29 de agosto 2023
El Proceso de Concertación Democrática Monteverde enfatizó este martes que incrementarán sus acciones de incidencia internacional, con el fin de mantener en la agenda de la comunidad internacional los crímenes cometidos por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo y buscar mecanismos para castigarlos.
En una declaración leída por Carmen Chamorro, el grupo informó que han sostenido "alentadoras reuniones con otras plataformas prodemocracia" de Nicaragua y que "hay una alta disponibilidad para trabajar juntos en función de acciones estratégicas".
Entre esas acciones estratégicas está la postulación del obispo de Matagalpa y actual preso político, monseñor Rolando Álvarez, al premio Nobel de la Paz; y la ampliación de las sanciones hacia "sectores que están ayudando a la dictadura para conseguir recursos materiales que luego son utilizados para reprimir", precisó el expreso político y vocero de Monteverde, Juan Sebastián Chamorro.
En esa misma línea, Carmen Chamorro, que también es vocera de Monteverde, dijo que el grupo intenta fortalecer sus relaciones con los Gobiernos de Latinoamérica, principalmente con países centroamericanos, para que conozcan las consecuencias de la dictadura nicaragüense y el daño que puede hacer a la región.
Señalaron que entre sus prioridades está "llevar un mensaje común a todos los espacios y mantener en la agenda internacional el tema de la grave situación de Nicaragua, que no sólo afecta a los nicaragüenses sino a toda la región".
Descartan diálogo con el régimen
Al ser consultados sobre la posibilidad de un diálogo con el régimen, Juan Sebastián Chamorro enfatizó que "eso ni siquiera es posible", debido a que la dictadura se ha cerrado a todas las opciones de negociación y, además, se ha aislado totalmente de la comunidad internacional.
En Monteverde “ni siquiera se discute el tema de abrir canales de comunicación con el régimen, sino todo lo contrario, denunciar los crímenes que están cometiendo”, expresó el exreo político.
"Tiempos de grandes desafíos y resistencia"
El grupo también destacó que Nicaragua enfrenta "tiempos de grandes desafíos y resistencia" bajo la dictadura Ortega-Murillo, debido a que esta "continúa su radicalización y persiste en hundir al país en el oscurantismo con su fuerza represiva, coartando derechos ciudadanos fundamentales como la libertad de pensamiento, libertad de expresión, asociación y las libertades religiosas".
En el pronunciamiento también acusó a Ortega-Murillo de cercenar "las oportunidades de bienestar y desarrollo para las familias nicaragüenses", debido a que "su propósito es sostenerse en el poder a través de un sistema totalitario y alimentar el clientelismo político con favores económicos para unos pocos sobre la base de arbitrarias confiscaciones".
En ese sentido, Monteverde mencionó el "robo" de la jesuita Universidad Centroamericana (UCA) —considerada uno de los últimos bastiones de libertad de pensamiento en Nicaragua—, el cierre de otras 26 instituciones de educación superior, así como la cancelación de la personalidad jurídica de la Compañía de Jesús, "como parte de la permanente persecución a la Iglesia".
La disolución y expropiación de 27 universidades y la liquidación de la Compañía de Jesús "representan una violación directa a la libertad de pensamiento, expresión y el derecho a la educación que ha afectado a más de 40 000 estudiantes", agregó.
A juicio de la iniciativa Monteverde, "estas acciones intentan silenciar las voces críticas, el pensamiento crítico, limitar la formación académica y los espacios libres de socialización de los jóvenes, que son esenciales para el desarrollo económico y social del país, incluyendo el desarrollo institucional y democrático de la sociedad".