6 de julio 2023
La Corte de Constitucionalidad de Guatemala suspendió la oficialización de los resultados de las elecciones generales del pasado 25 de junio en el país y ordenó al Tribunal Supremo Electoral realizar un recuento de los votos, luego de que nueve partidos políticos solicitaron esclarecer supuestas irregularidades en el proceso, entre ellos el partido de la ex primera dama Sandra Torres, quien aguarda para disputar la segunda vuelta junto con el candidato de oposición, Bernardo Arévalo, del Movimiento Semilla.
La decisión de la Sala fue fuertemente criticada por la oposición política, la comunidad internacional, y por distintos sectores de la sociedad guatemalteca, quienes han calificado de “ilegal” la medida de la Corte e hicieron un llamado a respetar los resultados de la primera vuelta.
“Lo que estamos viendo es que los partidos políticos afines al oficialismo que no pasaron a la segunda vuelta se están aliando para manipular las elecciones”, expresó Samuel Pérez Álvarez, diputado del Movimiento Semilla, en entrevista con el programa Esta Noche.
El pasado martes el Tribunal Supremo Electoral de Guatemala inició el proceso de revisión de las actas electorales, en medio de denuncias de intervencionismo por parte del partido de Gobierno.
La Corte de Constitucionalidad de Guatemala ordenó al Tribunal Supremo Electoral suspender la oficialización de los resultados de la primera vuelta de las elecciones generales en el país. ¿Cuáles son las razones y los argumentos que sostiene?
Las razones es que todos los candidatos que apoyan este régimen de corrupción e impunidad no ganaron y no pasaron a segunda vuelta. La motivación política en realidad es eso. Lo que hicieron es empezar a torpedear —el proceso electoral— con acciones legales, que si hubiese Estado de derecho aquí en Guatemala y se respetaran los procesos adecuados, pues no deberían tener cabida en este momento. Pero el problema es que como tenemos una captura institucional del Estado, pero particularmente expresado en el sistema de justicia, pues empezaron a darle trámite a estas acciones de amparo y le ordenaron al Tribunal Supremo Electoral que todavía no declare que la primera vuelta concluyó.
¿Amenaza la decisión de la Corte la integridad de las elecciones y de los resultados?
No solo amenaza eso, sino que amenaza absolutamente todo el modelo de cómo se ejecuta la democracia en Guatemala, porque la forma en que se realiza es que se integran Juntas Receptoras de Voto el día de las votaciones, con ciudadanos voluntarios que no tienen vinculación con partidos políticos. El problema es que después empiezan a amenazar penalmente, el resto de partidos políticos que no ganaron, a estas Juntas Electorales Receptoras, que son ciudadanos comunes. Entonces, el temor es que en una segunda vuelta o para los próximos procesos electorales, ya no hayan personas que voluntariamente quieran ir a ofrecer su tiempo y, por lo tanto, se cae todo el modelo democrático en Guatemala.
¿Tiene la Sala Constitucional la competencia para emitir este tipo de medidas?
No, no tiene competencia para eso. En el fallo que emitió la Corte de Constitucionalidad fue decir, por un lado, reconocer que no tiene competencia y por lo tanto traslada una acción de amparo a la Corte Suprema de Justicia. Y por otro lado, otro amparo lo traslada a un juzgado. Pero mientras hace eso, de todas formas ordena al Tribunal Supremo Electoral que no declare oficial el resultado de la primera vuelta. Entonces eso es peligrosísimo, porque en realidad está prácticamente legislando la Corte de Constitucionalidad. Está diciendo —la Corte— que es autoridad electoral. Está por sobre la voluntad expresada por el pueblo de Guatemala en las urnas. Está tomando un control autoritario absoluto, que es peligrosísimo para todo el andamiaje democrático y republicano en el país. Es un precedente nunca antes visto.
Si bien la resolución de la Corte establece que la revisión de los votos debe realizarse respetando los plazos legales para que la segunda vuelta se celebre el 20 de agosto, existe el temor de que esto difiera indefinidamente la segunda ronda. ¿Qué implicaciones tendría esto?
Definitivamente no pueden cambiar la fecha de la segunda vuelta, porque es una fecha constitucional, pero sí pueden retrasar el proceso de revisión de las actas de los votos de la primera vuelta y, por lo tanto, podrían alargar tanto el periodo que no se permita hacer campaña y se iría a una segunda vuelta en medio de un proceso muy dudoso. Esto a su vez podría provocar varias cosas. Podría realizarse la segunda vuelta y respetarse el resultado que salga o se podría entrar en un impasse en el que se quede indefinidamente el Gobierno de Alejandro Giammattei hasta que haya condiciones para hacer un nuevo proceso electoral.
Lo que quieren hacer los demás partidos políticos, al no declararse oficial los resultados de la primera vuelta, es empezar a torpedear con denuncias el proceso de inscripción del Movimiento Semilla como partido político en la segunda vuelta, como ya se expresó en las urnas. Esto podría provocar que declaren por decreto a Sandra Torres como presidenta para el próximo periodo o suben de lugar al candidato del tercer lugar, que es el candidato del oficialismo.
Fiscales y miembros del Movimiento Semilla denunciaron irregularidades en el proceso de revisión de las actas de los resultados electorales. ¿Qué tipo de irregularidades se han presentado en el proceso de recuento?
El fiscal nacional del partido oficial, Vamos, llegó a interferir en todos los procesos con el objetivo de buscar que se abran las urnas en donde están consignados los votos del pueblo de Guatemala. Eso es intocable, no se puede tocar bajo ninguna circunstancia. Hay una clara orden del Ejecutivo de mandar a sus fiscales a alterar el proceso.
¿Cuál ha sido la reacción de la ciudadanía ante la suspensión de los resultados de las votaciones?
La reacción de condena a este intento de robo de elecciones por parte del oficialismo y partidos afines ha sido masiva y contundente. Hemos visto expresiones de rechazo en las calles, en redes sociales, en comunicados. Seguramente habrá una movilización.
¿Cómo ha reaccionado la comunidad internacional ante la decisión de la Corte y cómo ha impactado en el Gobierno?
Todas las misiones de observación electoral han expresado que efectivamente, como en cualquier proceso electoral, hubo algunas irregularidades en algún municipio del país, lo cual suele pasar en todas las democracias en el mundo, pero que eso no afecta para nada el resultado electoral. Esta no fue una elección cerrada entre 49% y 51% de dos candidaturas presidenciales, sino que hubo una amplia ventaja entre las dos candidaturas que estamos en los primeros dos lugares y el resto de candidaturas.
El pasado 25 de junio el candidato del Movimiento Semilla, Bernardo Arévalo, sorprendió a todos tras pasar a la segunda vuelta junto con la ex primera dama Sandra Torres ¿Cuál es la propuesta de Semilla y Arévalo para Guatemala?
Lo más importante es precisamente combatir la corrupción en todos los ámbitos de la administración pública del Estado. Y eso yo creo que es precisamente lo que incomoda. Movimiento Semilla surgió a partir de una movilización popular en 2015 que terminó por provocar la renuncia de quienes estaban en ese momento en la presidencia y vicepresidencia del país por cometer actos de corrupción. También empezar a trazar una ruta para recuperar la educación pública, la salud, un mejor clima de negocios. Combatir la captura también del mercado y de la economía, que está plagada de monopolios, oligopolios y otras imperfecciones, y que el mercado empiece a funcionar para para la gente que realmente es eficiente. Empezar a combatir las crisis más urgentes, incluyendo la pobreza, la desigualdad, y la falta de oportunidades.
¿Qué perspectivas tienen como Movimiento Semilla de una segunda vuelta electoral bajo las condiciones que estamos viendo en este momento?
El resto de partidos políticos que han sido aliados durante estas últimas décadas seguramente se van a alinear, y ya lo están haciendo, en contra de Movimiento Semilla. Pero nosotros tenemos claro que nuestro objetivo no es construir alianzas con estos partidos asociados al régimen, sino que más bien con el pueblo de Guatemala, que además ha expresado su voluntad no solo en las urnas, sino que en apoyo en diferentes expresiones.
¿La impugnación de los comicios en Guatemala es una grave amenaza a la democracia? ¿Qué está en juego en estas elecciones para el pueblo guatemalteco?
Sin duda alguna es una grave amenaza a la democracia en general. Esta era la última variable para instaurar una dictadura de corrupción e impunidad en el país. El Ejecutivo ha comprado a la mayoría del Congreso, hay persecución, no hay libertad de expresión, hay persecución a periodistas, a la oposición, hay fiscales y operadores de justicia que están exiliados. En estas elecciones está en juego la democracia, el futuro, y la esperanza que fue a depositar el pueblo de Guatemala en las urnas. Se pueden tumbar toda la democracia en el país.