PUBLICIDAD 1M
PUBLICIDAD 4D
PUBLICIDAD 5D
El dolor lo empujó a encontrarse con el arte sacro. Actualmente cursa un programa en Arte Sacro y Policromía, becado en España.
En el intrincado lienzo de la vida de José Ricardo González cada trazo cuenta su historia de dedicación y superación. Al artista de 24 años, originario de Carazo, le llaman “el muchacho de las manos prodigiosas”, por su talento expresado en unas 200 pinturas, y actualmente cursa un programa en Arte Sacro y Policromía, becado en España.
El dolor lo empujó a encontrarse con el arte sacro. Cuando tenía seis años, su padre falleció por un derrame cerebral. Cinco años después, su madre murió en un accidente de tránsito. “Algunos consideraron la muerte de mis padres como una desgracia; yo lo percibo como una gracia, pues este acontecimiento fortaleció nuestra fe, y me condujo hacia la evangelización a través del arte”, asegura en esta entrevista.
PUBLICIDAD 3M
PUBLICIDAD 3D