9 de noviembre 2021
La perspectiva de un nuevo mandato de Daniel Ortega en Nicaragua "es aterradora en un país donde las violaciones a los derechos humanos se volvieron cada vez más comunes durante su Gobierno" y "augura un nuevo y terrible ciclo", advirtió Amnistía Internacional en un comunicado.
"Una vez más, las personas en Nicaragua se encuentran ante un contexto en donde expresar una crítica en contra de su Gobierno los pone en grave riesgo", declaró Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
Además, detalló que durante los últimos años han sido testigos "del desarrollo de la trama de una historia de terror en el país" en el que son prácticas comunes "la represión letal, las detenciones ilegales, los malos tratos, el hostigamiento y criminalización contra personas defensoras de derechos humanos y periodistas".
Según el organismo todas estas violaciones han sido "avaladas por un sistema judicial y una Asamblea Nacional sin independencia, que solo existen para ponerle sello a la agenda represiva de Daniel Ortega".
Proceso electoral en Nicaragua marcado por violaciones
El comunicado del organismo internacional menciona que las elecciones realizadas el domingo 7 de noviembre "estuvieron marcadas por detenciones arbitrarias de activistas y p
Además alertaron que la libertad de prensa "también estuvo en la mirilla del Gobierno" y los medios de comunicación independientes denunciaron "restr
En su informe del proceso electoral, el Observatorio Ciudadano Urnas Abiertas registró al menos 200 hechos de violencia en los Centros de Votación (CV) de los diferentes departamentos del país, incluyendo la presencia de fuerzas parapoliciales en las cercanías de los centros de votación, así como intimidación y coacción hacia trabajadores del Estado para forzar su voto.
“Hemos procesado hasta las 4:30 pm hechos de violencia política o anomalías procedentes de todos los departamentos del país y del 78 por ciento de los municipios, es decir 119 municipios”, indicó Olga Valle, investigadora de Urnas Abiertas.
Seguirán intentando silenciar críticas
Guevara Rosas afirmó que este nuevo y consecutivo mandato de Daniel Ortega y Rosario Murillo, como presidente y vicepresidenta, "vaticina la perpetuación de las estructuras que han implementado la estrategia represiva contra voces críticas y garantizado la impunidad de crímenes del derecho internacional".
"Además, este nuevo periodo presagia la continuidad de la migración forzada de quienes se ven criminalizados por alzar la voz", dijo.
En ese sentido, demandó que la comunidad internacional "debe hacer más que apoyar a las valientes personas nicaragüenses que continúan luchando por sus derechos humanos".
"En la sesión ordinaria de la Asamblea General de la OEA, que se celebrará esta semana, los Estados miembros deben asumir colectivamente sin dilación la corresponsabilidad de proteger los derechos humanos de las personas en Nicaragua y poner presión al Gobierno de Ortega como primer paso ante este contexto poselectoral", precisó.
También solicitó que "los foros multilaterales deben hacer todo lo posible para lograr que las estructuras de represión e impunidad en Nicaragua dejen de ser intocables".