PUBLICIDAD 1M
PUBLICIDAD 4D
PUBLICIDAD 5D
Dulce María Porras y Javier Álvarez, desde el exilio, reiteraron la demanda de liberación de sus parientes que se hallan en las cárceles del régimen
El nuevo modus operandi de la dictadura en Nicaragua, que atrapa a los familiares de los ciudadanos críticos cuando no puede capturarles a ellos, es “una crueldad” y “un nivel nuevo de barbarie”, opinan Dulce María Porras y Javier Álvarez, dos nicaragüenses que, desde el exilio, reiteraron la demanda de liberación de sus parientes que se hallan en las cárceles del régimen como rehenes.
El 13 de septiembre pasado, la Policía detuvo arbitrariamente a la esposa, la hija y el yerno de Álvarez, de nombres Jeannine Horvilleur, Ana Carolina Álvarez y Félix Roiz. Tanto Jeannine como Ana Carolina son nicaragüenses francesas. Dos días después, el 15, también fue arrestado Freddy Porras, hermano de Dulce Porras. Ninguno de los ahora prisioneros tenía incidencia ni participación política. Su “delito” fue ser familiares de Álvarez y de Porras.
También podés leer la versión en texto de esta entrevista ▶️ https://bit.ly/3ESJa1j
Te invitamos a seguir nuestra cobertura completa en confidencial.digital ⏯
Los nicaragüenses merecen información confiable y de calidad. Apoyá nuestra misión. Unite a nuestro Programa de Membresía 📺 https://bit.ly/MembresiaConfidencial #presospolíticos #nicaragua #iglesiacatólica
Archivado como:
PUBLICIDAD 3M
PUBLICIDAD 3D