19 de enero 2023
Casi cien personas durmieron la noche de este miércoles 18 de enero en las afueras de la Dirección General de Migración y Extranjería de Costa Rica, en San José, informaron a CONFIDENCIAL miembros de organizaciones que apoyan a migrantes y nicaragüenses que hacían parte de quienes esperaban por un cupo para solicitar refugio.
La escena se ha repetido desde hace varios días y la mayoría de los afectados son nicaragüenses que acuden a la sede central de Migración para lograr uno de apenas 50 cupos que las autoridades otorgan diariamente, según aseguraron las fuentes, que además coincidieron en que la aglomeración se produce a raíz de que el presidente Rodrigo Chaves anunció a finales del año pasado nuevas disposiciones y trabas para solicitantes de refugio en Costa Rica, incluyendo la eliminación del otorgamiento de citas para solicitudes de refugio vía telefónica y vía sitio web.
"La situación es infrahumana", describió Hanssel Vásquez, joven nicaragüense solicitante de refugio, quien llegó a Costa Rica en 2021 y acompañó durante dos noches a su hermano, -que arribó hace unos días- a buscar una cita esta semana.
"Esperas en la calle, en el costado derecho del edificio de Migración. No hay acceso a ningún tipo de inodoros ni a agua, porque estás a la intemperie. Hay gente que viene desde Alajuela, Heredia, a hacer el trámite y no tienen que comer. Hay quienes pasan dos o tres días y solo hacen dos tiempos de comida gracias a las organizaciones que llegan a asistir. Soportan frío y duermen en cartones", dijo Vásquez, que además contó que se trata, sobre todo, de migrantes nicaragüenses, cubanos y venezolanos.
"De hecho, dos personas se desmayaron ayer en la tarde, porque solo habían comido unos bocados y se descompensaron", destacó Vásquez.
Denyssa Rodríguez, nicaragüense solicitante de refugio y miembro de Asociación Intercultural de Derechos Humanos (Asidehu), estuvo en el sitio la noche de este miércoles y contó a unos 95 migrantes, incluyendo a personas de la tercera edad y algunos niños. "Hay quienes están desde el lunes esperando. No hay ninguna condición de salud o higiénica. Hay quienes comen, otros no. En la mañana en las oficinas de Refugio sí les prestan los baños a algunos, otros pagan para usar un baño de un parqueo privado, otros hacen sus necesidades fisiológicas al lado de un árbol", expresó Rodríguez, quien además denunció que no hay trato preferencial para la niñez y adultos mayores.
Sobre el perfil de los nicaragüenses que esperan por una cita de refugio, Vásquez y Rodríguez coincidieron en que es mixto: incluye a quienes salieron por persecución política por parte del régimen Ortega Murillo, a trabajadores estatales agobiados por las presiones partidarias y por la difícil situación económica, y a migrantes económicos. La gran mayoría llegó a Costa Rica hace pocos días.
"Los funcionarios de Migración, que se portan muy amables, llegan entre las doce de la noche y la cinco de la mañana a asignar los cupos", dijo Vásquez.
"Es gente que no tiene que comer y está con la esperanza de sacar esa cita para poder trabajar en el país", apuntó Vásquez, aunque en realidad, a partir de los cambios anunciados por el actual Gobierno costarricense, el permiso laboral ya no se brinda de manera expedita, sino que ahora deben esperar un tiempo.
"Según el decreto (con los cambios en la política de solicitud de refugio) las personas tienen 30 días desde que entran a Costa Rica para solicitar el refugio, después no tendrán la oportunidad. Esto les obliga a hacer largas filas para optar por un cupo y solicitar el refugio. Ayer (martes 17 de enero) había más de 150 personas haciendo fila. Antes el trámite se hacía a través de llamadas, evitaba la saturación y que se dieran condiciones inhumanas como las que se están dando en este momento", señaló Jhoswell Martínez, presidente de Asidehu, quien grabó un video reportando desde la zona este miércoles 18 de enero. "No son condiciones humanas para atender a quienes buscan protección internacional", concluyó.
CONFIDENCIAL envió consultas sobre esta situación a la Dirección de Migración y Extranjería de Costa Rica, pero al momento de publicar la nota aún no había una respuesta.
Desde 2018 hasta noviembre de 2022, Migración costarricense registraba 193 708 solicitudes de refugio de nicaragüenses. Constituyen el 90% del total de solicitudes.
El presidente Chaves dijo en noviembre pasado que tomaría medidas “para evitar que nuestro régimen de refugiados sea aprovechado de manera incorrecta por personas que lo que quieren es emigrar a Costa Rica, quedarse aquí para trabajar”, ante lo que él describió como falta de ayuda económica por parte de la comunidad internacional para atender a las decenas de miles de solicitantes de refugio que se encuentran en el país.
“Esto ya lo temíamos. Advertimos que esto iba a ocurrir, dijo a CONFIDENCIAL Adilia Eva Solís, presidenta del Centro de Derechos Sociales de la Persona Migrante (CENDEROS), refiriéndose a la precarización de la situación de los solicitantes de refugio ante las medidas tomadas por el Gobierno de Costa Rica. "Las organizaciones que trabajan por los derechos de las personas migrantes estamos preparando acciones. En primera instancia estamos dirigiéndonos a la directora de Migración, vamos a esperar cuál es su respuesta y también estamos haciendo las consultas a la Defensoría de los Habitantes para que tomen acciones", dijo.
Las declaraciones del gobernante fueron cuestionadas por organizaciones defensoras de los derechos de migrantes, personas refugiadas y solicitantes de refugio.