18 de septiembre 2020
A seis meses del anuncio oficial del primer caso de covid-19 en Nicaragua, el independiente Observatorio Ciudadano COVID-19 concluyó que el sistema de salud ha perdido la confianza de las familias en medio de la pandemia del nuevo coronavirus, debido a la poca información pública sobre la misma, y a su manejo por parte del Gobierno.
“Las familias han perdido la confianza en el sistema de salud, en especial los hospitales, tanto públicos como privados”, señaló el observatorio, una red de médicos y voluntarios de toda Nicaragua, en un análisis a seis meses que se reportara el primer caso de covid-19 en el país.
“Las familias han optado por buscar consejo en canales alternativos de servicios incluida la información en redes o vía telefónica. Tampoco hay evidencia de que los centros de atención primaria hayan sido de utilidad para la ciudadanía en la atención y prevención del COVID-19”, indicó.
Según el informe, la desconfianza se debe en parte a “la ausencia de una respuesta responsable y adecuadamente guiada por las autoridades nacionales”.
También a que las autoridades sanitarias “aún no han realizado un solo estudio de prevalencia, ni entre poblaciones de mayor vulnerabilidad, como los mayores de 60 años o los y las trabajadores de la salud, menos aún entre la población en general”.
Situación desconocida
El observatorio criticó que seis meses después, desde que se reportó el primer caso de la COVID-19 en Nicaragua, el Gobierno solamente haya reportado 147 fallecidos y 4961 casos confirmados.
“El pueblo sigue sin saber cuál es la verdadera situación de la infección. No ha habido informes de prevalencia, se desconocen los datos reales del número de enfermos leves, moderados y graves, aún en el caso de los fallecidos, se desconoce la verdadera magnitud de la pandemia”, apuntó.
En el informe, el observatorio dijo que todavía se observan en Nicaragua “elevados índices de automedicación, atención tardía y otros comportamientos inadecuados”, como producto de la desinformación.
Asimismo, el observatorio afirmó que “hay personas que están próximas a cumplir seis meses de encierro en sus casas” en cuarentena voluntaria.
“Los hogares se han responsabilizado, sobre todo las mujeres, de las tareas de acompañamiento educativo, se ha incrementado la inversión en acceso a internet, se han debido modificar las prácticas de compras, algunos han disminuido sus actividades de entretenimiento y todo esto ha ocasionado una fuerte desaceleración de la economía en el país”, anotó.
En contraste, observó que el Gobierno sigue promoviendo eventos públicos y aglomeraciones, las cuales, dijo, “tendrán un impacto posterior”.
En ese sentido, exigió al Ministerio de Salud a cumplir “con su responsabilidad de la rectoría de la salud pública, que incluye informar a la población para que conozca sus riesgos y de esta manera sepa cómo protegerse”.
El observatorio reporta 2707 fallecimientos por neumonía y otros síntomas relacionados con el nuevo coronavirus, así como 10 205 casos sospechosos.