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Acevedo: necesitamos un debate nacional sobre pobreza

Economista recomienda crear más y mejores empleos, o en la próxima encuesta, el número de ‘pobres’ se acercará al cero

Ortega

Iván Olivares

8 de octubre 2015

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El economista Adolfo Acevedo advirtió que aunque "tecnicamente", de acuerdo a la encuesta del INIDE la pobreza disminuyó entre el 2009 y el 2014, si queremos que se produzca una reducción efectiva, lo que hay que hacer es crear más y mejores empleos. De lo contrario, la próxima encuesta podría reportar cero ‘pobres’.

“Si queremos ver una reducción genuina de la pobreza, lo primero que se necesita es una discusión nacional en la que se defina qué es la pobreza, y cuál es la línea que determina qué es una vida digna”, aseguró al ser entrevistado para el segmento ‘Cuentas Claras’, del programa de televisión ‘Esta Noche’, que se transmite por canal 12.

“Para lograr una reducción significativa y estructural de la pobreza, se requiere que las familias tengan condiciones de vida digna, en especial, que tengan acceso a empleos de alta productividad, alta calidad, y alta remuneración”, señala recordando que el aspecto laboral es clave para explicar que la pobreza general se redujera de 42,5% a 29.6% en cinco años.

“Si no se cumplen esos requisitos, lo más probable es que la pobreza extrema se reduzca a 1% o incluso 0.8% en la próxima Encuesta de Medición de Nivel de Vida (EMNV), sin que eso signifique que la gente ha dejado de ser realmente pobre”, sentenció el experto.


La explicación a ese aparente contrasentido es el ‘tecnicismo’ al que se refería al inicio. Según las definiciones de la EMNV 2014, una persona se considera en estado de pobreza, si su consumo anual es de C$17,000 (o sea, C$46.58 o US$1.81 por día). De igual manera, se cataloga en situación de pobreza extrema, a aquellos individuos cuyo consumo anual es de C$10,500 anuales o C$28.7 por día, equivalentes a US$1.11.

Se supone que ese promedio debería permitir a las personas adquirir alimentos para suplir una necesidad de 2,282 calorías por día, más un cierto monto para cubrir gastos mínimos de otros bienes y servicios, tales como vivienda, transporte, educación, salud, vestuario y otros de uso cotidiano en el hogar.

Es fácil dejar de ser ‘pobre’

Esa definición permite que, con sólo que un individuo pueda mejorar su consumo diario en US$0.10 por día (C$2.75 diario o sea, C$82.5 al mes o C$1,003 al año), técnicamente, deba dejar de considerársele como pobre o pobre extremo, según sea el caso.

Y es fácil que eso ocurra.

Según las explicaciones de Acevedo, basado en los supuestos que explicó Carlos Sobrado, Especialista en Pobreza por el Banco Mundial, es fácil que el consumo per cápita crezca en “diez, veinte, treinta o hasta cuarenta centavos por persona al día”, tan solo con el crecimiento vegetativo del consumo, o sea, porque hay más gente que creció, salió a buscar trabajo, y alguno de ellos lo encontró.

O porque hay más remesas, o porque los niños de las familias pobres reciben un alimento en la escuela, lo que se contabiliza como ‘consumo’. Dicho de otro modo: ese niño desayunó o almorzó, pero eso no cambió en nada las condiciones de pobreza en que vive su familia.

En otro ejemplo, Acevedo imaginó una familia de tres personas: padre, madre e hijo que tienen un ingreso de US$200 mensuales (unos C$5,500), lo que les permitiría darse el ‘lujo’ de consumir US$2.22 por día. “Ellos no serían pobres según esta línea de pobreza, aunque ellos se sientan pobres, y la gente a su alrededor piense que son pobres”, explicó.

El fenómeno tiene mayor incidencia en el campo, donde los niveles de pobreza sobrepasan el 50.1%, en razón de que la agricultura -que genera el 32% de la fuerza laboral del país- genera empleos de bajísima productividad y bajos sueldos.

Siendo que en el caso de las personas con menores ingresos, el salario es el que determina cuán pobres serán, el hecho que la labor agrícola sea tan escasamente remunerada explica que haya tantos pobres en las zonas rurales.
Acevedo opina que haría falta un programa que llevara más financiamiento (y asistencia técnica) a las unidades productivas en el campo, además de elevar la inversión en infraestructura en las zonas rurales, especialmente en la construcción de redes eléctricas y carreteras.


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Iván Olivares

Iván Olivares

Periodista nicaragüense, exiliado en Costa Rica. Durante más de veinte años se ha desempeñado en CONFIDENCIAL como periodista de Economía. Antes trabajó en el semanario La Crónica, el diario La Prensa y El Nuevo Diario. Además, ha publicado en el Diario de Hoy, de El Salvador. Ha ganado en dos ocasiones el Premio a la Excelencia en Periodismo Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, en Nicaragua.

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