11 de abril 2023
La dictadura de Daniel Ortega confiscó el monasterio de las monjas trapenses ubicado en San Pedro de Lóvago, Chontales, y se le entregó al Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA), informaron este martes las religiosas, quienes salieron de Nicaragua el pasado 24 de febrero de 2023.
“El 01 de marzo se presentó ante Migob (Ministerio de Gobernación) la escritura de cierre voluntario y el 03 de marzo se presentaron las autoridades del Gobierno para informar verbalmente, a nuestro obispo (monseñor Marcial Guzmán), que ya no podían ir al monasterio”, señalaron.
Las monjas trapenses abandonaron Nicaragua después de 22 años de presencia en el país, según informaron se fueron por “falta de vocaciones, ancianidad de varias hermanas", pero aseguraron que continuarán su misión pastoral desde Panamá.
Tras su partida, las religiosas entregaron el convento, monasterio y los bienes e inmuebles a la Diócesis de Juigalpa, que administra los departamentos de Chontales y Río San Juan, y está a cargo de monseñor Marcial Guzmán Saballos.
La Diócesis se quedó con la administración del monasterio, mientras se completaba el proceso de cierre voluntario de personería jurídica ante el Migob. Sin embargo, este ministerio, controlado por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, confiscó el inmueble antes de rechazar el cierre voluntario o cancelar de forma unilateral la personería jurídica.
“En Panamá fuimos acogidas con gran cariño y generosidad y el Señor nos llama a comenzar de nuevo y de cero. Estamos buscando un lugar donde empezar a construir el Nuevo Monasterio Santa María de la Paz, en continuidad con las insondables gracias vividas en Nicaragua, a cuyo pueblo siempre llevamos en nuestro corazón y oración”, escribieron las hermanas trapenses.
Esta confiscación se suma a las más de 150 propiedades que la dictadura de Daniel Ortega ha tomado en los últimos años, según reveló el reportaje de Confidencial La Nicaragua confiscada: La nueva ola de robo de propiedades. De este total, casi 90 fueron despojadas a organizaciones sin fin de lucro, durante la cancelación masiva de personerías jurídicas.
El 28 de febrero pasado, las monjas trapenses compartieron en su página de Facebook fotos y videos del monasterio que comprobaban que hasta ese momento estaba bajo resguardo de la Diócesis. “Estás fotos han sido tomadas hoy. Todo está tranquilo. El monasterio está según lo dejamos en manos de la Diócesis”, escribieron.
Más de dos décadas en Nicaragua
Las monjas trapenses pertenecen a la Orden monástica católica OCSO, por su nombre en latín (Ordo Cisterciensis Strictioris Observantiae), bajo la regla de San Benito, y tenían el monasterio Santa María de la Paz, en el municipio de San Pedro de Lóvago, departamento de Chontales.
Desde Hinojo, Argentina, las hermanas trapenses llegaron a Nicaragua el 20 de enero de 2001.
Las monjas trapenses se convierten en el segundo grupo de religiosas que dejan Nicaragua. Las primeras fueron 18 monjas de la orden Misioneras de la Caridad, fundada por la Madre Teresa de Calcuta, que dejaron Nicaragua en julio del año pasado después de que la Asamblea Nacional, bajo el control del orteguismo, y a petición del Ejecutivo, les cancelara su personalidad jurídica.
Las propiedades de las Misioneras de la Caridad también fueron confiscadas por el Migob. Semanas después de su partida, la dictadura anunció que instalaría un Centro de Desarrollo Infantil (CDI) en el hogar de ancianos que administraban las hermanas, en Granada.
El Migob ha cancelado la personería jurídica de 3321 organizaciones sin fin de lucro desde noviembre de 2018 a marzo de 2023. Estas incluye más de 300 organizaciones religiosas, entre católicas y evangélicas. Entre ellas: Asociación Cáritas Diocesana de Estelí, la Asociación de Publicadores Católicos "Publica" que producía el periódico Voz Católica de Nicaragua, entre otras.