5 de diciembre 2023
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Por segundo año consecutivo, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo incrementará en 2024 la partida presupuestaria a las 153 municipalidades que están bajo su control. Los aumentos más notorios ocurrirán en las alcaldías que antes eran opositoras y fueron asaltadas por el Frente Sandinista en 2022.
Las transferencias municipales de 2024 alcanzarán los 10 356 millones de córdobas, el 69.5% más que los 6100 millones destinados en 2023, y tres veces más que los 3396 millones asignados en 2022, cuando no estaban bajo control del FSLN.
El aumento beneficia en gran medida a las 18 municipalidades que antes eran administradas por Ciudadanos por la Libertad (CxL), el Partido Liberal Constitucionalista (PLC) y la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN). Todas estas alcaldías habían sido “castigadas” desde 2019, cuando Ortega redujo y congeló sus transferencias municipales.
El doble de presupuesto en La Trinidad y El Almendro
De estas 18 alcaldías, la que más multiplicará su presupuesto es la de La Trinidad, ubicada en Estelí, al pasar de 4.2 millones en 2022, cuando estaba al mando del PLC, a 37 millones ahora que es controlada por el Frente Sandinista.
Lo mismo ocurrirá en El Almendro, ubicada en Río San Juan y que antes era administrada por el CxL. En 2024, esta alcaldía recibirá 35 millones de córdobas, ocho veces más que los 4.5 millones asignados en 2022 y casi el doble de los 19 millones que le dieron en 2023.
El presupuesto general para las alcaldías de Nicaragua se redujo en 2019 y bajó aún más en 2020, alcanzando una disminución del 61% en comparación con 2018. Entre las 153 alcaldías, las “más castigadas” fueron las opositoras. Y cuando luego hubo un aumento en las partidas presupuestarias municipales, estas no recibieron incrementos ni en 2021 ni en 2022.
Ortega incrementó las transferencias municipales hasta 2023 cuando se hizo con el control de las 153 municipalidades. Ese año se registró un aumento del 79.9% y para el próximo año ya está previsto incrementarlas en un 69% más.
Alcaldías opositoras “ahogadas” económicamente
Este incremento exponencial por segundo año consecutivo vuelve a confirmar el ahogo financiero del régimen contra las alcaldías opositoras, que eran castigadas con una asfixia económica que se agudizó en represalia por las protestas cívicas de la Rebelión de Abril de 2018.
La dictadura orteguista completó su asalto a la autonomía municipal en julio de 2022, cuando usurpó cinco alcaldías administradas por el partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), a solo cuatro meses de las votaciones municipales. Además, en octubre de 2020, ya había asaltado la Alcaldía de Wiwilí, en Jinotega, administrada por el Partido Liberal Constitucionalista (PLC).
Ahora que las 153 municipalidades están bajo control del Frente, el orteguismo no tiene frenos en autorizar el desembolso del dinero.
Cinco y hasta seis veces más presupuesto
CONFIDENCIAL analizó las transferencias municipales registradas en los libros del Presupuesto General de la República de 2018 a 2023 y en el proyecto de 2024, documentando que hay cuatro alcaldías opositoras que sextuplicarán en 2024 su partida estatal.
Estas son las municipalidades de El Tortuguero y Muelle de los Bueyes, antiguas PLC; Murra y Santa María de Pantasma, antes CxL. Las primeras dos pasarán de seis millones en 2022 a 35 millones de córdobas en 2024. Mientras, Murra incrementará de cinco millones a 35.6 millones y Santa María de Pantasma de 6.8 millones a 42 millones de córdobas en tan solo dos años.
Otras nueve alcaldías quintuplicarán su asignación presupuestaria en 2024. Estas son las municipalidades de El Cuá con 35.6 millones de córdobas y San Sebastián de Yalí con 38 millones, antiguas CXL.
Seguido están Camoapa con 42 millones, Ciudad Antigua, Mulukukú y La Cruz de Río Grande con 35 millones cada una; San Francisco de Cuapa, San José de los Remates y Santo Domingo con 36 millones respectivamente.
Mientras, Paiwas que era administrada por el PLC pasará de 10 millones a 35.5 millones y Wiwilí de Jinotega de 24 a 63 millones de córdobas.
El sociólogo y municipalista Silvio Prado ha valorado que el aumento de las transferencias se puede interpretar como una estrategia del régimen para “comprar voluntades” de la población opositora.
Según el especialista, hasta ahora la dictadura de Ortega ha ejecutado un proyecto hegemónico en el cual la represión y el estado policial de facto cumplieron la función de dominar, pero ahora buscan amparar a su régimen político y “como no ha sido capaz de generar el vehículo cultural para domesticar el rechazo del pueblo, ahora tratará de comprarlo”.
Managua, la cabecera departamental con más aumento
Del aumento en las transferencias municipales, Managua es la cabecera departamental que más se beneficiará. Según el proyecto del PGR de 2024, a la capital se le asignarán 1307 millones de córdobas, un 96% más que los 666 millones destinados en 2023.
Ocotal también será beneficiada con 98 millones de córdobas, 1.7 veces más que los 57 millones asignados en 2023. Un aumento similar tendrá Estelí que este año recibió 125 millones y el próximo le darán 214 millones.
Por su parte, San Carlos pasará de 61 millones de córdobas a 103 millones; Jinotega de 123 a 204 millones, Chinandega de 124 a 207 millones y Puerto Cabezas de 62 a 103 millones.
Prado, coautor del informe “Municipios nicaragüenses: Entre la subordinación política y el rechazo ciudadano” de la oenegé Red Local, explicó que, a un año del establecimiento del control absoluto del Frente Sandinista en los 153 municipios del país, “la autonomía municipal ha sido confinada”.
Según su investigación, ahora que el Frente Sandinista tiene el control de todas las alcaldías “las decisiones se toman en reuniones a puertas cerradas en Managua y no en los municipios como debería ser”.
Las decisiones, explica, se toman en “en reuniones cerradas donde van los alcaldes con los secretarios políticos y algunas veces va el secretario del Consejo Municipal a aceptar las orientaciones que les da alguien del Gobierno central”.
Asimismo, el estudio confirmó que “hay una red de corrupción brutal” en las municipalidades y hay una serie de “empresas consultoras de papel, se están quedando con el pedazo de pastel de las contrataciones públicas”.
