26 de marzo 2022
El nicaragüense Edgar José Centeno Palacios, de 26 años, originario de Condega, Estelí, murió el pasado 5 de marzo cuando intentaba cruzar el río Bravo, fronterizo entre Estados Unidos y México, en su intento por llegar a territorio estadounidense.
La incertidumbre política y económica que se vive en Nicaragua empujó al joven ingeniero agropecuario a emigrar, como los casi 25 000 nicaragüenses que han sido detectados en la frontera entre Estados Unidos y México, desde enero de 2022.
“Yo no quería que se fuera, pero él buscaba un mejor futuro”, contó a CONFIDENCIAL Ivannia Rodríguez, su esposa, quien relató las últimas conversaciones que tuvieron. “El 5 de marzo en la noche me dice que el ‘coyote’ o ‘pollero’ —como le dicen en México— quiere cruzarlos y ese día el río estaba crecido”. Fue en ese momento que perdió comunicación con él, dijo la ahora viuda.
Junto con él viajaba Neyling Rizo Gutiérrez, quien también murió esa noche y fue el primer cuerpo encontrado por las autoridades estadounidenses. “Ellos salieron en el mismo bus desde Estelí, ella es esposa de un primo mío. Cuando nos dimos cuenta de su muerte, nos preocupamos de inmediato por Edgar, ya que el contacto de los ‘coyotes’ de acá nos habían mentido diciendo que cruzaron bien desde ese mismo día”, indicó Rodríguez.
En cuanto la familia de Rizo identificó el cuerpo de la joven, Rodríguez comenzó a indagar sobre el paradero de Centeno con amistades en México y Estados Unidos, comenzó a darle seguimiento a las noticias en busca de alguna pista que le ayudara a saber de su esposo.
Fue hasta el 15 de marzo que hallaron el cuerpo de Centeno a orillas del Río Bravo, del lado estadounidense, y hasta el 23 de este mes fue identificado por una amiga de Rodríguez. “Además de tener rasgos físicos que lo caracterizaban, tenían su cédula de identidad”, contó.
El cuerpo de Centeno espera ser repatriado en Central Texas Autopsy PLLC, una morgue ubicada en Lockhart, Texas. “Estamos en busca de una funeraria que pueda ayudarnos con todo el proceso de repatriación, recogerlo en la morgue, prepararlo, hacerse cargo de la documentación pertinente para que venga sin inconvenientes hasta acá”, dijo Rodríguez, quien pide apoyo económico para los trámites de repatriación que suelen ser muy costosos. Las cuentas a disposición de quienes deseen apoyarla son 362040131, en dólares; y 364797803, en córdobas, ambas del BAC, a nombre de Ivannia María Rodríguez Toruño.
Basta un rápido monitoreo de medios de comunicación nicaragüenses y mexicanos, y de páginas en redes sociales, para encontrar que al menos ocho nicaragüenses han perecido tratando de cruzar el Río Bravo en su afán por llegar a Estados Unidos, entre ellas una persona menor de edad, de cuatro años.