26 de marzo 2023
Horas después que el régimen nicaragüense exhibió al obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, visiblemente delgado, pálido y con uniforme de prisionero; el obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio José Báez, demandó nuevamente su liberación y señaló la crueldad con que ha sido tratado.
“A los que han encerrado y han querido apagar la voz de Rolando”, advirtió Báez durante su homilía dominical en el templo de Santa Agatha, en Miami, “no se engañen, ustedes son los verdaderos prisioneros, prisioneros de la maldad y de la mentira, de la ambición y la crueldad. Quiten la piedra de la cárcel y liberen al obispo”.
El líder religioso valoró que un régimen que “se alimenta de violencia y se engaña con el cinismo”, no podrá contra la nobleza y la dignidad del obispo Álvarez, la oración del pueblo de Dios y el clamor mundial por su liberación.
Esa presión ejercida por organismos de derechos humanos y la comunidad internacional fue lo que obligó al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo a dar una prueba de vida del obispo, quien no había sido visto desde el 10 de febrero pasado, cuando la justicia del régimen lo condenó a 26 años y cuatro meses de cárcel.
Monseñor Álvarez también fue declarado por el régimen como “traidor a la patria” y despojado de su nacionalidad nicaragüense, un día después que el prelado se negó a abordar un avión que lo trasladaría a Estados Unidos junto a otros 222 excarcelados políticos que fueron desterrados.
Luego de 43 días de no saber nada de monseñor Álvarez, el régimen difundió este sábado un video en el que aparece el líder religioso compartiendo con sus dos hermanos durante una visita familiar. Al ser consultado sobre cómo se encuentra responde: "Gracias a Dios bien, con mucha fuerza interior, con mucha paz en el Señor y la virgen santísima".
Acto seguido, el entrevistador dice al obispo Álvarez que le alegra verlo bien y saludable, por lo que el líder religioso responde entre sonrisas "¡Ah! Bueno. ¿Me ves bien? ¿saludable? ¿y la cara como me la ven?".
Para monseñor Báez, el obispo Álvarez es “un amigo de Jesús que han encerrado en un sepulcro”. Por lo que “a él también hoy Jesús le dice: sal fuera, Rolando, y vive, deja la cárcel y vuelve a ser pastor de mi pueblo. Yo te sacaré de ese sepulcro. El cinismo, la mentira y la maldad de tus captores, no podrán retenerte por más tiempo”, subrayó.
En esa misma línea, monseñor Báez instó a los pueblos oprimidos y desterrados a que “no acepten ser enterrados en una normalidad artificial creada por la represión, no se queden en el sepulcro del silencio paralizados por los miedos, no acepten el sepulcro que mata el futuro y deja todo en manos de los tiranos”. Aseguró que Dios “abrirá sus sepulcros” para que no queden atrapados ante las amenazas de los poderosos.
“Hoy Dios le dice a nuestro pueblo oprimido, temeroso o desterrado: Pueblo mío, sal fuera. Déjate tomar por mi mano y lucha sin cansarte. Tu vocación es la libertad; tu vida está hecha para el amor y la solidaridad; tu sueño más hermoso es la paz cimentada en la justicia. Sigue soñando, sigue luchando, que yo estoy contigo, pueblo mío. No estás solo, yo te tomo de la mano para que resucites después de haber sido crucificado”, expresó el obispo Báez, quien se encuentra en el exilio desde 2019 por una solicitud del papa Francisco.