8 de enero 2016
Washington.- La Casa Blanca reiteró que no planea cambios a la Ley de Ajuste Cubano, que beneficia a los isleños que llegan a territorio estadounidense de manera irregular y que, según el Gobierno de La Habana, ha propiciado la actual crisis migratoria en Centroamérica.
"No hay planes en este momento para cambiar esa política", respondió sobre la Ley de Ajuste Cubano el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, al ser preguntado en su rueda de prensa diaria sobre los casi 8.000 cubanos que están varados en Costa Rica desde noviembre.
Earnest dijo que la Casa Blanca está "al tanto" de las informaciones acerca de que un grupo de 180 cubanos será el primero en reanudar desde Costa Rica su viaje hacia EE.UU. el próximo martes, como parte de un plan piloto que las autoridades centroamericanas esperan se convierta en la solución definitiva a la crisis migratoria.
El portavoz aclaró que el Gobierno del presidente Barack Obama no ha participado "en los esfuerzos para facilitar el movimiento o la llegada de inmigrantes cubanos a Estados Unidos".
Desde el pasado 15 de noviembre, cuando Nicaragua cerró su frontera a los cubanos aduciendo riesgos a la seguridad y soberanía, en Costa Rica se han acumulado 7.802 inmigrantes de esa nacionalidad que pretenden llegar a Estados Unidos y que cuentan con pasaporte. Los cubanos iniciaron su periplo legalmente vía aérea desde la isla hacia Ecuador, país que hasta el 1 de diciembre pasado no les exigía visado.
Desde Ecuador se movilizaron irregularmente por Suramérica hasta llegar a Panamá, de donde pasaron a Costa Rica.
El Gobierno cubano considera que esta crisis migratoria es consecuencia de medidas vigentes en EE.UU. como la Ley de Ajuste, la política "pies secos/pies mojados" o el programa Parole para médicos.
Según el Gobierno costarricense, el principal motivo para que se produjera esta oleada migratoria es el temor a que, con el restablecimiento de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, se elimine la Ley de Ajuste Cubano. No obstante, y a pesar de las peticiones de Cuba, el Gobierno de Obama ha reiterado que no planea eliminar esa ley.
[destacado titulo="Sanders pide a Obama detener deportaciones de centroamericanos"]
El senador y candidato presidencial demócrata Bernie Sanders urgió al Gobierno del presidente de EE.UU., Barack Obama, a poner fin a las recientes redadas y deportaciones de familias centroamericanas "que han huido" de la violencia en sus países.
"Las redadas no son la respuesta. No podemos seguir empleando tácticas inhumanas que implican acorralar y deportar a decenas de miles de familias de inmigrantes para hacer frente a una crisis que requiere compasión y soluciones humanas", sostuvo Sanders en una carta dirigida a Obama.
El candidato pidió al presidente que sea "coherente" con el "compromiso histórico" de EE.UU. de "brindar protección a los que huyen de la violencia y la persecución". "Le insto a que ponga fin de inmediato a esas redadas y a no deportar a las familias a países donde les espera una sentencia a muerte", escribió Sanders.
Además, el senador por Vermont afirmó que Obama debe usar su autoridad ejecutiva para conceder a esas familias indocumentadas un Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) similar al que beneficia a miles de inmigrantes de El Salvador, Honduras o Nicaragua.
El Gobierno de Obama informó el pasado lunes de la deportación de 121 inmigrantes indocumentados, en su mayoría centroamericanos, detenidos el pasado fin de semana en una serie de operaciones en los estados de Georgia, Texas y Carolina del Norte.
Organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes explicaron ayer que han logrado paralizar la inminente deportación de al menos cuatro familias centroamericanas.
Según ha explicado el Secretario de Seguridad Nacional de EE.UU., Jeh Johnson, los 121 detenidos el pasado fin de semana son adultos y niños que fueron interceptados después del 1 de mayo de 2014 cuando cruzaban la frontera con México de manera ilegal.
En el año fiscal 2015, que concluyó el 30 de septiembre pasado, el número de detenciones de la patrulla fronteriza disminuyó hasta 331.333 en la frontera con México, el menor número registrado desde 1972 con la excepción de un año, según los datos divulgados por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). No obstante, las detenciones de menores no acompañados en la frontera aumentaron en octubre y noviembre pasado a más del doble de las registradas en los mismos meses de 2014.
Esta campaña de redadas y deportaciones ha generado fuertes críticas al Gobierno de Obama, tanto por parte de activistas como de políticos y legisladores demócratas.
El exgobernador Martin O'Malley, rival de Sanders en la contienda por la candidatura demócrata a la Casa Blanca, también ha criticado duramente las redadas y ha pedido a Obama "reconsiderar" su política migratoria.
La favorita en las encuestas para lograr la candidatura presidencial demócrata, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, también ha expresado su "preocupación" por estas deportaciones, pero solo a través de portavoces y en un tono menos beligerante que sus rivales.
En un comunicado divulgado hoy, Carlos Vargas, de la coalición proinmigrante Dream Action expresó su decepción con Clinton, al considerar que se está manteniendo "al margen" en este asunto. Activistas y defensores de los inmigrantes prevén concentrarse este viernes frente a la Casa Blanca para urgir a Obama a que ponga fin a las redadas y deportaciones de familias centroamericanas.[/destacado]