10 de abril 2017
El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Ecuador notificará hoy lunes a los movimientos Alianza País (AP) y Creando Oportunidades (CREO), participantes en el balotaje del antepasado domingo, los resultados de las presidenciales para designar al sucesor de Rafael Correa, que ocupa el poder desde 2007. Tras esta publicación, los partidos podrán "objetar, impugnar y apelar" a los resultados, que muestran como ganador al oficialista Lenin Moreno, con el 51.15% de los votos, y al opositor Guillermo Lasso con el 48.85%.
El politólogo e investigador de Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), Simón Pachano, considera que difícilmente las impugnaciones revertirán los resultados favorables al oficialismo, a pesar de que las elecciones han estado marcadas por la ilegitimidad y a cargo de una autoridad electoral plegada al oficialismo.
Pachano conversó en entrevista con el periodista Carlos Fernando Chamorro, en el programa de televisión Esta Noche, sobre los resultados de las recientes elecciones ecuatorianas, el país que hereda Rafael Correa tras diez años en la presidencia y los retos y escenarios, nada sencillos, para el próximo gobierno.
“Estamos ante un hecho consumado. Me parece que es muy poco probable que se llegue a impugnar la cantidad de votos que separan a las dos candidaturas según el Consejo Nacional Electoral”, afirma Pachano.
Según el politólogo, hay "algunas evidencias" de irregularidades,como actas "inconsistentes" o cambios en los porcentajes de los candidatos, "pero no en la magnitud que serían necesarias para revertir el resultado".
Sin embargo, el principal obstáculo para una revisión de los resultados es la parcialidad de la autoridad electoral con el oficialismo.
Pachano admite que la contienda electoral ecuatoriana era muy reñida, tal como mostraron las encuestas y la primera vuelta, pero estima que en la impugnación de los resultados el principal problema es que "el Consejo Nacional Electoral no infunde confianza".
Como muestra, Pachano cita que la autoridad electoral ha impedido que se establezcan mecanismos de consulta popular por organizaciones sociales o fuerzas de oposición y, en cambio, ha priorizado las iniciativas que venían del gobierno.
"Además --sostiene--, está integrado por personas que en su totalidad vienen del gobierno y que incluso algunos ellos vuelven (al gobierno) después de cumplir sus funciones. Hay una especie de puerta giratoria entre el gobierno y el Consejo Electoral, lo que genera desconfianza, por supuesto, en el resto de actores sociales y políticos. Ahí está el problema de esta elección: la falta de confianza en el organismo electoral”.
La herencia de Correa: un país polarizado y endeudado
Pachano además estima que un obstáculo mayor es que "Ecuador está divido en dos mitades", pero asegura que esa división "no es tanto un apoyo a Lenín Moreno, por un lado, o a Guillermo Lasso, por otro; sino entre correísmo y anticorreísmo", que obedece --explica-- " a este fenómeno que conocemos muy bien en América Latina que es el caudillismo. Un caudillo que divide en dos al país".
El politólogo también prevé que las protestas recientes en ciudades como Quito o Guayaquil van a dejar como un secuela muy importante un "gobierno más débil y evidentemente con menos legitimidad", porque nace bajo la sospecha de fraude, "que aunque no fuera cierta --dice-- es una sospecha que le quita mucha legitimidad".
Además, Pachano duda que Correa se coloque al margen de la política ecuatoriana. "Él va a seguir presente de alguna manera. Él va a seguir incidiendo y ahí está la incógnita. Si va a influir en Moreno o se va a volver oposición".
En este escenario, también está por verse el efecto que tendrá en los funcionarios salientes la investigación del escándalo del conglomerado brasileño Odebrecht, que salpica a casi toda América Latina, y según Pachano puede que toque a personas "muy altas" del movimiento Alianza País, afectando fuertemente al oficialismo.
¿Qué camino tomará Moreno?
La figura de Rafael Correa fue clave para la victoria de Moreno e incluso las elecciones pueden considerarse un triunfo del caudillo ecuatoriano, dice Pachano. Sin embargo, el politólogo asegura que aún está por verse si Moreno se va a mantener dentro de la línea establecida por el presidente saliente o tomará su propio rumbo, que lo llevaría a entrar en contradicciones como ocurrió en Colombia con el caso del expresidente Álvaro Uribe y su sucesor, Juan Manuel Santos. "Es una incógnita que se esta discutiendo", confirma Pachano, aunque él cree que la eventual ruptura, si ocurre, no sería a corto, sino a mediano plazo.
Según Pachano, el legado de Correa en Ecuador "es relativamente positivo", porque ha habido una importante inversión en salud y educación, por ejemplo, pero advierte que "económicamente el país está mal", como consecuencia del modelo económico que Correa basó en la renta petrolera, "es decir, en un modelo rentista, que permitía tener un alto gasto público, como educación, salud e infraestructura, pero también un alto gasto en burocracia, lo que significó que cuando cayó (el precio del petróleo) empezó a presentar problemas que el gobierno a enfrentado con deudas", explica.
El politólogo e investigador de FLACSO detalla que en el último año y medio, principalmente los seis meses recientes, Ecuador ha registrado un "endeudamiento sistemático", que se estima en mil millones de dólares por mes.
A su juicio, "esto significa que (Correa) deja al nuevo gobierno con una deuda enorme, muy pesada, que ha sido contraída con China, que prácticamente quintuplica los intereses de la banca internacional o de los organismos multilaterales".
En ese sentido, Pachano considera que Moreno tendrá las manos atadas por dos razones. La primera, que tendrá muy poca apertura a los organismos multilaterales, que le permitirían abrir las puertas de la banca internacional para lograr un financiamiento más adecuado; la segunda, son las "líneas rojas" que le deja marcadas Rafael Correa, respeto a las "líneas económicas".
"Si Lenín Moreno llega a tomar una decisión como esta que acabo de señalar, de dialogar con los organismos multilaterales, estaría rompiendo principios básicos y prácticamente un dogma de vida de Rafael Correa, por tanto el va a tener serios problemas en la conducción económica", alerta Pachano.