3 de agosto 2021
La meta de dos migrantes nicaragüenses era la misma: llegar a territorio estadounidense; sin embargo, ninguno pudo cumplirla. Olivar Zeledón Benavides murió, el sábado 31 de julio, al caer de un tren en movimiento, mientras circulaba entre Zacatecas y Coahuila, México. Óscar Javier Fuentes Tórrez, de 50 años, fue asesinado a balazos la noche del domingo 01 de agosto, en las afueras de un albergue mexicano, en Tapachula, Chiapas.
Tirso Zeledón, hermano de Olivar, detalló a CONFIDENCIAL que su pariente gastó todos sus ahorros, incluso “quedó debiendo” a la persona que lo llevaba a territorio estadounidense. “Él quería buscar una mejoría económica para su familia, especialmente para su hijo que padece de epilepsia”.
Olivar salió de Nicaragua el pasado 16 de julio, junto a un sobrino, y avisaba constantemente su ubicación y situación de salud. La última comunicación fue el pasado viernes 30 de julio, cuando indicó que unos síntomas vinculados a la covid-19 estaban cediendo, que se sentía mejor y que esperaba llegar pronto a Estados Unidos.
“Me llamó esa mañana y le pregunté cómo estaba; me dijo que ya estaba bien, porque en el viaje le había dado calentura, diarrea, no quería comer y había perdido el gusto y el olfato, que no me afligiera, que pronto iba a llegar a Estados Unidos, esas fueron las últimas palabras que supimos de él”, relató Tirso.
Explicó que la muerte de su hermano le fue confirmada por “personas que lo encontraron” a orillas de las vías del tren; boca abajo, vestido de camiseta color negro, pantalón jeans y zapatos tenis. “Sabemos que lo recogió Medicina Legal y la Fiscalía de Coahuila, porque la persona que lo encontró allá nos envió la foto de él, que sale ahí tirado junto a las vías del tren. Solo sabemos hasta ahora que fue un accidente”.
Tirso indicó que buscarán repatriar el cuerpo de Olivar para que reciba cristianas sepulturas en su natal Estelí, aunque temen que haya “complicaciones” porque su pariente viajaba de forma ilegal, por lo cual pedirán apoyo a las autoridades nicaragüenses y mexicanas.
Nicaragüense es asesinado afuera de un albergue mexicano
Medios mexicanos reportaron que el nicaragüense Óscar Javier Fuentes Tórrez falleció la noche del pasado domingo, luego que dos sujetos en motocicleta dispararon contra un grupo de migrantes, que estaban en las afueras del albergue “Jesús el buen pastor”, en la carretera a la comunidad Raymundo Enríquez en Tapachula, Chiapas.
Según vecinos del lugar, los motorizados hicieron alrededor de siete detonaciones con armas de fuego.
Los disparos alcanzaron también al nicaragüense Melvin Abel Altamirano Ruiz, de 36 años, y a un hondureño, cuyo nombre no especificaron, quienes resultaron “gravemente heridos”.
Familiares que conversaron con los medios mexicanos explicaron que los nicaragüenses son oriundos de La Trinidad, Estelí, y habían salido hace “unos días” de Nicaragua con rumbo a Estados Unidos, pero que al llegar a México buscaron refugio en el albergue de Tapachula y desconocen el porqué del ataque.
María Tórrez Rizo, madre de Óscar Javier, solicitó —a través de un video divulgado en las redes sociales— ayuda para recaudar más de 9 000 dólares que necesitan para la repatriación del cuerpo de su hijo.
“Espero que me ayuden a repatriar el cuerpo de mi hijo porque quiero darle cristiana sepultura aquí en Nicaragua”, dijo la madre.
Explicó que Óscar Javier es el segundo hijo que pierde, pues en el contexto de las protestas sociales de 2018 su hijo William Antonio Fuentes Tórrez fue asesinado.
“Hace tres años me mataron uno, que cumplió los tres años ahorita el 10 de junio. Ellos dos eran los únicos hijos varones que tenía”, lamentó.
La Fiscalía General de México, en el distrito Soconusco, informó que el caso pasaría a la oficina especializada en la atención a delitos cometidos contra migrantes, para “integrar la carpeta de investigación correspondiente y esclarecer los hechos del ataque”.
Migración a Estados Unidos
Organizaciones de la sociedad civil de Nicaragua han advertido de un incremento en el número de nicaragüenses que salen de forma ilegal, sobre todo en los últimos tres meses, como consecuencia del incremento de la represión gubernamental contra opositores, activistas, campesinos y empresarios, y por la recesión económica que enfrenta el país desde hace tres años.
En las últimas semanas, el Gobierno de los Estados Unidos ha alertado también sobre un aumento de la migración ilegal hacia su frontera sur. Registran que cerca de 189 000 indocumentados fueron detenidos en junio pasado en la frontera sur estadounidense.
El secretario de Seguridad Nacional de EE. UU., Alejandro Mayorkas, atribuyó el incremento a la “violencia, los desastres naturales, la inseguridad alimentaria y la pobreza” en América Central y México.
*Con información de EFE