7 de noviembre 2023
La venezolana Yeleida Quintero, de 50 años, creyó que cruzar el tapón del Darién, en Panamá, sería lo más difícil de recorrer en los más de 4500 kilómetros rumbo a Estados Unidos. Y aunque sí fue duro, al llegar a Nicaragua supo que la selva no era lo peor.
La migrante venezolana viajaba con dos de sus hijos y dos nietos, y fue obligada a pagar 150 dólares, por cada uno, para cruzar Nicaragua y seguir con su camino al norte. Pagó un total de 750 dólares, que es treinta veces el salario de 25 dólares que cobraba cada mes como enfermera en Venezuela.
“Hay gente que es peor que la misma selva”, dijo con impotencia Quintero.
Entre enero y octubre de 2023, Migración y Extranjería habría recibido unos 65.9 millones de dólares por las multas a migrantes que cruzan Nicaragua rumbo a Estados Unidos, según una estimación de CONFIDENCIAL, basada en el número de migrantes irregulares que reportó Honduras en sus cuatro delegaciones migratorias fronterizas con Nicaragua.
“Nos quitaron lo poco que traíamos”, dijo la migrante venezolana a la agencia de noticias EFE, poco antes de abordar un bus que la llevaría junto a su familia a Agua Caliente, frontera entre Honduras y Guatemala. Apenas a la mitad de su recorrido hacia Estados Unidos.
La advertencia de Estados Unidos
El 6 de noviembre, el subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, Brian A. Nichols, expresó la preocupación de su país “por informes de un aumento dramático en vuelos chárter con destino a Nicaragua, que facilitan la migración irregular desde Cuba y otros lugares hacia Estados Unidos”.
En un hilo a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), Nichols añadió que “nadie debería beneficiarse de la desesperación de los migrantes vulnerables… ni los contrabandistas, ni empresas privadas, ni funcionarios públicos, ni Gobiernos”.
También advirtió que Estados Unidos está “explorando toda la gama de posibles consecuencias para quienes facilitan esta forma de migración irregular”, tras instar a los migrantes “al uso de vías seguras y legales”.
Más de 439 900 migrantes han cruzado por Nicaragua en 2023
Nicaragua no reporta cuántos migrantes han pasado por el país en lo que va de 2023, ni tampoco sus nacionalidades. Sin embargo, en el Aeropuerto Internacional de Managua y otras terminales de transporte es notoria la presencia de migrantes. Los más recientes: miles de haitianos que llegan a la terminal aérea a bordo de vuelos comerciales, como los 36 vuelos que aterrizaron en Managua, procedentes de Puerto Príncipe, en solamente tres días.
Para estimar cuántos migrantes están pasando por Nicaragua, CONFIDENCIAL consultó las estadísticas del Instituto Nacional de Migración de Honduras que, entre enero y octubre de 2023, reportó que 440 203 migrantes irregulares entraron a su territorio. De estos, 439 972 (un 99.59%) fueron identificados en las delegaciones de Cami Danlí, Trojes, Danlí y Choluteca, cercanos a los puestos fronterizos nicaragüenses de Las Manos, El Espino y Guasaule. Es decir, que son migrantes que tuvieron que pasar por Nicaragua, y en su mayoría –con seguridad– pagar la “multa” de Migración nicaragüense.
Según los datos oficiales del Gobierno hondureño, 187 902 de los migrantes que entraron a su territorio (un 42%) eran de origen venezolano. Mientras, otros 73 188 (17%) eran haitianos; 64 818 (15%), cubanos, y 38 964 (9%), ecuatorianos. Estas son justamente las cuatro nacionalidades que más están utilizando actualmente a Nicaragua como “puente” migratorio, y las que más han denunciado cobros arbitrarios de parte de las autoridades nicaragüenses.
La coima de Migración y el “salvoconducto” que no existe
A los migrantes que cruzan por Nicaragua, las autoridades migratorias les exigen el pago de 150 o 200 dólares por un “salvoconducto”, un supuesto permiso temporal de tránsito, que no existe en Nicaragua.
La integración de esta multa ocurrió junto con la dolarización de todos los servicios de migración para extranjeros. CONFIDENCIAL verificó que, con la implementación de esa medida, también se multiplicaron las recaudaciones de Migración y Extranjería.
En 2019 –cuando no existía la multa– la DGME recaudó 7.7 millones de dólares. La cifra se duplicó en 2021, cuando lo recaudado superó los 16.9 millones de dólares, según confirmó CONFIDENCIAL en una revisión de los informes de ejecución presupuestaria de 2018 a junio de 2023. En los informes del régimen, este aumento se registra únicamente como “otras tasas por servicios de migración y extranjería”, pero su incremento coincide con el crecimiento del flujo de migrantes irregulares reportados en Honduras.
La recaudación de Migración y Extranjería no para de crecer, así como el número de migrantes que cruzan Nicaragua rumbo a Estados Unidos.
En 2022, Migración y Extranjería reportó una recaudación por “otras tasas de servicios” por más 26.8 millones de dólares. Es decir, 3.6 veces más que la recaudación reportada en 2019.
La tendencia se mantiene en 2023. Durante el primer semestre del año, Migración reportó 18.5 millones de dólares. Y eso coincide con el flujo de migrantes en Honduras. En ese período, la nación catracha reportó 135 493 migrantes irregulares de todas las nacionalidades. Si cada uno de estos migrantes fue detectado en Nicaragua, y por tanto objeto de 150 dólares de “multa”, el resultado es de 20.3 millones de dólares, una cifra bastante cercana a la recaudación oficial reportada por Migración.
Basados en este cálculo, los más de 439 900 migrantes que han llegado a Honduras entre enero y octubre de 2023, a través de puestos fronterizos con Nicaragua, habrían dejado a la dictadura 65.9 millones de dólares a un costo de 150 dólares cada uno. O hasta 87.9 millones si el cobro ha sido de 200 dólares cada uno.
Nicaragua puente de más de cien mil migrantes del Caribe
El Banco Central de Nicaragua (BCN) reporta que, desde 2021, cuando Ortega flexibilizó los requisitos migratorios para Cuba, el Aeropuerto Internacional recibe más personas que llegan al país, pero no retornan. Esto sugiere que son migrantes que usan Nicaragua como “trampolín” o “puente” migratorio.
El BCN reportó 634 000 viajeros a través del aeropuerto en 2022, pero de esos 322 000 no retornaron. Hasta agosto de 2023 han llegado 476 000, y de esos 100 000 habrían seguido su camino al norte.
Una parte de estos migrantes que pasaron por Nicaragua proviene de Cuba y Haití. Mientras otros países han extremado las restricciones migratorias en un intento por frenar su migración masiva de estos dos países caribeños, Nicaragua les ofrece libre visado y una posición geográfica estratégica en la ruta a EE. UU., sobre todo para quienes optan por evitar el tapón del Darién de Panamá.
“Los datos de vuelos de agosto a octubre apuntan a más de 260 con una media de más de 30 000 haitianos. Esto supone casi el 60% de todas las llegadas de haitianos a la frontera” estadounidense, explicó Orozco en su artículo “Una crisis migratoria sin precedentes: Caracterizar y analizar su profundidad”.
El investigador también señala que, durante este año, han llegado a Managua 50 vuelos mensuales procedentes de La Habana, Cuba. Estos traían una media de 5700 pasajeros, que representa el 40% del número de llegadas a la frontera entre Estados Unidos y México.
"En un pujante negocio, Nicaragua se transformó en una base aérea para recibir gran cantidad de vuelos de Europa y América Latina y el Caribe con numerosos migrantes irregulares cubanos, haitianos, africanos y asiáticos que logran esquivar el paso por el Tapón del Darién y usan a Managua como punto de origen de su travesía terrestre a México y Estados Unidos", indicó el 8 de noviembre el diario mexicano El Universal, en el reportaje "Nicaragua se suma al negocio de la migración en América", publicado un par de días después de este reporte de CONFIDENCIAL.
El diario mexicano cita un informe de octubre de 2023, facilitado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), asociada a la Organización de Naciones Unidas (ONU), en el cual indica el número de cubanos, haitianos y africanos en tránsito por Panamá mermó de enero a septiembre de este año, pero aumentó por Honduras. Tal como muestran los datos del Gobierno hondureño antes citados.
El drama de los migrantes y los abusos de la dictadura
Si bien estas estadísticas evidencian el millonario negocio de Daniel Ortega, cada cifra es la historia de una persona que tuvo que dejar todo en busca de una mejor calidad de vida, de una familia que casi muere en la selva, de una mujer que vendió las pocas pertenencias que tenía para comprar el billete que la dejaría más cerca del “sueño americano”, o de aquellos que esperaron días en la frontera –a la intemperie– hasta reunir los 150 o 200 dólares por cada uno, para seguir su viaje.
En agosto de 2022, dos grupos de 118 migrantes venezolanos que entraron a Nicaragua vía marítima desde la isla San Andrés, Colombia, denunciaron a CONFIDENCIAL que fueron desnudados para despojarlos de los 150 dólares.
“Yo tenía 170 dólares para el viaje y de corazón yo les di 20, calculando que me sobrara para continuar, pero cuando me desnudaron me encontraron los otros 150 dólares, entonces me devolvieron los 20 y me quitaron los 150”, denunció a CONFIDENCIAL el migrante Luis Alfredo González.
“Son unos corruptos, tanto sacrificio que uno hizo para salir de Venezuela y que todavía los mismos funcionarios le vengan a robar es indignante”, lamentó el migrante.
Ortega usa a migrantes como fichas de cambio
Los migrantes han sido una “ficha de cambio” en la dictadura de Daniel Ortega. Entre 2015 y 2017, Nicaragua cerró las fronteras para quienes se atrevían a seguir la ruta a Estados Unidos.
La indiferencia a esta crisis humanitaria detonó en más de 8000 cubanos, haitianos y africanos varados en la frontera de Peñas Blancas. Mientras, el Gobierno de Daniel Ortega acusó a Costa Rica de “violación a nuestra soberanía y promover ingreso forzoso de cubanos a nuestro país”.
“Responsabilizamos al Gobierno de Costa Rica por desencadenar una crisis humanitaria de graves consecuencias para nuestra Región”, dijo en un comunicado el Gobierno de Ortega.
Esta crisis migratoria fue planeada, según la investigadora mexicana Gleicys Moreno, autora del libro Migración indocumentada en Centroamérica. A su juicio, el Gobierno de Cuba y de Nicaragua usaron estas medidas para presionar a Estados Unidos a eliminar la política de “pies secos-pies mojados”, un viejo reclamo de las autoridades cubanas.
“La migración irregular de cubanos a EE. UU. ha sido utilizada a lo largo de los años como un instrumento para generar cambios en las políticas relativas al área migratoria. Después de cada gran éxodo, los dos Estados se han sentado a dialogar y han llegado a acuerdos que contribuyeron a disminuir el flujo indocumentado y a aumentar el legal”, señala Moreno.
En 2019, Ortega flexibilizó los requisitos de los cubanos para obtener la visa nicaragüense, provocando que Nicaragua se convirtiera en el destino de compras de los habitantes de la isla, que frenó durante la pandemia.
Políticas migratorias y presiones políticas
El 22 de noviembre de 2021, finalmente autorizó el libre visado para los isleños, que detonó un nuevo aumento de la migración. Este cambio de políticas fue interpretado como una forma de abrir un canal de negociaciones entre Cuba y la Administración estadounidense de Joe Biden. Mientras, Nicaragua lo habría usado como respuesta a las sanciones que impuso a sus familiares y a sus principales fichas políticas, según analistas.
La actual crisis migratoria ha provocado preocupación entre los gobiernos de la región centroamericana. Panamá informó que, hasta septiembre, unos 415 104 migrantes cruzaron el Darién y se espera que se supere el medio millón al finalizar 2023.
Panamá y Costa Rica se unieron para poner en marcha un “corredor humanitario” que permita el paso rápido de los migrantes en ambas naciones. Una medida similar ejecuta Honduras, que eliminó el cobro de 270 dólares por un salvoconducto y habilitó 18 buses para trasladar a los migrantes a la frontera con Guatemala.
El 21 de octubre, Ortega se pronunció sobre la crisis migratoria y volvió a culpar a las sanciones internacionales de impulsar la migración de nicaragüenses, venezolanos, cubanos y otras nacionalidades. “Sigan poniendo sanciones –dijo Ortega—, y seguirán llegando los migrantes a sus puertas”.
*Nota del Editor: Este reportaje de CONFIDENCIAL fue actualizado el 8 de noviembre de 2023.