PUBLICIDAD 1M
PUBLICIDAD 4D
PUBLICIDAD 5D
"Quieren aislar a Nicaragua, pero la Iglesia Católica no tiene fronteras", asegura en esta entrevista el obispo hondureño, José Antonio Canales.
El prelado, quien ejerce como Secretario del Episcopado de Centroamérica, se refiera en este video al destierro en secreto del obispo de Jinotega, Carlos Enrique Herrera, y a la pretensión de la dictadura nicaragüense de censurar a la Iglesia y aislarla de su relación con la Santa Sede.
Una semana después de desterrar en secreto al obispo de Jinotega, Carlos Enrique Herrera, la dictadura de Daniel Ortega aprobó en primera legislatura una reforma total a la Constitución Política de Nicaragua, que entre el centenar de artículos modificados y derogados, uno de ellos eleva a rango constitucional la persecución religiosa que ya ejercía por la vía de los hechos.
El nuevo texto constitucional en su artículo 14, advierte que: "Las organizaciones religiosas deben mantenerse libres de todo control extranjero". Es una amenaza clara contra la Iglesia católica, cuya naturaleza como institución y expresión de fe, obedecen a la jerarquía basada en El Vaticano.
Para el obispo hondureño, José Antonio Canales, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo pretende aislar a Nicaragua y a sus feligreses, pero "la Iglesia no tiene fronteras". "No se concibe una Iglesia aislada. Es muy difícil que los nicaragüenses olviden al Papa", valora.
Canales es una de las pocas voces de la Iglesia católica en América Latina que denuncia públicamente la represión en Nicaragua. Es secretario del Episcopado de Centroamérica.
PUBLICIDAD 3M
PUBLICIDAD 3D