14 de septiembre 2023
AA
Share
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo concedió diez días de vacaciones a los trabajadores del Estado, en ocasión de las fiestas patrias: del 9 al 18 de septiembre. Sin embargo, varios empleados públicos denunciaron a CONFIDENCIAL que los obligaron a usar “días libres” para participar en actividades proselitistas.
Ernesto es trabajador del Ministerio Agropecuario (MAG) y tuvo que ir muy temprano el domingo 10 de septiembre a la Hacienda San Jacinto para colocar ofrendas florales “supuestamente en honor a los héroes que defendieron la patria, pero la realidad es que es para ensalzar la figura de Ortega y Murillo”.
El acto se realizó a las nueve de la mañana por lo que Ernesto tuvo que madrugar. “Fue un acto político proselitista al que nos obligan a venir, para hacernos fotos y videos que después publican en redes y en los medios oficialistas”, comenta.
Ese mismo día los medios de propaganda del régimen Ortega-Murillo publicaban que los servidores públicos del MAG colocaron una ofrenda floral al pie del monumento del general José Dolores Estrada, “quién encabezó la batalla contra 300 filibusteros que dirigía el norteamericano Byron Cole”. La noticia fue acompañada de imágenes de trabajadores cargando flores, la bandera de Nicaragua y la bandera partidaria del Frente Sandinista.
La viceministra del MAG, Ivania León Rivas, declaraba que los trabajadores de la institución llegaron para conmemorar las fiestas patrias. “Esos héroes ofrendaron sus vidas y riesgos para que nosotros ahora estemos gozando de esa paz, diariamente hacemos patria”, declaró.
Para Ernesto, esta es “una más de las mentiras del régimen” porque “siempre hacen actividades obligatorias”. A unos les exigen visitar la Hacienda San Jacinto y a otros los fuerzan a “participar en desfiles, ferias o cualquier invento patrio, cuyo único fin es promover al partido sandinista”.
“En todo lo que hacen van metiendo la bandera rojinegra porque más que celebrar la patria lo que quieren hacer es seguir promoviéndose ellos como los únicos héroes de Nicaragua”, lamenta.
La bandera rojinegra a la par de la azul y blanco
El inicio de las fiestas patrias sorprendió a muchos nicaragüenses. Por primera vez, desde las protestas de 2018, el decorado del acto oficial incluía decenas de banderas azul y blanco, sin la bandera partidaria.
Varias calles principales y monumentos de ciudades de todo el país mostraban las banderas de la patria. Incluso la ministra de Educación, Lílliam Herrera Moreno, exhortó a la población a “enarbolar” la bandera nacional en “todas las casas”.
“En todas las casas debemos enarbolar la bandera blanca y azul de Nicaragua”, dijo la ministra orteguista, durante el lanzamiento de actividades en conmemoración del 202 aniversario de la firma del acta de independencia de Centroamérica de la corona española y el 167 aniversario de la Batalla de San Jacinto.
De acuerdo con las declaraciones de la funcionaria, en ese acto realizado el 12 de agosto, la idea es embanderar “todos nuestros ambientes educativos, así como plazas y parques”.
Sin embargo, el 30 de agosto durante su intervención del mediodía en medios oficialistas, Rosario Murillo, anunció que el mes de septiembre también sería el mes “rojinegro”.
“Este pueblo nuestro de amor intenso, amor a Nicaragua y es lo que vamos a estar celebrando en septiembre victorioso, en el mes del azul y blanco y el rojinegro liberadores, mes de la patria, mes de nuestros héroes nacionales y mártires que amaron a Nicaragua hasta las últimas consecuencias”, manifestó Murillo.
Vacaciones, pero en alerta
Rodolfo trabaja para el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) y aunque admite está de vacaciones dice que le advirtieron “que debe estar alerta a cualquier llamado”.
“Nos han hecho participar en actividades patrias porque quieren promover esa imagen de festividad, nos mandaron de vacaciones porque quieren que haya turismo por todo el país, pero la orden es estar alerta ante cualquier acto de protesta”, detalla.
Además, dice conocer que hubo algunos trabajadores que fueron “seleccionados” para participar en labores de vigilancia “en los desfiles patrios, en las calles y en las iglesias”.
“Siempre en temporada de fiestas patrias existe el temor de que haya algún tipo de protesta y por eso siempre nos mandan a vigilar y estar atentos ante cualquier llamado porque la paranoia es algo que reina dentro del Gobierno”, apunta Rodolfo.
Por eso también han organizado “caminatas patrias” pero cuyo verdadero objetivo es “hacer presencia en las calles e intimidar cualquier tipo de protesta”, señala Gladys, trabajadora del Poder Judicial.
“Cualquier pretexto es utilizado para hacer proselitismo político, porque es como se maneja el Gobierno siempre, ni siquiera el mes de la patria puede quedar de lado sin promover lo partidario”, dice.
Otro trabajador que ha participado en actividades partidarias es Sergio, quien cree que las fiestas patrias son vistas como una “oportunidad” para el régimen porque aprovechan utilizar la imagen de los héroes nacionales “para destacar su discurso antiimperialista”.
“Ortega y Murillo son endiosados en pancartas a la par de héroes nacionales porque quieren hacer ver que ellos también son héroes que siguen defendiendo al país de una intervención y su discurso del intento de golpe de Estado de 2018”, afirma. Pero Sergio cree que “eso nadie se lo cree aunque ellos hagan el esfuerzo de venderse como defensores de la patria son los que la traicionan día a día”.
