11 de noviembre 2022
Estados Unidos extendió por 18 meses el Estatus de Protección Temporal (TPS) para los migrantes de seis países, incluidos ciudadanos de Nicaragua, El Salvador y Honduras. Unos 4250 nicaragüenses en EE. UU. tienen TPS y su permanencia en ese país dependía de esta decisión.
La medida, con la que se benefician más de 260 000 migrantes, fue anunciada la noche de este jueves 11 de noviembre por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés).
Las personas de El Salvador, Honduras, Nicaragua, Haití, Nepal y Sudán que tienen TPS podrán renovar el beneficio migratorio, que les permite trabajar y vivir legalmente en EE. UU. hasta junio de 2024, informó DHS.
El anuncio llega a menos de un mes de que se venciera el permiso para las personas de estas seis nacionalidades el próximo 31 de diciembre.
Los “tepesianos”, como se les conoce a los amparados por este beneficio, están envueltos en una disputa legal, desde que el Gobierno del expresidente Donald Trump (2017-2021) revocara la protección para los migrantes de estos seis países.
La semana pasada, las conversaciones de conciliación entre la Administración del Gobierno actual y los abogados que representan a un grupo de amparados por el TPS colapsaron oficialmente, dejando en el limbo los cientos de miles de migrantes.
Una corte federal en California falló en 2018 a favor de los inmigrantes, tras dictaminar que el expresidente Trump puso fin al TPS de esos seis países de manera ilegal y tuvo motivaciones racistas.
Sin embargo, en septiembre de 2020, un panel de tres jueces del Noveno Circuito de Apelaciones revocó la orden del tribunal inferior y colocó en riesgo nuevamente a los amparados por el TPS de esos seis países.
El TPS es un beneficio migratorio temporal que les da un estatus a las personas provenientes de países que atraviesan situaciones de emergencia como desastres naturales o guerras.
Actualmente, EE. UU. da TPS a nacionales de 15 países del mundo, entre ellos Etiopía, Afganistán y Ucrania, los últimos en ser anunciados este año. Unas 400 000 personas se benefician de estos programas a nivel nacional.
18 meses de tranquilidad y, luego, otra vez en el limbo
Si bien se trata de una buena noticia para los nicaragüenses “tepesianos” el que se haya extendido su estadía legal en el país, no es una solución definitiva que les permita adquirir, finalmente, un estatus migratorio regular permanente. “El problema es que no hay camino a la residencia”, dice Carolina Sediles, voluntaria en la Alianza Nicaragüense Americana para Derechos Humanos (Nahra, por sus siglas en inglés) y una de las beneficiarias del TPS.
Sediles describe lo que pasará una vez llegue junio de 2024: nuevamente habrá discusiones sobre si renovar o no el TPS e inclusive, una vez más, habrá que ir a las cortes para que valoren el asunto. El tema, además, volverá al debate público en medio de las campañas electorales presidenciales de ese año, lo cual provocará mayores tensiones, ya que en Estados Unidos todas las cuestiones migratorias suscitan polarización entre republicanos y demócratas. "Lamentablemente los 'tepesianos' somos fichas de los partidos políticos para el tiempo de elecciones y estamos en manos de esta gente porque nadie toma una decisión permanente porque la otra parte nunca lo acepta, y para hacerlo habría que incluirlo en una reforma migratoria, entonces es un tema complicado", dice la voluntaria.
"Sí es una buena noticia, aunque los 'tepesianos' y los beneficiarios de DACA siempre estamos esperando una solución más permanente, en este momento en que estábamos en 'el hilo' que se dé la extensión da cierto alivio, en el sentido de que vamos a poder a largo plazo buscar otras opciones, en caso de que se termine cancelando el TPS", explica Sediles.
"Es importante aclarar que esta no es una nueva designación de TPS. He visto noticias que dicen que se están ampliando un TPS, lo cual es erróneo No se está ampliando nada. Esta decisión solo afecta a los 4250 'tepesianos' nicaragüenses y de otros países. Las personas que no tienen un estatus legal en este momento no califican dentro de esta extensión de estadía", añade la nicaragüense.
La lucha de NAHRA y otras organizaciones que trabajan en favor de los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos es lograr la residencia permanente para los nicas que tienen más de dos décadas de vivir en ese país y que se diseñe un TPS más amplio para los nicaragüenses que entraron a después de 2018 debido a la crisis sociopolítica en Nicaragua ocasionada por la represión estatal.