19 de marzo 2024
El Ministerio de Salud (Minsa) impuso una condición draconiana a los médicos generales que deseen estudiar una especialidad: diez años de trabajo en el Estado o el reembolso de 61 706 dólares, equivalentes a unos 2.2 millones de córdobas, según una reciente disposición de la institución sanitaria.
La nueva cláusula fue integrada al contrato que firmaron unos 213 médicos generales que clasificaron para la residencia de “especialidad médica quirúrgica 2024-2028”, promovida por el Minsa y la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN).
Esta es la primera vez que el Minsa incluye esta cláusula para las especialidades, afirmaron varios médicos de hospitales públicos y privados consultados por CONFIDENCIAL.
Los sanitarios subrayan que la medida es un intento del Minsa por “mantener a los médicos en el país” ante la “masiva fuga de cerebros”, originada por la crisis sociopolítica que atraviesa Nicaragua. A su vez, obligará a los nuevos especialistas a “estar bajo su disposición”.
En el documento se establece que el médico deberá pagar un monto de 61 706 dólares, al cambio actual, en caso de cuatro causales:
- Abandonar sus estudios sin causa justificada.
- Incumplir las cláusulas del contrato y el reglamento disciplinario de especialidades.
- Renuncia inmediata en el establecimiento de salud donde realiza sus estudios de salud.
- Y en caso de negarse, abandonar o renunciar a trabajar en el establecimiento de salud donde fue ubicado.
Minsa decidirá el futuro de los médicos
Una vez acabada la especialidad, los médicos no podrán decidir en qué unidad médica laborar ni en qué parte del país, ya que el Minsa los enviará a donde considere conveniente “de acuerdo con las necesidades” de la institución.
“Esta será una situación bastante compleja para los muchachos, ya que si dejan la residencia tendrán que pagar una cantidad exorbitante de plata, que no se corresponde con los salarios que tenemos”, resalta un sanitario del sector privado.
“Algunas instituciones privadas hacían este tipo de práctica. Si te daban alguna beca, como retribución, tenías que trabajar unos años, pero generalmente eran cuatro o cinco años, y después quedás libre. Es algo que están copiando de estas instituciones privadas”, opina el médico privado.
Programa de especialidad es considerado una “beca”
El Minsa distribuyó los 213 cupos en 18 especialidades: anestesiología, cirugía general, cirugía maxilofacial, cirugía pediátrica, dermatología, fisiatría, gineco obstetricia, medicina interna, neurocirugía, oftalmología, ortopedia y traumatología, otorrinolaringología, patología, pediatría, radiología, psiquiatría, radio oncología y urología.
De estos 213 cupos, 107 serán entregados a los médicos que opten directamente a través del Minsa; 70 a través de la UNAN-Managua; y 36 de la UNAN-León.
Los seleccionados pagaron una prematrícula de 1500 córdobas, en caso de ser egresado de una universidad pública; 3000 córdobas los graduados en una entidad privada; 4000 los médicos nicaragüenses que estudiaron fuera del país; y 4500 córdobas los doctores extranjeros.
El programa es promovido por el Minsa como una “beca de estipendio”, ya que incluye un salario a los médicos residentes.
“Las condiciones son descabelladas porque durante los años de formación se trabaja en los hospitales escuela a niveles que no se diferencian de la esclavitud. El salario (beca según el MINSA) está de sobra ganado”, destaca un sanitario.
“Esto —añade— solo agudizará más la crisis. El próximo año los médicos que quieren especializarse tendrán una razón más para hacerlo fuera de Nicaragua, y lo que queden serán los menos capaces”.
Otro médico de una unidad de salud pública lamentó la medida y agregó “solo falta que digan que se trabajará gratis para ser especialista, como en Cuba”.
Minsa utiliza a médicos para proselitismo
El Minsa se ha convertido en una institución fiel a Daniel Ortega y Rosario Murillo. Los médicos son obligado a hacer proselitismo político en los servicios de salud.
Durante las pasadas elecciones regionales del 04 de marzo, el observatorio ciudadano Urnas Abiertas denunció que hubo movilizaciones de estudiantes y residentes de Medicina de las universidades UNAN-Managua y UNAN-León.
“A estos los han amenazado de no continuar con sus carreras, con la cancelación de becas o de perder la residencia”, denunció el organismo.
Desde 2018, el Minsa ha ejecutado barridas de sanitarios que cuestionan a la dictadura Ortega-Murillo. En 2023, se conoció que hay unos 686 médicos a los cuales este ministerio les debe su indemnización.
Este grupo está conformado por médicos despedidos por protestar en 2018, expresar sus opiniones científicas o señalar la mala gestión del Minsa a la crisis sanitaria derivada de la pandemia de la covid-19.