17 de mayo 2022
Los ministros de Defensa de la Unión Europea (UE) dieron este martes su firme apoyo a que sus miembros Finlandia y Suecia pasen a formar parte también de la OTAN, y evaluaron las carencias en su gasto militar para emprender unas inversiones conjuntas que les equipen adecuadamente ante amenazas como la guerra en Ucrania.
“Ha sido un proceso silencioso de desarme que han atravesado los países", indicó el alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, en una rueda de prensa tras un consejo de ministros comunitarios de Defensa, en el que abordaron un informe sobre las carencias en gasto militar de los Veintisiete y que urge a corto plazo a reponer las existencias.
Borrell cifró en 160 000 millones de euros las carencias de inversión militar acumuladas en nueve años, desde 2009 hasta 2018.
Los ministros, que antes de celebrar el consejo participaron en una reunión de la junta directiva de la Agencia Europea de Defensa (EDA), evaluaron el informe preparado por Borrell en conjunción con ese organismo y con la Comisión Europea sobre las faltas en la industria militar europea.
Se espera que el documento sea aprobado mañana por el colegio de comisarios europeos y discutido por los propios jefes de Estado y de Gobierno en su cumbre extraordinaria del 30 y 31 de mayo.
“Hay que gastar más, y más juntos”, recalcó Borrell, en referencia a la necesidad de invertir conjuntamente para evitar duplicaciones de material teniendo en cuenta el nuevo estudio, que apunta a “lo que tenemos y lo que deberíamos tener”.
El político aseguró que a corto plazo será necesario reabastecer las existencias de material militar; a medio plazo, aumentar las capacidades existentes y, a largo plazo, reforzarlas y modernizarlas.
Para el alto representante comunitario, la invasión rusa de Ucrania ha dado la señal de alarma, “dejando claro que tenemos que rellenar esas carencias e incrementar nuestras capacidades de defensa”.
Los ministros también aprobaron hoy la creación del Centro de Innovación en Defensa para reforzar la cooperación entre los Estados miembros y otras partes interesadas en ese ámbito.
Ampliación de la OTAN
Los ministros también abordaron durante su consejo la situación en Ucrania e intercambiaron puntos de vista por videoconferencia con el ministro ucraniano de Defensa, Oleksii Reznikov, y con el vicesecretario general de la OTAN, Mircea Geoana, invitado al encuentro.
Los Estados miembros van a dedicar otros 500 millones de euros de su Fondo Europeo de Apoyo a la Paz para financiar armamento pesado para que Kiev pueda defenderse del invasor ruso, con lo que el monto para ese fin ascenderá a 2000 millones.
Además, durante la reunión, los ministros de Finlandia y Suecia informaron a sus homólogos sobre las deliberaciones para convertirse en miembros de la OTAN y Borrell aseguró que ambos países pueden contar con el "apoyo total" de la Unión Europea.
Añadió que la probable entrada de los dos Estados en la Alianza "incrementará el número de Estados miembros (de la UE) que también son miembros de la OTAN".
"Esto fortalecerá e incrementará la seguridad y cooperación en Europa, así que esperemos que esta membresía venga pronto y, de ese modo, la OTAN y la Unión Europea serán dos conjuntos de Estados miembros con más intersecciones. Es una noticia importante, un cambio geopolítico importante", expuso.
En cualquier caso, consideró que Helsinki y Estocolmo no han enviado un mensaje a "la dirección" del presidente de Rusia, Vladímir Putin.
"He oído decir que el presidente Putin no se siente preocupado por esta decisión" de Suecia y Finlandia de pedir el ingreso en la OTAN, declaró Borrell.
El Tratado de la Unión Europea contiene un artículo según el cual, si un Estado miembro sufre una agresión armada en su territorio, los demás países del club comunitario deberán darle apoyo.
El temor a un hipotético ataque ruso contra Suecia y Finlandia en el periodo que transcurre desde que solicitan la entrada en la OTAN hasta que se convierten en miembros plenos de la Alianza ha puesto el foco sobre la posibilidad de que los Veintisiete tengan que recurrir a esa cláusula de defensa mutua.
Borrell precisó que "si hay una agresión armada contra un Estado miembro de la UE, ese Estado puede pedir a los otros que le ayuden".
"Y los otros están obligados a hacerlo, con todos sus medios, ni más ni menos. Hace falta que el Estado miembro afectado lo pida, pero si lo pide, los otros tienen que ayudarle. No es como para que digan: tengo otra cosa que hacer. Es una obligación del tratado, pero no es automático. Hace falta que el Estado agredido, si eso sucede, esperemos que nunca suceda, lo pida", evidenció.
Sobre Mali, Borrell afirmó que la UE no tiene garantías por parte de las autoridades de transición sobre la no interferencia de mercenarios rusos, pero matizó que los Veintisiete no van a abandonar el Sahel, sino que se reposicionarán los recursos militares en países vecinos de Mali.
Adelantó que en las próximas semanas se presentará una revisión estratégica de la misión en Mali a los Estados miembros.
"Pero no estamos cancelando esta misión", comunicó.