadas por el saqueo permitido de pino en Dipilto y Jalapa en abril pasado.
Más de dos mil hectáreas han sido arrasadas solo en Indio Maíz, de acuerdo a estudios del gobierno territorial Rama-Kriol y la fundación ambientalista del Río.
Incer Barquero explicó que los Bosques Tropicales Húmedos (como Indio Maíz), que existen desde el sur de México hasta los pies de la cordillera de los Andes, son primordiales para evitar la erosión, la disminución del caudal de los ríos y son “pulmones de oxígeno”.
“Sintiera vergüenza”
El exministro del MARENA expresó que si fuese actual funcionario de esa dependencia estatal sentiría vergüenza. “Porque todo cae y no hacen nada, y están en la obligación de defender el medio ambiente y educar a la gente y a los líderes”, dijo.
Incer Barquero criticó que las municipalidades también callen, y que estén faltos de previsión para sancionar delitos ambientales. Opinó que no actúan porque hay “intercambios de beneficios personales, pase (tráfico) de madera, pase de droga y pesca ilegal”.
“Estamos destruyendo el trópico para favorecer intereses personales. Hay ignorancia supina de las autoridades”, reprendió el asesor presidencial, quien aseguró que existen sectores políticos que alientan la invasión de la reserva cambio de votos y la promesa de legalizar los terrenos.
El científico auguró periodos difíciles ante el cambio climático, un riesgo que se ha instalado como un tema de preocupación mundial. Incer barquero dijo que los bosques resultarían importantes para combatirlo: los árboles canalizan la infiltración y la humedad.
“Jugamos con dos grandes peligros: El Niño y la Niña. Con el despale no hay bosques y aparece la erosión y la sequía. Después vienen las inundaciones”, ejemplificó el científico, quien dijo que Nicaragua no posee “una clara política que defienda los recursos naturales”.
Sector privado y responsabilidad compartida
En Indio Maíz (y como en otros bosques y territorios indígenas) la ganadería es la principal amenaza. Incer Barquero dijo que una hectárea boscosa tiene más valor que cuatro litros de leche.
El científico no entiende cómo es posible que sigan dando préstamos para ganadería, lo que implica destruir bosques para sembrar pasto para el hato. “Una hectárea de bosque tiene veinte veces más valor que una de zacate”, insistió Incer Barquero.
El asesor presidencial habló de una “responsabilidad compartida” de la empresa privada para practicar un modelo amigable con el ambiente.
Sin embargo, precisó que el sector privado nacional “tiene una visión cortoplacista del manejo sostenible y adecuado del medio ambiente”. “Esperan ampliar la frontera agrícola a expensas de la destrucción de los bosques y deforestar el suelo”, señaló.
Incer Barquero lamentó “el concepto errado de la producción inmediatista” del sector privado. “Somos un país que destruye sus recursos naturales”, sentenció.