26 de mayo 2020
El veterano artista Otto de la Rocha, icono de la cultura popular de Nicaragua, falleció este 25 de mayo a los 86 años, tras días internado en un hospital de Managua, en medio de la pandemia por la covid-19, aunque su muerte está vinculada a una enfermedad preexistente, por la que fue ingresado.
El pasado 21 de mayo, se había difundido la noticia de la supuesta muerte del artista, de afinidad sandinista.
Uno que lamentó la muerte de De la Rocha antes de tiempo fue el comunicólogo y exdecano de la extinta Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Centroamericana (UCA), Guillermo Rothschuh Villanueva, quien publicó un post en su perfil de Facebook, el pasado 21 de mayo. Minutos más tarde, Rothschuh rectificó y dedicó su columna semanal de CONFIDENCIAL al artista nicaragüense.
"Después de leer al menos una docena de posts en Facebook dando por muerto al compositor Otto de la Rocha, entré en contradicción con reglas elementales del periodismo", admitió en el texto "Otto de la Rocha ¡vive!", publicado este domingo 24 de mayo.
Agregó que "en Otto se conjugan aspectos que le han permitido formar parte del imaginario nacional. Lencho Catarrán y La Palomita Mensajera, han colmado el apetito de distintas generaciones. El primero una derivación de Pancho Madrigal, la creación imperecedera de Fabio Gadea Mantilla y el segundo un parto original, el humor hace presencia a través de las ambigüedades y dobles sentidos del habla popular".
Otto de la Rocha falleció de una "enfermedad de uno no espera"
La muerte de De la Rocha fue confirmada por la esposa de Daniel Ortega, la vicepresidenta y vocera, Rosario Murillo, quien comentó que el artista falleció víctima de una enfermedad “que uno no espera”.
De la Rocha, conocido por interpretar algunos de los personajes radiales más populares en Nicaragua, llevaba cuatro años sufriendo “una de esas enfermedades que uno no se espera, pero que llegan”, dijo Murillo.
En los últimos 30 años de su vida, De la Rocha fue reconocido por interpretar a Aniceto Prieto, el personaje principal del programa radial “Lencho Catarrán”, que recurría a la comedia para contar las historias de un joven pícaro y holgazán, al que sus “bandidencias” impedían que la fuera bien en la vida, incluyendo la conquista de su eterno amor, la “Lupita”, interpretada por la esposa del artista, la actriz Georgina Valdivia.
Durante su mensaje por la muerte del artista, Murillo llamó “Lupita” a Valdivia, y luego corregir bajo “Gina”, apodo con que se conoce a las mujeres llamadas Georgina en Nicaragua.
De la Rocha también fue conocido en las últimas décadas por “La palomita mensajera”, un programa radial con humor en doble sentido, en el que leía los mensajes que se intercambiaba gente del campo y la ciudad, o de Nicaragua con Costa Rica, brindaba consejos, se burlaba de canciones ridículas, y arengaba a los estudiantes que no cumplían con sus deberes.
Ya desde mediados del siglo pasado, De la Rocha era conocido por sus interpretaciones de Lencho Catarrán, personaje del programa radial del mismo nombre, que le sirvió de inspiración para crear posteriormente a Aniceto Prieto, y por interpretar al Indio Filomeno, personajes que imitaban a un campesino con la clásica viveza de pueblo, que marcaron una época en Nicaragua.
De la Rocha fue un artista precoz, que se estableció en el mundo de la radio nicaragüense desde que era un adolescente de 13 años, y también destacó como compositor y cantante.
Entre sus canciones más destacadas están “Managua, linda Managua”, “La Pelo´e maiz”, “Plutarco Malpaisillo” y “Una canción”.