9 de noviembre 2015
Familiares de los ex cañeros que permanecen detenidos en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), desde hace 31 días, se movilizaron este lunes hacia las oficinas de la Policía Nacional, en Plaza El Sol, para demandar la liberación de las 16 personas (cinco de ellas con Insuficiencia Renal Crónica-ICR), que fueron apresadas el 7 de octubre en las protestas de Chichigalpa.
“Libertad para nuestros hermanos detenidos, son inocentes, merecen libertad”, fue la consigna que repetían al unísono estas personas, que realizaron una “peregrinación” desde el miércoles pasado y llegaron a Managua la tarde del sábado.
La movilización tenía como ruta Plaza El Sol y luego las oficinas de la DAJ, sin embargo, decidieron posponer la ida hacia el último destino debido al cerco de antimotines que los mantuvo sin poder caminar por varios minutos. “Tuvimos miedo de que al llegar a El Chipote nos golpearan”, dijo María Peña Chávez, madre de Marcela Molina, quien está detenida en El Chipote.
En Plaza El Sol los familiares de los detenidos entregaron a las autoridades de la Policía Nacional una carta donde demandaban la liberación de los ex cañeros. “Para nosotros fue un éxito la marcha, porque logramos ese despliegue de la Policía. Ahora vamos frente a los antiguos juzgados a descansar. Mañana queremos ir al nuevo complejo judicial”, continuó doña María.
“No tenemos mucho dinero para sostener las marchas y el tiempo es corto. Lo que buscaremos mañana es la forma de conectar con la Iglesia Católica para que ellos puedan mediar con el gobierno y liberar a nuestros compañeros”, dijo José Noel García, miembro de la movilización.
Los ex cañeros fueron capturados hace 31 días mientras realizaban una protesta frente al Ingenio San Antonio para exigir la liberación de Roberto Nicoya, Presidente de la Asociación Nueva Esperanza. Fueron acusados en la audiencia preliminar el 10 de octubre, por crimen organizado y luego trasladados a la DAJ.
Maltrato
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) y los familiares de los detenidos expusieron a los medios de comunicación el maltrato, primero físico y ahora psicológico que reciben los detenidos en las celdas de El Chipote.
“A mi hija le dijeron que le iban a quitar a su hija de seis años, que a la familia la iban a acusar de otras cosas. Pero ella no está sola, y por eso es que estamos pidiendo que ya los liberen a todos”, expuso María Pérez.
Gonzalo Carrión, Director Jurídico del Cenidh, dijo que con los ex cañeros con que hablaron confirmaron el maltrato físico y psicológico. Agregó que con la retardación del proceso se demuestra la violación a sus derechos humanos.
“Los arrestaron hace 31 días en Chichigalpa, los traen a Managua y no los juzgan en su jurisdicción, les inventan un rosario de delitos. Hace 17 días se debió realizar la audiencia inicial y se suspende porque el juez Henry Morales se declara enfermo y luego este mismo juez apareció realizando otras audiencias en otros casos. Es una legítima demanda, un arresto prolongado caracterizado por el abuso”, estimó Carrión.
Para el director jurídico del Cenidh la detención de los ex cañeros es una manipulación de carácter política, porque no tiene fundamentos jurídicos y viola todos sus derechos, incluyendo el de las garantías procesales, pues los juicios se hacen en los términos legales que establece la constitución y el juez las ha violentado.
“Del total de los detenidos, cinco de ellos son (enfermos de) IRC. Los demás son personas que apoyan la lucha contra la familia Pellas”, finalizó Carrión.